Él:
Llegue a la casa de Irene, la fiesta parecía un poco fuera de control, había una gran multitud en el jardín de la entrada, no parecía en nada que solo fuera una reunión de algunos cuantos amigos. Estacione mi motocicleta y le envíe un mensaje a Elizabeth para que saliera de la casa, pero pasaron unos minutos y no obtuve respuesta solo las dos palomitas azules que indicaban el "visto".
— ¿Alex?... al final si viniste— se acercó Irene hasta la motocicleta con un vaso de alcohol en la mano.
— Hola... solo vine por Elizabeth, me comento que no se sentía bien y que quería irse a casa. ¿Podrías decirle que ya estoy aquí?
— No, dile tú, no soy mensajera de nadie— se tambaleó un poco por los efectos de la bebida — y no creas que soy tonta, sé lo que me ocultan todos ustedes –gritó– hoy he descubierto muchas cosas sobre ustedes dos— me señalo— son unas fichitas llenas de mentiras y secretos, tanto Elizabeth, Daniel y tú. Aunque creo que la peor es tu noviesita... esa que se dice mi "mejor amiga"— se rio un poco.
— No entiendo de qué hablas, deberías de dejar de beber...
—! No me digas que hacer¡...!
—Así déjalo, creo que mejor iré a buscarla yo— baje de la moto, deje mi casco y camine hasta la puerta de la entrada dejando a Irene y sus incoherencias atrás, pidiendo a los cielos no toparme con Ricky, que bastante se parecen hoy los hermanitos, andan insoportables.
— Solo espero que no te lleves una sorpresa, al final me caes bien Alex.— gritó y yo entre a la casa donde el problema más grande era caminar entre todas las personas que había, tome mi teléfono y marque el número de Elizabeth, sonó un par de veces antes de que me tomara la llamada.
—Alex... espérame ya casi salgo— su voz sonaba algo preocupada al otro lado de la bocina.
—¿Dónde estás?, me tope a Irene al entrar a su casa y no quiso decirme donde te encontrabas, parece que está molesta con nosotros y no sé por qué.
— No tengo idea de lo que le sucede, se ha comportado demasiado extraña últimamente, creo que la amistad con Yésica le está afectando...— dio un gran suspiro— Alex por favor, prométeme que no te enojaras— me detuve antes de subir las escaleras.
— ¿Qué pasa?— tomé aire para seguir escuchando, no sé por qué tenía el presentimiento que el "no te vayas a enojar" sería todo lo contrario.
— A Irene se le ocurrió la brillante idea de encerrarme en su habitación ...— se quedó en silencio unos segundos— Alex... me encerró, pero no estoy sola— hizo una pausa antes de decirme con quien se encontraba— ella también metió aquí a Lucas — se quedó en silencio unos segundos— te juro que...
— ¿Te encuentras bien?— la interrumpí y comencé a subir la escalera sin cortar la llamada— ya estoy aquí no te preocupes, voy para allá.
Tengo que aceptar que si estaba molesto, aunque para ella tal vez sonaba tranquilo, el hecho de que Irene se estuviera comportando así con alguien que según ella considera su hermana me hacía enojar bastante y el solo hecho pensar que Elizabeth se encontrara sola con Lucas me daba escalofríos. Llegue hasta el pasillo donde se encontraba la habitación de Irene, había un grupo de chicos riéndose entre ellos, porque tenían la puerta bloqueada, me acerque como si nada y los observe fijamente.
