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«En lo ocultó del bosque»

Un niño de 8 años, cortaba y agarraba sin problemas la leña que el mismo cortaba,
Caminando hacia una carretilla, aquél niño dejo la leña cuidadosamente sobre otras leñas, evitando que todo cayera.

Cariño! ¡Entra porfavor, va a empezar a llover!

La madre del niño, la cuál tenía una bebé en sus brazos, veía el cielo nublado por la tormenta,
el niño subió su vista al cielo, notando los leves rayos que se presentaban en el cielo.

Tomando la carretilla, se movilizó hacia su humilde morada, el nombre de este pequeño niño,
Con un inició desde lo más bajo, era..

«Izuku Midoriya»
«Edad: 8 años»
«Altura: 1,11Cm»
Izuku era un niño callado y muy pacífico,
Su cabello largo entre tonos verdoso y rojos, le daba un toque exótico,
Una marca de nacimiento en su frente simulando a una llama,
Portaba un kimono rojo algo desgastado, pero aún funcional, en sus orejas colgaban dos pendientes dados por su padre.

Continuando con la narración,
Izuku dejo la carretilla a un costado de la entrada de su hogar, tomando algunas leñas, paso a un lado de su amada madre.

«Inko Midoriya»
«Edad: 27 años»
«Altura: 1,60 Cm»
Inko es una mujer mujer delgada con cabello corto de color verde oscuro, sus ojos del mismo color, a pesar de ser una mujer con mucha tristeza en su corazón, es una madre amable y cariñosa que siempre se preocupa por su hijo y por el bienestar de éste.

Inko teniendo un trapo en su mano, limpió el rostro de su hijo mayor con mucho cuidado.

Inko-- Gracias por tu gran esfuerzo, mí vida. –Dijo–

Izuku-- ....

Izuku abrazo las piernas de su madre, demostrando un gran apegó a ella, viendo el mismo semblante triste en los ojos de su madre, desde que perdieron todo, nunca volvió a ser la misma..

«Si el cielo le considera un deseo, ese deseo sería que su madre sonriera de nuevo»

El protagonista dejó su hacha en la entrada de su hogar, su hogar no era una mansión, era una morada muy humilde, Tan humilde qué tenía aspecto de cualquier momento derrumbarse, pero eso no impidió que la determinación de sacar adelante a su familia en izuku desapareciera.

Izuku caminó hasta un futon, una pequeña esfera verde se encontraba dormida en ella, su gordita y adorable hermana menor, una bebé de casi un mes de vida, llamada «Daiana Midoriya»

Izuku-- ....

Izuku tocó de manera delicada y repetitiva la barriga gordita de su hermana menor,
Un poco más y explotaba..
Pensar eso le dio un poco de gracia, poniendo una diminuta sonrisa.

Inko-- Cariño, ya puse a calentar el agua para que te des una ducha. –Comento–

Izuku--

Inko pudo ver los ojos vacíos de su hijo, verla con una neutralidad enorme, su hijo siempre fue así, nunca había dado sus primera palabras, jamás,
Eso la preocupo mucho, pensado que era sordo-mudo, pero no, simplemente no quería hablar.

Izuku dejo descansar en paz a su hermana menor, entrando por una puerta a lo que vendría siendo una pequeña cocina, en una esquina había un barril de madera la cuál estaba encima de una fogata, el protagonista solo toco el agua notando que todavía se mantenía fría,
Más le dio complemente igual, sacándose la ropa, se metió de un clavado al barril.

ᴛꜱᴜɢɪᴋᴜɴɪ 太陽神Donde viven las historias. Descúbrelo ahora