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Meses después

Jinx se encontraba ayudando a cargar  las cajas de verduras que cosechaban en la Reserva y comercializaban en el exterior. Era una de las tantas formas que mantenían su economía y actualmente, con la llegada de los multihibridos, su economía prosperaba más que al punto que estaban pro comprar otro gran terreno para expandir aún más reciente nación.

—  ¿Más? —  Preguntó Flame cansado al ver más cajones con frutas y verduras que traían los multihibridos.

— Tenemos una buena cosecha.— Dijo Eery, un multihibrido cuyo ojos rojos y apariencia asustaba a cualquiera pero poco a poco las Especies se fueron acostumbrando a los raros aspectos de ellos.

— Así nos vamos hacer ricos pero necesitamos más ayuda para las cargas de los camiones.— Dijo Book limpiándose el sudor.

Jinx estaba arriba del camión cargabdo las cajas cuando un brusco movimiento lo hizo perder el equilibrio y soltó la caja sin darse cuenta que iba a tropezar y finalmente cayó del camión.

—¡Cuidado!— Exclamó Flame.

Pero Jinx no pudo agarrarse de nada y la caída era inevitable, estaba acostumbrado a los golpes fuertes por su condición,muchas veces llegaba a sangrar y otras veces no quedaba más que un moretón. Los segundos en el que caía fueron largos y cuando creyó que recibiría el dolor eminente, pero sintió dos fuertes brazos sosteniendolo y un latido acelerado.

— Especie.— Dijo una voz dura.

Entonces Jinx levantó la vista y se encontró con los ojos azules eléctricos y una mandíbula dura que solo volvía su mirada más severa que gentil. Era ese macho, el cual le había llamado "fastidioso" y parecía odiarlo cada vez que se veían.

Severe.

—¡¿Jinx estás bien?!— Saltó Flame y corrió a él.

Jinx estaba un poco confundido por el hecho de que el macho apretaba su cuerpo fuertemente contra él, como si temieora que si quería rozara el suelo. No es la primera vez que Severe estaba en el mismo momento e que Jinx sufría accidentes, el macho simplemente era propenso a accidentarse y Severe muchas veces se presentaba para evitarlos ya que generalmente coincidían en los turnos de trabajo pero pocas veces hablaba o decia algo agradable, por lo que Jinx llegó a la idea de que lo odiaba.

— Ehh gracias.— Dijo nervioso pero Severe no se movía.— Ya me puedes bajar.

Severe asintio y lo bajó con cuidado, en el momento en que Jinx se puso de pie, se sintió desequilibrado y casi se vuelve a caer por lo que Severe lo sujetó y Flame se acercó a él para examinarlo.

— Será mejor que te sientes.— Gruñó Flame.— No estás bien.

— Ya pasará...

— Hoy vomitaste.— Gruñó Book.

Durante su estancia en Marcile, mejor dicho su cautiverio, fue herido múltiple veces y muchas de ellas fueron heridas graves, desde casi la perdida de la sensibilidad y movilidad de su mano izquierda hasta un daño bastante importante en uno de sus oídos que lo dejó con pérdidas de equilibrio importante y por lo cual se accidentada muchas veces.  Generalmente podía sobrellevarlo bien, pero había días que la medicación no era suficiente y terminaba con peores caídas o con muchos mareos que llegaba al vómito.

— Vuelve al edificio, no queremos que te lastimes.— Sugirió Book y luego llamó a Wind con una señal de manos.— Nosotros nos encargos.

— Son muchas cajas...

— Más de nosotros van a venir a ayudar, nos dimos cuenta que son muchas.— Dijo Eery.

— Y Sorrow está aquí, ayudando también.— Dijo Book.

Sorrow un macho de la zona salvaje bastante particular. Tenía días en que era un macho muy sociable y eran esos días en los que se prestaba a ayudar en lo que sea, pero había días en que era totalmente un macho salvaje y poco razonable, dónde no quería compañía. Se entendía que él sufrió mucho, como todos, sin embargo a pesar de ser de la zona salvaje y un fallo, él peleaba todos los días por ser alguien mejor y eso inspiró a muchos salvajes tratar de volverse más sociables y útiles en la comunidad, aunque claro, seguían siendo salvajes y odiaban a los humanos pero eran más sociables entre las especies y los múltihibridos, parte de ese cambio tenía que ver con qué Alpha, aún trastornada, había incentivado a qué los de la zona salvaje necesitan ser tratados como machos y no como machos salvajes.

— Está bien, iré al departamento.— Gruñó Jinx levantándose y se sintió por un momento perdido.

¡Demonios!

Vamos.— Gruñó Severe tomandoro por la cadera y Jinx iba a discutir por su agarre pero reconocía que no podía mantenerse de pie con seguridad.

Severe lo apretaba con seguridad mientras lo llevaba. Realmente el multihibrido lo co fundía porque siempre que tenía la posibilidad de frustrar sus planes, él lo hacía, pero si se trataba de su seguridad era el primero en moverse. Tal vez lo detestaba mucho pero no era tan cruel, aún así le parecía extraño.

— Espera.— Gruñó Jinx recostadose en una pared y agachó la cabeza para respirar mejor y evitar vomitar.— Llévame al Centro Médico, el doctor Harris me dará algo.

— Pensaba llevarte ahí.

Siempre hablaba con dureza, era como si fuera un pierda que hablaba y su voz no podía mi rozar ni a lo suave ni a lo amigable, muy distinto a él que le gustaba bromear y jugar, especialmente con la hembras y las mujeres y era por eso que era uno de lo machos más divertidos y amigables aunque también uno de los más solicitados sexualmente.

— Vamos.— Jinx dejó que lo vuelva a agarrar y Severe esta vez lo llevó un poco más rápido.

Sin embargo, al llegar al Centro Médico, de encontraron con que los doctores estaban en una junta importante y por eso las enfermeras estaban a cargo pero, para el problema de Jinx si o si necesitaba al doctor Harris.

— Mejor acuéstate en la camilla.— Dijo Midnight y luego le trajo un vaso con cubos de hielo para calmar las náuseas.— Llamaré al doctor en cuanto termine la reunión, no demorará mucho.

— Gracias Midnight.— Gruñó el felino acostándose y tomando un cubo para dejarlo en su boca, esperando que se deshaga en ella. Fue entonces cuando vio que Severe se estaba acomodando en una silla al lado de él.— ¿No tienes que trabajar?— Dijo con dificultad por el hielo.

— Esperaré a llevarte.

— No es necesario, yo puedo...

— Esperaré a llevarte.— Gruñó molesto y sin dar lugar a una discusión.

— ¿Por qué estas haciendo esto?— Gruñó Jinx confundido.— ¿No te caigo mal acaso?

Severe  inclinó la cabeza y lo miró por un momento con mucha atención. Jinx sintió que esa mirada lo recorría por completo, era parecida a la mirada de las hembras o de las mujeres que le dan cuando quieren sexo. Sin embargo, tal vez lo esté confundiendo, el macho de por sí ya era confundí para agregar más a la lista.

— Eres molesto.— Dijo finalmente el multihibrido y Jinx apretó el puño con ganas de estamparlo contra la cara del multihibrido, pero eso sería ser suicida.— Pero... Eres necesario.

— ¿Necesario?

— Importante.

— ¿Importante? Solo soy un macho tonto.

— Lo eres.— Aceptó Severe.— pero importante para tus amigos. Ya se perdieron muchas vidas como para incrementar más los números.

—  Entiendo.

— no lo haces.— Volvió a discutir el multihibrido.— Pero no importa.

— Siento que hablas en clave, jamás puedo entenderte.

— Es mejor.— Gruñó Severe .— si me entendieras, me despreciarias más.

—¿Por qué?

Severe no contestó y Jinx simplemente no quería seguir hablt algo que no tenía sentido, se sentía muy cansado y con ganas de volver a su cama. Jinx cerró los ojos y, tal vez fue su imaginación, pero sintió que Severe lo olfareavs o se acercaba más a él, aún así no abrió los ojos porque le pareció inecesario, Severe nunca haría eso.

018:Severe (nuevas especies) 0.3Where stories live. Discover now