¡Mi corazón te pertenece! (jimsu)

XI

Yoongi no pida creer lo que su profesor le había propuesto, ¿acaso eso es posible? Era realmente extraño, suplantar a una persona, eso no puede ser legal, además como lo haría, ni siquiera es una mujer, como haría tal cosa.

— es una locura

— ¿hablando solo?

Yoongi se sobresaltó al escuchar aquella voz, esa voz que pensó que no escucharía nunca más en su vida

— q-que haces aquí

— ¿no te alegra verme precioso?

— no te me acerques — lo apuntó con su dedo

— vamos cariño, ¿por qué mejor no recordamos los viejos tiempos?

— ¡aléjate de mi! — le gritó para luego salir corriendo

Corrió como nunca lo había hecho, estaba con los nervios de punta, los recuerdos de aquella fatídica noche llegaron a su mente. No pudo aguantar las lágrimas cuando se encontraba en los brazos de su mejor amigo, se aferraba a su cuerpo repitiendo del porqué tenía que pasarle eso a él.

— Yoongi mírame, ¿ese imbécil te hizo algo? Por favor dime

El pálido solo movió su cabeza negando — s-salí corriendo antes de que pudiera tocarme

— tranquilo Yoon, voy a traerte un vaso de agua ¿si? — intentó levantase, pero Yoongi lo abrazó más fuerte.

— no me dejes

— ya no llores, no voy a permitir que ese idiota te ponga una mano encima

Esa noche Yoongi se quedó en el departamento de Hoseok, el pálido estaba muy asustado como para quedarse solo en su casa.

Ambos se la pasaron muy bien, el fin de semana, vieron series, películas, cocinaron, cantaron y muchas cosas más. Hace tiempo que no hacían algo así, ya que desde que Yoongi llegó de Hawái solo se dedicó a sus estudios, pero siempre tiene que haber un momento de relajo, y ese fin de semana era el momento.

Luego que pasaron esos días, Yoongi y Hoseok estaban rumbo a la universidad, hoy les tocaría clases separadas, pero prometieron encontrarse en la hora del almuerzo.

Pasaron las horas y las clases dieron su término, Hoseok le mandó un mensaje diciendo que se quedaría por un rato más, así que por ello Yoongi caminaba solo por los pasillos temblando de frío, él no estaba acostumbrado a ese clima, así que llevar puesto una gran polera, chalina, guantes y gorras no eran suficientes para el pequeño pálido.

— uff, por que tiene que hacer tanto frío — se arreglo mejor el gorro al sentir el gélido viento soplar directo a su rostro al momento de salir de las instalaciones.

— puede ser por que estamos en invierno

— profesor — giró su rostro y no pudo ocultar su nerviosismo.

— la verdad es que el frío está algo moderado, ¿no crees que exageraste un poquito?

— yo vengo de Hawái, por ende no estoy acostumbrado a este clima, así que me muero de frío.

— conozco una cafetería donde preparan un café muy delicioso, yo invito

Yoongi se quedó pensando en lo dicho, el amaba el café y estaría mal desaprovechar la oportunidad de un delicioso café caliente gratis

— esta bien profesor, acepto la invitación

Jimin esbozó una ligera sonrisa, ambos caminaron hasta el auto del mayor y este condujo hasta una cafetería, el rubio lo miró de reojo, se veía tan lindo todo abrigado, parecía un pequeño osito.

Luego de unos 10 minutos llegaron a la cafetería, se sentaron en una mesa que estaba junto a un gran ventanal. Yoongi no pudo evitar a mirar como los pequeños copos de nieve comenzaban a caer y cubrían la calle, una vista realmente hermosa.

— es muy lindo, es la segunda vez que veo la nieve y aun me sigue sorprendiendo

A los minutos el mesero llegó con las dos tazas de café.

— esta delicioso, no mentía profesor, creo que es el mejor café que tomé

— te lo dije — le dio un sorbo al líquido — y puedes llamarme Jimin

— no se si sea lo más adecuado

— solo hazlo, fuera de la universidad puedes dejar de llamarme profesor

— si Jimin hyung

Jimin se quedó por un largo rato mirándolo haciendo que el pequeño chico delante de él se pusiera un tanto nervioso

— Yoongi, ¿pensante en lo que te propuse?

Ahí estaba la pregunta que tanto temía, que debería responderle, ¿que si? O decirle que era una total locura lo que le está pidiendo.

— y-yo... ¿por qué yo?

— es una historia un poco larga de explicar

— quisiera saberla, porque no solo quiero aceptar y suplantar a alguien, necesito saber el porqué lo tengo que hacer

— lo sabrás, todo a su debido tiempo, ahora dime, ¿aceptas?

— lo haré, por su hija, me haré pasar por su madre

Jimin sonrió ante la respuesta del menor, pero pronto la sonrisa se le borro y formuló una pregunta el cual hizo estremecer al pálido

— Yoongi, ¿quien es Taehyung?

Hoseok caminaba por los pasillos de la universidad rumbo a los jardines traseros, le había a dicho a Yoongi que se quedaría por unas horas más, pero en realidad iba buscando a una persona en específico, le dejaría las cosas claras pues no permitiría que ese adefesio le hiciera daño.

— ¡oye tú! — dijo acercándose al susodicho

— Hoseok que sorpresa verte — se levantó de la silla para ir hacia él — ¿deseas algo de mi?

— deja esa amabilidad a un lado estúpido, solo vengo a decirte una cosa — se acercó peligrosamente a su rostro — aléjate de Yoongi

— y porque piensas que te tengo que hacer caso — dijo de manera burlona

— te lo advierto Taehyung, alejate de él por que te juro que te golpearé como debí haberlo hecho hace años

Fue lo último que dijo antes de empujarlo y darse media para irse a su casa, camino fuera la de las instalaciones sin imaginar que una tercera persona escuchó aquella discusión.