xiii.

2K 284 176
                                    

—¿Qué tal, Isagi?

—¿Dónde rayos estabas?

Kurona sonríe con diversión, mientras que balancea sus piernas que cuelgan al borde de la mesada de la cocina.

—Uy, suenas molesto.

—No estoy molesto.

—Está caliente. —comentó Bachira, apareciendo por detrás de Isagi, quien se sonrojó casi por completo a causa de las palabras de su amigo.

—¡No estoy caliente! —Se quejó golpeando con su mano al de ojos amarillos.

—Está halagado porque un desconocido muy guapo lo estaba fotografiando. —explicó Meguru, acariciando el lugar donde recibió el golpe.

—Vaya. Al parecer a todos nos va muy bien esta noche. —dijo Ranze con alegría.

—Por eso desapareciste en medio del juego ¿No, tonto? Seguramente estuviste detrás de ese chico del que estabas hablando. —Isagi acusó mientras lo señalaba con el dedo.

—Ví una oportunidad y no la iba a desperdiciar.

—¿Al menos conseguiste algo bueno?

—Depende de la opinión de cada quien.

—¿Por qué?

—Me besó y después me golpeó.

—¡Qué romántico! —chilló Bachira.

—Un momento muy especial. —Kurona se rió pero no parecía ni un poco molesto.

—Te ves feliz. —opinó Isagi.

—Estoy feliz. —respondió el de ojos rosas, pasando la mano por su cabello antes de sonreír con algo de emoción. —Él me besó porque quiso hacerlo, entonces, significa que tengo una oportunidad.

—¡Qué bonito es todo! —Meguru habló emocionado antes de agarrar a Yoichi por los hombros y sacudirlo con algo de fuerza. —¡El amor está en el aire esta noche, Isagi! ¡Debes intentar algo con el fotógrafo aterrador!

—¿No qué era guapo? —preguntó Ranze.

—Muy guapo, pero no quita que tenga cara de querer matar a alguien.

—¿Y aún así quieres que intente algo con él? —preguntó Isagi algo nervioso.

—Claro, a mí me miraba como si quisiera golpearme. A tí te miraba como si quisiera golpearte pero por detrás ¿Me entiendes?

Ranze escupió su bebida y empezó a toser entre risas mientras que Yoichi se sonrojó, cubriéndose el rostro con ambas manos, dejando escapar un pequeño grito de pura frustración.

—¡Maldición! ¡¿Podrías callarte?! ¡Y ya deja de reírte, Kurona!

—Solo digo la verdad. —Se excusó Bachira.

—Carajo. Esto es tan divertido. —El de cabello rosa siguió riéndose por lo bajo mientras intentaba apartar las lágrimas que se acumularon en sus ojos luego de toser. —Si te estaba mirando así, entonces, dime Isagi, ¿Qué haces aquí con nosotros?

—Está aquí con nosotros porque es un cobarde. Y no se atrevió a acercarse al chico.

—Eso no es...

—Isagi, la cobardía no te llevará a ningún lado.

—Lo sé pero...

—Pudiste ir a bailar con él pero preferiste venir aquí por un trago que no te he visto beber. —acusó Bachira.

—¿Necesitas un trago para darte valor? Uhm, es respetable pero trata de no beber demasiado. Lo lindo de esto es recordar el momento a pesar de la resaca.

Perspectivas. |RinSagi|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora