III

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Londres, Inglaterra

Christopher Morgan

Estoy en mi oficina viendo todo, no voy a perder mi tiempo por algo tan estúpido que organizo Alex simplemente para joder a López.

Llega el auto y es allí cuando López baja y se posiciona del otro lado ofreciéndole su mano a ella, siempre fue una cobarde lo más seguro es que no salga, porque sabe lo que conlleva.

Pero no es así, observó como la mano de López es recibida y paso siguiente sale una mujer con pelo lacio hasta la cintura, lo lleva atado en una coleta, lleva un vestido negro el cual resalta con los lentes de sol que carga.

Alza el mentón y se encamina hasta Alex mientras López le sigue el paso, cuando aplauden a López es cuando ella para en seco, lo miran a él y estoy seguro que su intuición es lo mismo que quiere Alex.

Mira para todos lados como si tuviera miedo de algo, y cuando menos lo espero un disparo se hace presente, salpicando el uniforme de López y es cuando me doy cuenta que la bala ha ido directo a su pecho.

Salgo de la oficina con una ametralladora y dispara a modo bestial, mato a todo lo que se me cruce en el puto camino, diviso a Alex que intentan llevárselo pero el simplemente quiere ver cómo está López.

Cuando volteo, el cuerpo de López es llevado dentro por Lyra y Patrick, pasan minutos y el caos está resuelto, no sé quién putas hizo todo esto.

Me vale una mierda lo que vayan hacer ahora simplemente quiero tener a esa persona frente a mi y que me dé unas jodidas explicaciones.

Camino hacia la puerta que ví por última vez la silueta de Lyra Stone y abro la puerta de un portazo, alcanzo a ver como se tensa, Patrick me mira sin embargo ella ni siquiera es capaz de girarse.

— Se te acabó el teatrito que armaste, López está inconsciente y dudo mucho que alguien de esta sala vaya a defenderte— Hija de puta ni siquiera es capaz de moverse, y a este punto me estoy cabreando.

Cuando creo que no se va a defender y que ni siquiera va a ser capaz de mirarme se gira.

El mundo se me cae a los pies, el destino se me burla en la puta cara y el golpe de realidad me aturde, sin que yo pueda sostenerme o mantenerme firme, trato de convencerme que no me importa pero es imposible.

— Si, se me acabó el teatro Coronel, pero no sabe cuánto disfruté de él— Sonríe mientras se quita los lentes de sol y es allí cuando lo veo, los ojos llamativos de los Stone, siempre supe que Lyra escondía algo, pero nunca pensé que fuera eso.

— Sigues siendo una puta cobarde, la cual se esconde cuando hay un puto problema, no has cambiado absolutamente en nada— Apreta la mandíbula y me mira fijamente como si quisiera matarme, no te preocupes yo también quiero verte morir Lyra Stone.

— Y tú sigues siendo el mismo Coronel arrogante, despiadado y sin corazón de siempre, dime ¿Tan dolido estás? —  Me rio en su cara, es ilusa al creer que estoy dolido especialmente por ella.

— ¿Dolido de que? ¿De que te fueras?, ¿de que desaparecieras de mi vida?, Por supuesto que no, te lo agradezco— Se queda callada mientras me mira, enserio pensó que yo había cambiado, que no sea ingenua.

La miro con odio, eso es lo que siento odio, antes no sentía nada por ella, ni pena, ni dolor, ni odio, ni siquiera amor.

Nuestra conversación queda allí, debido a que Alex hace acto de presencia para ver cómo está López.

— Es una herida profunda tuvimos suerte de que la bala no le llegará al corazón, lo mejor es que lo trasladen a un hospital, ministro— La enfermera habla pero no quita su vista de Lyra.

— Señorita Stone, ¿se encuentra usted bien?— Antes de que Lyra diga algo, se desploma en el suelo causando un alboroto, lo único que hago es verla por última vez en el día e irme de la sala.

Estoy cabreado, frustrado, llevo toda la maldita noche sin dormir por culpa de Lyra Stone, su aparición causó un verdadero alboroto y lo que más me cabrea es el hecho de que la pintan como una maldita Leyenda, cómo una Diosa cuando realmente no es...

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Estoy cabreado, frustrado, llevo toda la maldita noche sin dormir por culpa de Lyra Stone, su aparición causó un verdadero alboroto y lo que más me cabrea es el hecho de que la pintan como una maldita Leyenda, cómo una Diosa cuando realmente no es más que una puta cobarde.

— Creo que no deberíamos precipitarnos, ni siquiera sabemos si va a venir— Patrick me saca de mis pensamientos, hace minutos que estamos esperando a Lyra Stone y no llega, López ya está un poco mejor y dijo que él y ella iban a estar presentes.

La puerta se abre mostrando a Lyra Stone hablando por celular, cuelga y se adentra a la sala para pararse al lado de López.

— Pensé que no vendrías— Lyra lo mira alzando una ceja mientras López la mira con una sonrisa.

— No me diste opciones, cómo sea, ¿que quieren?— Se está haciendo la mosquita muerta y es algo que verdaderamente me fastidia.

— Tenemos una misión, la cual te va a interesar— Alza la mirada sin entender, no puedo creer que vayan a hacer esta mierda.

— Se trata de Alessandro Moretti— Fría, esa es la palabra que define cómo está, no entiendo una mierda.

Intento contener mi ira, toda está mierda ya me tiene harto conforme pasan los días, desde que llegó Lyra lo único que hay es misterio y ya estoy harto.

— ¿Qué saben de él? ¿Dónde está ese hijo de puta?— Muchas preguntas y pocas respuestas

— Creemos que está en Paquistán, explotó una mina y ahora mismo están en guerra— Se queda en silencio mirando un punto fijo.

— Bien, me unire a la FEMF pero no voy a soportar humillaciones ni burlas, al primero que lo haga lo mando a matar— Se levanta de su asiento y sale, me dispongo a seguirla a pesar de escuchar los llamados de Alex.

Está justamente pasando por mi oficina cuando le agarro el brazo y la adentro, la pego a la pared mientras le agarro el cuello.

Maldita, mil veces maldita, quiero matarla ahora mismo, pero al mismo tiempo quiero quitarle todo y follarla sobre mi escritorio.

— Pero que? ¿Qué demonios haces? ¿Te has vuelto loco?— Apretó la mandíbula con fuerza tratando de controlarme.

— Si, me he vuelto loco desde que llegaste, desde que supe que estabas viva, sabía que eras una puta cobarde pero no como para que fingieras tu puta muerte— Su aliento choca con el mío, y por mi mente se cruza el hecho de besarla, de poseerla.

—Pues trata de vivir con eso, porque me vas a ver todos los días, no voy a darte el lujo de verme hundida y destrozada por ti, no más.— Se suelta de mi agarre y sale de la oficina azotando la puerta, chasqueo la lengua y me dispongo a investigar sobre Moretti.

Tengo que saber porque Lyra odia tanto al tal Moretti.




Holaaa, este el tercer capítulo espero les haya gustado, si no es mucho pedir me gustaría que me siguieran, ya que voy a dar unos cuantos avisos y al parecer solo le aparecerán a las personas que me siguen.

Cabe aclarar que más adelante se va a ver un poco del pasado de Lyra y de Christopher, ellos dos van a pasar de Lovers to Enemies a Enemies to Lovers.

Sin más que decir me despido, Con amor Sweet

Fénix✓.           Christopher Morgan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora