Pedro Pascal [One-shots] Actor & Personajes

Joel Miller -Protegerte (Parte 2)

❥Narrador: Omnisciente.

❥Advertencia: Contenido sexual. Sexo sin protección.

❥Pedido por: _mariannn_

...

Entró a la vivienda, estresada y malhumorada, cerró la puerta con fuerza. Suspiró totalmente frustrada mientras se quitaba el gran abrigo lleno de nieve; no había tenido suerte en encontrar a Joel, buscó en literalmente, todos los rincones de Jackson, y cuando por fin se había dado por vencida, ante sus ojos apareció Tommy, y con cierto enojo le preguntó por el paradero de Joel. Marian no sabía si el universo estaba en su contra esa precisa noche, pero Tommy le había respondido que Joel ya se había marchado a la casa hacía unos cuantos minutos.

— Estas cosas solo me pasan a mí. — Refunfuñó en medio de sus palabras.

Efectivamente, tal y como Tommy había dicho, Joel ya se encontraba en casa, pues la prueba de ello, era el abrigo de color miel colocado desarregladamente en el perchero. Dejó el suyo allí también, y siguió su camino hacia el segundo piso.

Inspiró con lentitud antes de girar el pomo de la puerta, pensando en las palabras indicadas para enfrentarse a Joel. Hacía ya un buen tiempo que no discutían, pero tenía el presentimiento de que esta vez era algo mucho más serio. Entró vacilante, y cerró la puerta procurando no hacer ruido. Pensó que tal vez Joel ya estaría dormido, pues le pareció que la habitación estaba a oscuras, pero cuando se giró, encontró al hombre sentado sobre la cama junto a una tenue luz proveniente de la pequeña lámpara en la mesilla de noche. Él no la miró, así que Marian bajó la vista hasta encontrar el vaso de cristal que él sostenía, y sus ojos viajaron rápidamente a la botella ubicada junto a la lámpara.

Había estado bebiendo y parecía bastante tenso, probablemente ya había hablado con Ellie, y quizás no terminaron de la mejor manera.

— Hola... — Habló en un susurro, con esa ronca voz tan característica de él, pero su mirada no lo acompañó.

— Hola... — Respondió ella igual de tensa. Sentía que si decía algo más todo explotaría.

Exhaló brevemente y se aproximó a la pequeña mesa, tomando la botella en sus manos y bebiendo de ella en un largo trago. Devolvió la botella a su lugar y lo observó de reojo, pero él aún parecía no ser capaz de enfrentarla.

— Así que vas a dejarla. — Marian se atrevió a empezar.

— Si...

— ¿Por qué?, ¿por qué mandarla con Tommy? — Cuestionó apresurada en busca de una respuesta coherente.

— Aceptamos el trabajo para conseguir una batería, un auto, y encontrar a Tommy. Ya está hecho, es hora de volver a casa. — Joel respondió toscamente, como si hubiera estado practicando en su mente lo que le diría.