cap 27:bitter pasts, banjos and tea

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ೃ⁀➷ ׂׂૢ ೃ⁀➷ ׂׂૢen algún pasado lejano

Un Dice de unos 15 años estaba empacando sus cosas, doblando sus trajes en una gran maleta y viendo que cosas de su viejo cuarto llevaba consigo.

.-hoy te vas...? -preguntó la voz decepcionada de un Devil igual de joven, estaba parada en el barandal de la terraza, moviendo su cola de forma lenta intentando ocultar su sentimientos-

.-si...hoy debo irme a la academia...-respondió el joven dado con un nudo en su garganta- p-pero volveré para las vacaciones y festivos!

.-ya pero...que se supone que haga los otros días?, Ir al parque a patear una abuelita?, Se supone que somos compañeros de crimen...

Ambos siguieron con los pequeños reproches, con la diferencia que se fueron acercando poco a poco, el príncipe dejó sus pertenencias mientras que Devil bajaba del balcón para acercarse también.

.-se que es difícil pero...mi familia a estado en esa academia durante generaciones, no me dejaron ponerme por más tiempo, de hecho, me dejaron matricularme ahora, debí haberme matriculado desde los 12 años o incluso antes -explico Dice intentando consultar a su amigo-

Ambos habían terminado sentados en la orilla de la cama, ninguno estaba tan mal o al borde de llorar, solo que al ambiente se sentía pesado, porque ambos eran compañeros criminales hasta cierto punto, maestros en la estafa y el hurto.

Aún que claro, Dice siempre fue más bien un ayudante o mano derecho ya que todos esos bienes se los quedaba el Diablo, a excepción de algunas cosas que el joven dado no podía tener o comer porque su familia protectora no lo hubiera permitido.

Por ejemplo de niños eran simplemente juguetes, ahora de mayores se trataba de comida o la simple busca de adrenalina.

Porque muy rico y todo pero al pequeño Dice jamás se le dió un centavo de su fortuna, de hecho, era casi como un hijo que habían tenido por presión social o por tener a quien dejarle la herencia, aún que claro, tendrían que pasar un mogollón de años.

.-va a ser un poco aburrida la vida sin mi compañero de robos -dijo el diablo- y cuántos años son en la academia?

.-hasta que me gradué, o sea, apenas tenga los 18 me dejarán irme

.-tanto!? -preguntó en un grito el diablo-

.-si...

.-y por un momento creí que sería un exagerado por traerte esto -él diablo hizo aparecer con su magia un maso de cartas de baraja inglesa, aún que estás habían sido modificadas ya que en vez del rojo y negro característicos de la baraja está tenía detalles dorados-

.-tu...baraja de la suerte?

El diablo solo asintió en silencio, tomando la mano contraria y entregándole las cartas, se abrazaron de forma amistosa con una sonrisa rota, pero en un momento a Devil se le prendió el foco.

.-tengamos un último atraco, la dulceria trae cargamento hoy, tu y yo Dice, por favor, luego preocúpate de tus estudios y tus mierdas, pero saca el verdadero tú una última vez -dijo casi en una súplica con los ojos brillosos llenos de determinación mientras tomaba de los hombros a su contrario-

El principe asintió emocionado, con los ojos igual de brillosos, iba a decir algo pero su voz fue cortada por el rechinar de las escaleras y las voces de sus padres

.-te veo donde siempre -susurro Devil con cierto jugueteo, mientras desaparecía en el acto aprovechando que ahora controlaba sus poderes-

Dice se asustó un poco y rapidamente empezó de nuevo a guardar sus cosas, aun que antes que nada de debajo de su cama sacó un peluche de cabra que habia sido parte de su infancia, uno de esos robos que habia hecho junto a su compañero. Lo abrazó y lo guardó en su maleta juntos a las cartas en un bolsillo secreto de su maleta.

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