𝟎𝟖.

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Habían pasado días desde aquella conversación tan íntima en la habitación de Jungwon.

—Joder ¿es que no sabes hacer nada bien? Que ridículo!—grito Jungwon desesperado, iba por el quinto entrenamiento con cada uno de los príncipes y no veía ningún avance.

—A mi no me hables así imbécil porque te juro que te mato!—le grito de vuelta el sanguinario, encarando al seelie quien tenía los ojos de un color negro con dorado.

—¿Que no te hable como? No te veo quejandote, has algo por primera vez en tu puta inmortal vida de inservible!—y eso fue lo que colmo el vaso del sanguinario quién tomo de la garganta al seelie dispuesto a matarlo, pero de la nada se metieron los licántropos y el mago entre ellos.

—Ehhh, mira como te comportas idiota, que no estamos para ver estupideces y peleas de kinder—Le dijo el licántropo mayor haciéndolo reaccionar.

—Tu cállate el asqueroso hocico, pulgoso.—Le dijo soltando el cuello de un rojo seelie y se volteo con fuego en los ojos hacia los licántropos.

—No vamos a pelear Jake, ya basta.—se metió el licántropo menor, separando el pecho de su hermano y el vampiro.

Y todo se calmo de repente.

—Que inútiles, no pueden tomar una responsabilidad por ellos mismos y tiene que discutir.—Menciono El ángel negro de la nada, un poco mas atrás de Jungwon.

—Tu cállate, que claro, cómo no tienes de que preocuparte, no tienes jodida idea de cómo se siente intentar retener las raíces, las razones para las cuales nacimos, tu no entiendes nada porque la tienes fácil—Le dijo Jake mirándolo mal, tocando sus colmillos.

—¿Que?, ¿que no tengo de que preocuparme?, tu no tienes la jodida idea de cómo se siente terminar la vida de una persona por más inocente que sea, terminar la vida de un animal sin razón aparente, no tienes idea, porque a ti no te importa mientras los vacías—Le dijo hiriente y Jungwon cuando vió que eso comenzaba a calentarse despidió a todos, sacando a Heeseung del lugar.

Corriendo con tan mala suerte que Los papás de los seelies estaban en la puerta hablando con un guardia.

—Oh mierda, Heeseung desaparece o algo—Intento manotearlo haciendo que se devolviera pero era tarde.

—Joven Heeseung, que milagro que lo vemos tan temprano en una reunión.—Hablo el papá de Jungwon siendo seguido por su esposa.

—Señor Yang, he comenzado a llegar más temprano desde hace una semana.—Dijo como si eso no fuera revelante, mirando de reojo las orejas de su pequeño, las cuales estaban rojas, y sus dedos se movían nerviosos tras su espalda.

—¿Ya terminaron Jungwon?—cambio de tema mirando a Jungwon ahora.

—Si.—Respondio cabizbajo.

Y Heeseung gruño para si mismo.

—Espero que seas completamente serio en estos temas, ya hemos hablado de esto, ahora vete a casa—Jungwon no miro atrás y camino con la cabeza baja pasando por el lado de su padre y su madre—Joven Heeseung, que tenga buen día.—Forzó una sonrisa y vió como todos se iban.

Jungwon no estaba bien, y lo presentía.

Jungwon no estaba bien, y lo presentía

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𝗧𝗵𝗲 𝗳𝗼𝗿𝗯𝗶𝗱𝗱𝗲𝗻.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora