El gato en la ventana [Shadowpeach/LMK]

Capítulo 7: Huir.

Tal cual como MK lo esperaba, Wukong y Macaque no son tan diferentes, tienen cosas en común, como el hecho de que ambos huyen de los problemas personales.

—No.—

—¡Vamos, Mac! Sé que se oye terrible, pero es la verdad.—

Macaque estaba debajo de la cama, mientras que MK estaba en el suelo agachado, buscando la manera de agarrar al gato y sacarlo de allí. 

Luego de que Wukong se fuera, MK entró a su apartamento, en donde luego de un rato, había aparecido el gato a través de un portal de sombras. Finalmente el chico habló un poco con el mono, diciéndole que aunque el rey no tenía planes de hablar del pasado, quizás sería bueno prepararse para cuando consiga hacerlo cambiar de opinión.

Básicamente MK le propuso hablar con Wukong para arreglar sus diferencias, esta vez, de verdad. Pero el gato no reaccionó de una manera muy feliz que digamos. 

Así es como llegamos a este momento.

—No voy a salir.—Dijo el gato.

—¡Algún día vas a salir! ¿Cómo harás para comer?—

—Esperaré a que te vayas a trabajar.—

—¡No puedes estar hablando enserio!—

—Oh, si. Estoy siendo realmente serio con esto, chico.—Respondió Macaque.—Una cosa es... Ya sabes, hablar las cosas contigo, otra cosa es hablar con el culpable en cuestión.—

—Entiendo que tengas miedo, pero esconderte no ayuda en nada.—

—De hecho, si ayuda. Me ayuda a mantenerme vivo, por ejemplo.—

—Mac...—

—Aprecio tus buenas intenciones, pero no creo que... Él quiera hablar.—

—Tu tampoco querías hablar antes.—

El gato le dio la espalda, acomodándose de manera que solo veía a la pared. 

—Mac, si te sigues escondiendo, nunca habrá un cambio.—

—Quizás no quiero un cambio.—

—¿Entonces qué planes tienes? ¿Vivir como un gato para siempre? ¿Evitarlo toda la vida?—

—No suena a una mala idea.—

—Macaque.—MK dijo su nombre seriamente.

—...Lo sé.—Fue lo único que dijo el gato.

—Puedes esconderte por ahora.—MK se levantó del suelo y caminó a la puerta.—Pero ya que no vienes por tu cuenta, voy a decirle a Wukong, que, de hecho, sé dónde estás.—Terminó de decir mientras abría la puerta.

Lo que MK no esperaba es que Macaque saliera de debajo de la cama y corriera hacia afuera, pasando por los pies del chico y saliendo de allí, siendo perseguido por el niño.

—¡Espera, Mac!—Se alertó, siguiéndole.

Justo en ese momento, Monkey King había regresado en su nube, habiendo recitado toda una larga hoja de disculpas para hablar con el chico, lo que no esperó es ver como MK iba detrás de un gato negro, bajando de las escaleras. 

—¡Monkey King, atrápalo!—Pidió MK mientras perseguía al animal.

El rey se puso nervioso al recibir esa orden, en realidad no sabía lo que estaba pasando, y simplemente el gato corrió hacia el lado contrario donde estaba el mono de piedra, quien hizo caso a su estudiante y comenzó a perseguirlo también, logrando con un salto agarrarlo con ambas manos.