Oscuridad de la humanidad: personas destruidas en cuerpo, destruidos en el alma a causa de un tormentoso mundo, mundo gobernado por un terror oculto entre tantas mentiras. Muchas personas perdidas en si mismas, dónde la oscuridad amenazaba con acabar con las esperanzas de los no todavía caídos.
Debajo de toda esa oscuridad, caminando sin miedo en medio de toda la oscuridad, la belleza de un arcoíris comenzaba a iluminar el camino de las personas "perdidas". Un verdadero héroe, un héroe que acogió a los pobres desamparados bajo su brazo, acompañando a todos los desamparados a caminar entre todas las oscuridad se volvió un iluminado.
"El iluminado" creador de este culto dónde había solo felicidad, los caídos volvieron a creer. La luz iluminó cientos de vidas perdidas.
Salvo, alimento, hizo creer.
Todo con el esfuerzo de sus manos. Creo un mundo de solamente abundaba la felicidad para aquellos perdidos condenados. Un mundo donde jamás tendrían otra emoción más que felicidad, un mundo sin dolor, un mundo sin tristeza, un mundo sin muerte.
Un mundo perfecto..
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Todo iniciaba en una extensa sala de comedor, tantas personas manipuladas destacó en medio un izuku que aplaudía secamente. Su rostro marcada en una sombría como intimidante mirada, viendo esta presentación del demonio, empezó a analizar la sala disimuladamente.
Analizando su ambiente, siendo vigilado de distintas partes de la sala por los encargados de este "grandioso" culto llenos de cómplices de potenciales homicidas.
Ciertamente las personas de aquí no veían las cosas negativas. La comida poca saludable, la agua de dudosa procedencia, las habitaciones tan pequeñas que apenas entraba oxígeno, cada uno se encontraban tan manipulados que realizaban sin rechistar cualquier cosa ordenada por los "encargados" o mejor conocidos como los "apóstoles" del grandioso "iluminado"
Izuku ahora realizando una formación, como si estuvieran acostumbrados, todos hicieron una extensa formación para caminar rumbo a sus respectivas habitación. Izuku no fue una excepción claramente, manteniendo una seria postura de caminata. Adelante de él aprecio a una sonriente señora entusiasmada por esta vida manipulada.
Ni uno de ellos se daba cuenta.
Todas las personas asesinadas.
¿Se habrán dado cuenta de ello?
Un demonio jugando con sus mentes.
Con sus tormentos.
Con su corazones.
"Hermano Izuku, como es nuevo en este bello culto. Sabrá que la comunidad se divide en varios grupos que deben realizar distintos trabajos para mantener estable todo. ¿Puede seguirme para indicarle su siguiente tarea?" -Un amable hombre se acercó para tomarlo de la mano, izuku se contuvo para no quitarse, pero mantuvo su compostura.
