DEL 31 AL 40

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Capítulo 31

Era fin de semana, el sol no calentaba demasiado ya que era el comienzo del verano y la brisa de la mañana ocasionalmente traía un poco de frescura.

You Ning no tenía que trabajar hoy, así que iba a llevar a la princesita al centro comercial para comprar un vestidito.

A los estudiantes no se les permite usar faldas cortas y pantalones cortos en la escuela, pero todos quieren verse bien, especialmente las niñas de la edad de Jiang Yingying, la mayoría de las cuales ya tienen su propia estética. Aunque no pueden estar libres en la escuela, se visten hermosamente los fines de semana y van de compras o al parque de diversiones, y les encantan los elogios que reciben en el camino.

En el pasado, Jiang Chi no era muy bueno para ir de compras con su hija, es decir, no era muy bueno para elegir. En su concepto, a las niñas les encanta el rosa, pero de hecho, la mayoría de los niños hoy en día tienen sus propias ideas y preferencias.

Le compraba a su hija un montón de cosas, pero ninguna le gustaba. No quería enojarlo diciendo que no le gustaba, así que solo decía: "Gracias, papá".

Con el tiempo, Jiang Chi también sintió que había una gran brecha generacional entre él y su hija, por lo que dejó que su asistente eligiera los regalos por él y ya no acompañó a su hija de compras.

El centro comercial que eligió You Ning fue específicamente para niños. Había todo tipo de juguetes y figuritas, y además de las habituales tiendas de ropa y zapatos para niños, también había una gran zona de juegos en medio del centro comercial. Todo el centro comercial se llenó con el sonido de los gritos de los niños y las risas y estaba muy animado.

Cuando You Ning entró, primero frunció el ceño porque había mucho ruido. Los gritos de los niños eran tan estridentes que le perforaban los tímpanos. Pero cuando vio la emoción en el rostro de Jiang Yingying, supo que estaba en el lugar correcto.

Hoy no trajo a su asistente ni a su guardaespaldas; Jiang Chi fue un soldado de las fuerzas especiales antes, por lo que un guardaespaldas normal podría no ser tan bueno como él. Sin nadie más alrededor, era como cualquier otro padre en el centro comercial, sosteniendo la pequeña y suave mano de Jiang Yingying mientras caminaba.

Cuando You Ning la empujó hacia adelante, Jiang Yingying primero se congeló por un momento y luego miró la barbilla de su padre. En ese momento, You Ning también la miró, cambiando de su expresión severa habitual y preguntando suavemente: "¿A dónde quieres ir primero?"

Los ojos de la niña brillaban, como si estuviera mirando una estrella deslumbrante, "Yingying escuchará a papá".

"Papá escuchará a Yingying hoy". You Ning dijo de vuelta.

"Entonces quiero ir a la casa de la princesa". La niña sonrió, revelando unos dientes blancos como la nieve.

You Ning responde: "Está bien".

La Casa de la Princesa también fue una característica especial del centro comercial. Contenía a todas las princesas de los cuentos de hadas de dibujos animados, con todo lo que a las niñas les encantaría tener.

Por otro lado, Chen Xiaoxing dijo enojado por tercera vez: "¡Tío! ¿Me vas a comprar un juguete o no? ¡Olvídalo si no lo haces!"

Su rostro tenía escrito "No quiero ninguno" en toda su pequeña cara.

"Tch", Chen Yao retiró la mirada de algún lugar. Ignoró los ojos indignados y el fuerte rechazo del niño, y se frotó el cabello, "¡Nunca he visto a alguien que no quiera gastar dinero como tú!"

Chen Xiaoxing se hinchó de ira, realmente quería dar la vuelta e irse a casa. Este tío suyo no actuaba como un tío en absoluto, solo sabía cómo intimidar a los niños todo el día, la gente incluso se reiría de él si les decía, ¡gracias a que era policía!

Cuando Incubus entra en el mundo de la transmigración rápidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora