Capitulo 7

796 44 5
                                    

No se cuánto tiempo paso, pero fueron concretas las palabras de Hakeem.
Bria entro en la estancia para despojarme de las esposas y la silla, eso me terminó de desconcertar, parecía una enferma con dolor de espalda grave, supongo que es por subir y bajar varias veces cayendo sobre esa silla dura y el respaldo angosto, dejo caer mis brazos doloridos por estar atados, ella no dice nada. Parece notar que no estoy de ánimos para hablar, con las mejillas inundadas pero en silencio termino de subirme el albornoz sobre el hombro a tropezones y con furia.
Me levanto un poco mareada y con las piernas frágiles para caminar con todo el cabello revuelto y despacio hasta la cama sin mirar atrás, no tengo el ánimo de salir de aquí, no quiero hablar con nadie.
Acaricio mis muñecas doloridas para suavizar el dolor, tenia las marcas donde pronto se me harían moretones, me recuesto sobre la cama desmenuzada, esa que fue la protagonista en mi castigo, me termino de tumbar cuando escucho la puerta cerrarse y el silencio vuelve a embargarme.
Toda esta humillación me hace odiarlo pero aunque lo odie con cada fibra de mi cuerpo también lo deseo y es el sentimiento más repugnante que he tenido en toda mi vida.
En mi vida sufrí un castigo a esta magnitud, con desconocidos, me siento dentro de un pozo sin salida, me abrazo entre las sabanas y me permito llorar, lloro sin pronósticos tendida sobre la cama... lo hago hasta que ya no me quedan más lagrimas, ya no me queda más voz, ya no me quedan mas fuerzas y la frustración sigue carcomiéndome.
Cómo puede ser tan animal, tan insensible.
Lo que no me entra en la cabeza es como esas mujeres le hacen todo tipo de caso sin rechistar.
Yo no deseo ser controlada de esa manera y mucho menos objeto de este tipo de persona.
¿Que pasa si en algún momento me toca ser yo en vez de Victoria o Aranza? Prefiero terminar Muerta antes que bajar a ese nivel.
Sobre mi cadaver van a jugar con mi cuerpo para proporcionarle algún castigo a otra, eso no lo permitiré.

Tengo un sueño enorme y un dolor en mis genitales que no puedo explicar, en medio de toda la angustia y el estrés termino cayendo en un profundo sueño que me permita descansar sin remordimientos.
***

Cuando recobró la fuerza hago el enorme esfuerzo para levantarme de la cama, no se cuanto tiempo paso pero la habitación seguía tal cual había quedado cuando me dormí, eso significa que nadie había entrado en medio del sueño, no sabía si era de día o de noche por qué no había visualización al exterior.
Tuvieron que haber pasado algunas horas pero no tenía ni idea de cómo saberlo
Por qué esta es una habitación sin ventanas.
abro las puertas que habían alrededor para buscar el baño, tenía que darme una ducha urgente, necesitaba hacer mis necesidades, cepillar mis dientes, lavar mi cabello y volver a recomponerme después todos los sucesos que me han pasado desde que llegue a Abu Dhabi.
Cuando abro la penúltima puerta me encuentro con un enorme closet con mucha lencería de colores oscuros, trago duro y todo mi cuerpo se vuelve a tensar ¿De que se trata esto? La casa parece una caja llena de sorpresas, y aunque era algo que podría haberse esperado yo no lo pensé.
Entro con cuidado, como si alguien estuviera vigilando cada movimiento, es tan inmenso que podría ser otra habitación más, busco el interruptor en la pared y cuando presiono el botón unas luces tenues led comienza a encenderse una tras otra, era diferente, no encendían desde el techo, todo venia desde las orillas de las paredes entonces cierro la puerta detrás de mi con la pizca de curiosidad que me caracteriza caminando con sigilo observándolo todo.
Abajo habían unos cajones transparentes donde se encontraban juguetes sexuales, me quedo petrificada unos instantes y me pregunto si quiero seguir viendo antes que nada. Siento un lívido temblor en mis piernas, son muchos, demasiados... exagerados.
Con una tensión fuerte en el cuerpo no me niego la intension que ya tenía así que sigo en proceso para ver lo que me envolvía, algo dentro de mi me pedía salir pero curiosa quería seguir mirando.
Tenía plumas de todo tipo, cintas de seda y satin negras y azul oscuras, tapones de todos los tamaños aunque faltaban dos, esos que uso hace unas horas con Aranza y Victoria. No me detengo en el recorriendo mirando estimuladores de cuerda, consoladores metálicos, con curvas y hasta de tres puntas, guantes de tamaño grande... negros con bordes exactos, quiero tocarlo por qué parecen ser suaves a la vista pero están metidos dentro de esa caja cristalina.
Veo las mordazas, todas eran como para atar, manos a la espalda, o piernas y manos... nada sadomasoquista o hasta el punto que yo creía nada de lo que hay dentro del closet es como para maltratar... más que todo para obtener placer o eso creo según yo.
Adicional de las esposas, parecía que el lugar donde estaban aquellas que me ataron aún se encuentra vacío igual que los tapones gemelos. El había usado conmigo esas en particular, las únicas de metal que habían en toda la estancia.
Vuelvo a ver mis muñecas y hasta ahora me doy cuenta que tengo una crema rodeándolas, el color había mejorado desde que me dormí pero ¡Yo no usé eso!
Mis alertas se activan escandalizada.
Por supuesto que alguien entró a colocarme una crema para evitar hematomas, mi corazón se aceleró ¿debería molestarme o agradecer? sobrepaso el espacio límite que me permito, tomo mis muñecas para aplicarlo pero no lo sentí, por que caí en un sueño profundo.
No había descansado desde que Hakeem me secuestro así que era obvio que dormiría como una piedra, aunque me niego a aceptar que fue el.
Aún recuerdo esa mirada fría llena de odio que me dio justo antes de irse y dejarme frágil hace unas horas, lo desecho rápido removiendo la cabeza incómoda.
Bajo mis defensas, de todas maneras quien sea que haya sido ya no se me notan tanto las marcas.
Pudieron haber sido peores, así que debo agradecer. 

Árabe a la fuerza #wattys2023 Where stories live. Discover now