Salvando a un Desgraciado Slytherin #2

5

AVANCE

—PEQUEÑOS GRANDES PASOS—

Sopló el mechón de cabello que molestaba en sus ojos, incapaz de mover se más de lo permitido debido al ungüento que en su piel reposaba, y que por cierto olía asqueroso. Para su mala fortuna la poción que cayó sobre él causo una reacción alérgica horrible en su piel y apenas esta había sido quitada por Madame Pomfrey, unas horribles ronchas aparecieron por todas las partes de su cuerpo que habían entrado en contacto directo con la sustancia.

Decir que James odiaba estar en esa situación era poco, sin embargo, prefería pasar toda una maldita semana en enfermería antes de que aquella cosa hubiera caído sobre Severus y Lily. El amor lo tenía jodido, eso estaba más que claro.

Gimió con molestia cuando una horrible picazón se hizo presente en su cuello, sabiendo que no podía moverse, y que probablemente Madame Pomfrey estuviera en su quinto sueño a esas horas de la noche, se resignó a aguantar sus ganas de rascar con fervor aquella parte de su cuerpo.

—Me vengaré horriblemente del imbécil que se le haya ocurrido hacer esa estúpida broma de mierda. — murmuró para si mismo, sus ojos fijos en el alto techo de piedra de la enfermería.

—No creo que Black este muy contento con él hecho de que lo llames imbécil.

La cabeza de James viró bruscamente sobre la almohada buscando al portador de la suave voz que había interrumpido su diatriba.

Severus estaba parado a los pies de su cama en la enfermería, no traía sobre sí su túnica escolar, en cambio el suéter de Slytherin al menos dos tallas más grande que él se encontraba protegiéndolo del frío. Su cabello se encontraba recogido en (según su perspectiva de vista) un pequeño chonguito bajo, resaltando sus afilados pómulos que parecían brillar bajo la luz de la luna, que por pura casualidad bañaba la delgada figura de Severus, regalándole un aspecto casi angelical que resecó su boca.

—Hay muchos Black's hoy en día en Hogwarts, creo que deberías ser más especifico con respecto a cuál de todos estas señalando.

El fantasma de una sonrisa se asomó por el imperturbable rostro del pálido adolescente, James se sintió ligeramente complacido por ello y anheló el poder ver una sonrisa en los rosados labios de Severus.

—Creo que ambos sabemos de qué Black estamos hablando, Potter. —la mueca de disgusto que acompañó el pronunciamiento de su nombre no le gusto en absoluto.

—Ah, por supuesto...— James aparto la mirada del Slytherin y dejó que sus ojos volvieran a vagar por el techo de la enfermería. — Aunque debo discrepar de tu acusación...—murmuró con aquel tono que volvía loco a Peter, el tono de heredero sangre pura que su madre le obligaba a usar cada vez que estaban frente a una persona importante.

—Supuse que algo como eso saldría de tu boca. — le interrumpió.

Su mirada volvió a posarse en Severus, sus brazos cruzados en su pecho y su bien marcado ceño fruncido, como si de un anciano se tratara. James pensó que aquello no debería ser algo que un adolescente pudiera retratar, sin embargo, en el Slytherin parado a los pies de su cama resultaba extrañamente tierno.

— Regulus Black jamás se rebajaría a torturar a alguien con bromas, Sirius me ha dicho que su hermanito es alguien más político para este tipo de cosas. — el ceño de Severus se frunció aun más, disgustado por la pequeña broma que había hecho. James suspiro con resignación. — Sirius no ha sido, créeme.

—Eso es algo complejo de hacer.

—Lo sé, pero es la verdad. — James se giró todo lo que pudo para dirigir su mirada al único gran ventanal en la habitación. La luna se alzaba orgullosa en medio del cielo infestado de estrellas, pensó que era una imagen preciosa. — Ellos se disculparán contigo eventualmente. Sirius, Remus y Peter. Lo que te hicimos todos estos años... Las maldiciones, los golpes, las burlas... — James no quería mirar a Severus, la vergüenza era grande, aun así, se obligó a hacerlo. — No te merecías nada de eso, Severus.

El Slytherin le miro fijamente, su rostro inexpresivo como siempre hizo imposible saber si le había creído, el silencio reinó en la enfermería por unos largos segundos antes de que el pelinegro asintiera con un simple movimiento de cabeza. Sus delgadas manos se movieron hasta el morral colgado en su hombro, James apenas se dio cuenta de que lo traía, y metió las manos en su interior sacando un pergamino y una varita.

—Tu mapa y tu varita, solo venía a devolvértelo.

Severus camino unos pasos para dejar ambos objetos en la mesa que se encontraba a un lado de su cama. Teniéndolo más cerca ahora, James pudo apreciar el ligero rubor en las pálidas mejillas, probablemente por el frio.

—Gracias por devolverlos. — murmuró.

—Gracias por ponerte bajo el caldero para salvarme. — respondió el Slytherin. — Espero te recuperes pronto, Potter.

James le regalo una ligera sonrisa que no fue respondida, Severus se dio la vuelta y se alejó de él a pasos rápidos.

—Severus. — le llamó, el sonido retumbante de los pasos del Slytherin se detuvo casi al instante en que su nombre salió de sus labios. James ya no podía verlo debido al ángulo en el que estaba recostado, así que no espero mucho antes de continuar hablando. — En el pasado te llame de muchas maneras desagradables y me disculpo profundamente por eso. Quiero que sepas que nunca pensé lo que dije y que, de hecho, creo que eres malditamente hermoso.

El silencio en la enfermería fue abrumador, James solo podía escuchar su lenta respiración y el sonido de los grillos que cantaban en el exterior. Sabía que esto de lograr que Severus lo perdonara era un largo camino, pero a veces deseaba con tu su corazón que las cosas fueran más fáciles.

Los pasos volvieron a escucharse luego de unos minutos y el rechinido de la puerta siendo abierta hizo que todas las esperanzas que James guardaba fueran aplastadas dolorosamente dentro de su pecho. El Gryffindor cerró sus ojos en un débil intento de que las lágrimas no salieran, tomo una gran bocanada de aire para relajarse y al final el sueño terminó venciéndolo.

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Capítulo cortito despues de mil años. El próximo, sin embargo, será narrado desde la perspectiva de otro merodeador.

Voy a estar actualizando algunos de los escritos que tengo en mi perfil, ya que se ha desbloqueado ligeramente mi bloqueo de escritor.

Nos estamos leyendo dentro del día viboritas, los amoo.

-snakevod