12 𝑹𝑨𝒁𝑶𝑵𝑬𝑺 [JENNA ORTEGA]

03

Tenía catorce años cuando me dio varicela, de solo recordarlo me da comezón.

Hailee se había enfermado un año antes, pero le daba miedo visitarme porque no quería que la contagiara y se enfermara otra vez, y lo entiendo, tener picazón en todo el cuerpo realmente es algo jodido.

Mamá se aseguraba de que mis hermanos no se acercaran a mí para no contagiarme, nadie quería acercarse a mí, y si lo hacían, se aseguraban de estar a cinco metros de distancia, me sentía como un animalito con un virus mortal o algo así.

Pero tú no, tú me visitabas todos los días, sin falta, caminabas de tu casa a la mía solo para verme.

A veces hasta me llevabas rebanadas de pastel, flanes, brownies y sándwiches raros, aunque lamento confesarte que esos últimos casi siempre terminaban en la basura, no soy fanático de la mezcla de frijoles y aguacate.

Veíamos películas de terror, escuchábamos música juntas, jugábamos juegos de mesa o simplemente hablábamos.

Hacías cosas que nadie hacía conmigo ni cuando estaba sano, y no sabía si era parte de tu rareza o sólo estabas siendo amable, pero me gustaba.

Me gustaba saber que no a todos les daba asco o miedo acercarse a mí, me gustaba saber que al menos tenía a una persona con la que podía contar.

Y esa es la tercera razón por la que te odio.

No te importó que estuviera enferma ni que te pudiera contagiar, me visitabas todos los días.

Te odio por haberme cuidado cuando estaba enferma.