Epílogo

183 13 12
                                    

Momentos después de que Ceres se marchara comentando que debía hablar con los otros genios, Clef se apresuro a salir de aquella cabaña para llegar lo más rápido posible al castillo de Cefiro y ver a Marina para arreglar las cosas, estaba esperanzado y realmente feliz después de la conversación que había tenido con el dragón.

Mientras tanto en el castillo Marina abría sus ojos despacio para encontrarse con la mirada preocupada de Ascot que se encontraba sentado al lado de su cama observándola dormir y moverse inquieta.

-Ascot…-

-Marina, como te sientes?- El chico le sonrió con dulzura mientras tomaba su mano

-Me duele la cabeza…-

-Te pondrás bien, se que te recuperaras pronto, eres una chica fuerte, la más fuerte que conozco-

-Siempre eres tan bueno y tierno conmigo… ojala me hubiese enamorado de ti-

-No digas esas cosas, amas a Guru Clef y eso está bien para mí- Ascot le sonrió con tristeza apartando su mirada

-Creo que Clef no me ama…-

-Por supuesto que te ama, no dudes nunca de él aunque se haya comportado como un completo tonto-

-Definitivamente eres tan dulce y tierno… no podría vivir sin un amigo como tu-

Marina se esforzó para regalarle una pequeña sonrisa al invocador y apretar un poco su mano en señal de afecto, pero no se esperaba que Ascot se pusiera de pie de forma repentina solo para acercarse a ella y tomarla entre sus brazos cargándola.

-No te asustes, no te hare nada malo Marina-

-Pero es que me has sorprendido Ascot, que haces?- Marina estaba confundida mientras se aferraba débilmente al cuello de Ascot teniendo miedo de caer

-Te sacare de aquí, iremos a dar un paseo pero como estas débil para caminar, entonces yo te llevare-

-No es necesario Ascot, en serio, además no tengo ganas de ir a ninguna parte-

-Lo siento Marina pero no escuchare negativas, necesitas un cambio de ambiente y salir de esta habitación, no puedes pasar tu vida aquí durmiendo hechizada, no soporto verte de esta forma, además quiero hacerte sonreír y que tengamos un agradable momento-

Marina solo pudo asentir con su cabeza mientras se dejaba llevar por Ascot en sus brazos; el chico caminaba lentamente sintiendo como la mujer se aferraba con mucha suavidad a su cuello, ella estaba bastante débil y eso lo preocupaba mucho, quería tratar de animar a Marina pero al parecer no funcionaba y fue mucho peor como el ánimo de ella decayó rápidamente al ver el terrible estado del planeta.

-Es… es mucho peor de lo que pensé… yo hice esto?-

-No es tu culpa Marina, has sufrido mucho-

-Lastime a Cefiro Ascot, todos están sufriendo y yo solo me he echado a morir-

-Por favor no llores-

Ascot la observo con mucha preocupación mientras la llevaba a uno de los jardines y la bajaba lentamente para sentarla en el borde de la fuente y así poder limpiar sus lágrimas con su mano tratando de tranquilizarla.

-Ascot, debo hacer algo, no puedo permitir que las cosas sigan así-

-Entiendo tu desesperación Marina pero por el momento creo que debes de recuperarte antes de cualquier cosa, tu salud está muy frágil-

-No puedo esperar nada Ascot, mira como esta Cefiro… mi amado planeta está sufriendo y es mi culpa, tengo que solucionarlo, por favor llévame a la habitación de la corona, necesito rezar-

Mi nuevo Cefiro 1Where stories live. Discover now