TREINTA Y TRES: "Mula Rusa"

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BaekHyun terminó haciendo una gran reverencia hacia la familia Park, una familia de alfas y/o dominantes, era increíble como con una sola expresión podían ponerlo nervioso, aunque había que ser completamente sinceros, había ocurrido lo mismo cuando había conocido a Yeol, lo que era otra ironía.

Ahí estaba todo el mundo, desde los padres de Yeol, hasta familiares más lejanos, lo que hacía que todo le diera vueltas, casi podía sentir que todos emitían sus feromonas solo para demostrarle el poder que tenían sobre alguien tan pequeño como él, pero no podía decirlo a ciencia cierta, solo estaba, esperando salir con vida de ahí.

-Es un placer conocerlos...- tartamudeo y se maldijo a si mismo porque no quería parecer nervioso, pero lo estaba, lo peor era que sería su primera impresión ante la importante familia. -Soy Byun BaekHyun.-

Chanyeol había dicho que era tiempo de que conociera a sus padres y que formalizarán, no sabía a qué se refería con "formalizar" porque en sí, todo ese tiempo lo suyo no había tenido otro título más que el de amantes, lo que era sencillamente algo que todo el mundo en esa sociedad podría ver mal, pero al menos sabía que no podían sacarlo del todo de la familia si lo odiaban porque ChanYeol llevaba en brazos a SunHee que miraba a todos atentos con sus chupón en la boca y envuelta en sus sábanas de patos.

Baekhyun mientras esperaba algún mal comentario por si forma de hablar, vestir o comportarse, como esperaba viniendo de una familia de alfas, estando de rodillas frente a los Park, solo sintió unas manos tratando de sostenerlo por los hombros y ponerlo de pie, era el señor Park, Park ChanHye.

-No, no, BaekHyun, ¿Qué haces? No te pongas de rodillas, no, no- el hombre incluso sacudió sus ropas y las acomodo bien, mirándolo de pies a cabeza -¿No estás aun recuperándote de SunHee? No hagas eso, no es necesario, seremos familia ahora, somos familia ahora- se corrigió, dándole un par de palmadas en el hombro, con una gran sonrisa.

El padre de ChanYeol, era increíblemente parecido a este, claramente envejecido por el tiempo pero similar al final de cuentas, un hombre muy alto y delgado, que rápidamente fijo su mirada en SunHee.

-¡Pero miren que niña más linda!- estirando sus manos llenas de anillos, recibió a la bebé de los brazos de su hijo, quién terminó sosteniendo a la pequeña con mucho cuidado, invitando a su esposa a verla de cerca. -Mira, es casi toda Yeol, una alfa, una hermosa y pequeña alfa, ni como decir que no es de él- bromeó pero Baek sintió que iba a desmayarse, había preparado toda una lista de disculpas antes de ir ahí, afortunadamente, Yeol lo sostuvo antes de que pudiera salir corriendo o desmayarse.

-Quería que conocieran a ambos- dijo ChanYeol hacia sus padres -Y queremos su bendición, ya que no podemos contar con la de la familia Byun- BaekHyun sabía que eso implicaba varios puntos, en una sociedad como la suya, que su familia no estuviera aprobando la relación, iba a dejar mal parada a SunHee si la otra familia tampoco daba su bendición, ella quedaría como un bebé no deseado y por lo tanto, las personas la tratarían de esa manera, sumado a que había nacido fuera del matrimonio.

-Claro que si- la respuesta del señor Park había sido inmediata, como si no lo hubiera dudado ni por un segundo, porque Baek incluso lo miro con los ojos brillantes. -Es nuestra pequeña nieta, va a estar en todos los registros familiares y tendrá una parte de la herencia familiar como todos los descendientes. Al igual que Baek, BaekHyun Byun aparecerá en los registros de igual manera, casados o no, será familia-

Baekhyun había estado tan nervioso desde que Yeol le había dicho que era hora de empezar a dar la cara con las cosas importantes, que esas palabras lo aliviaban demasiado, entonces volvió a hacer una gran reverencia.

-Muchas gracias, prometo criar bien de SunHee para que estén orgullosos de ella-

-Olvida eso- dijo la señora Park, haciendo que de nuevo, estuviera erguido -Sabemos que debes tener esas ideas antiguas en tu pequeña cabeza Baek, por como fuiste criado, pero en esta casa no creemos en eso, solo creíamos en lo que nuestros hijos quisieran, por eso le dimos tantas libertades a LuHan y Yeol, para que pudieran hacer lo que quisieran, la presión de los hijos y el matrimonio, en realidad no nos era importante, solo algo que debían tener si quisieran, había conversaciones de esa clase, pero en realidad...míralos, cada uno ha hecho lo que ha querido-

Que quedé entre nosotrosWhere stories live. Discover now