tannie's dad ִֶָ✧

VIII

tannie's dad : O8

jungkook se encontraba nuevamente en soledad, bam dormía sobre la cama con las patas hacia arriba.

parecía muerto.

su mente estaba totalmente ocupada pensando en kim taehyung.

ese chico de cabello castaño y ojitos lindos que le cautivaron, estaba enamorado.

lo podía confirmar.

lo amaba sin duda alguna.

—bammie, cai completamente por el papá de tannie—. murmuró aunque su cachorro no le escuchó.

bam tenía sueños pendientes.

el azabache suspiró mirando el techo, lo extrañaba tanto pero no quería interrumpir el trabajo de su mayor.

últimamente estaba copado de trabajo mientras él no hacía nada porque ya había entregado canciones y los grupos estaban en momento de promoción.

no era su área.

—¿debería prepararle una pequeña sorpresa aquí en casa?—. preguntó para sí mismo.

luego de un corto debate consigo mismo asintió decidido a preparar la sorpresa.

rápidamente colocó manos a la obra.

.

¿estaba mal ocupar a sus amigos para esto?

para nada, ellos fácilmente podían cuidar a su tierno cachorrito de 35 kilos.

—recuerda su comida a las seis y solamente premios si se acaba su plato, son 280 gramos solamente, no más ni menos—. le recordó a yoongi quien le oía con una cara de sueño.

igual a su gato pelado.

—entiendo, ahora ve a... no sé, dejar que te acomoden los intestinos con un pene, que sé yo pero vete, no es primera vez que lo cuido—. se quejó cerrando sus ojos, jungkook creía que podía quedarse dormido ahí mismo.

—lo sé y no dejes que tu gata intimide a mi bebé, siempre llora cuando tu animal pelado le pega manotazos—. le advirtió.

yoongi le quitó importancia y le cerró en la cara, jungkook suspiró volviendo a su departamento para preparar todo.

le daría una de las mejores tardes a su mayor.

sin duda alguna.

primero prepararía una rica cena, había desarrollado dotes culinarios gracias a que taehyung varias veces le dejó ayudar.

y gracias a seokjin, el novio de min yoongi era un famoso chef nacional que le ayudó con algunas recetas para impresionar a su novio.

luego de unas cortas horas, la cena estaba lista en su totalidad, taehyung le había dicho que iría a comer en unos minutos así que fue a darse un baño para colocarse bonito.

aunque taehyung le haya visto hasta el alma igualmente deseaba impresionarlo.

a las 20:15 su puerta fue abierta por un taehyung con ceño fruncido.

—hola, cariño—. saludó jungkook acercándose para dejar un corto beso en los labios contrarios y abrazarle.

taehyung ocultó su rostro en el cuello de su menor allí inhalando su olor, era tan relajante tener a su novio allí.

—hola, bebé... perdón si te hice esperar, ¿qué quieres para comer?—. preguntó el castaño separándose para mostrarle una bonita sonrisa a pesar del cansancio.

—oh no, no tienes que cocinar—. le dijo tomándole de la mano para llevarle donde la mesa estaba ya lista, con bonitos adornos y una vela aromatizante.

taehyung sintió un pequeño vuelco en su pecho que le hizo sonreír, volteó a ver a su novio viéndole con sus pómulos de una tonalidad rosácea mientras una sonrisita tímida aparecía en sus labios.

—¿lo hiciste todo tú solo, mi cielo?—. preguntó pasando sus manos por la cintura de su menor, acariciando por sobre la camisa blanca que le quedaba holgada.

jungkook respondió con un pequeño asentimiento —es mi primera vez cocinando, así que si algo está mal, dímelo—. pidió pasando sus brazos por el cuello contrario para acariciarle suavemente la nuca.

taehyung asintió dejando un corto beso en los labios rojitos de su menor.

—gracias, bebé—. susurró dejándole un beso en su frente —vamos a comer, todo se ve riquísimo—.

ambos se separaron con otro pequeño beso para poder sentarse frente a frente.

la cena fue perfecta y tal como jungkook la deseaba, lo siguiente fue ir a recostarse en la cama con aquellos pijamas que jungkook había comprado cuando recién se conocieron.

taehyung estaba boca abajo recibiendo un relajante masaje en sus hombros, jungkook estaba sentado sobre su trasero pasando sus manos por la espalda contraria.

—lo haces bien, cielo—. susurró taehyung sintiendo como el estrés salía de su cuerpo, pequeños suspiros salían de su boca.

—me alegra que te guste, cariño—. respondió dejando un corto beso en la nuca de su mayor para luego bajar sus manos hasta la cadera de este.

sus cálidas manos se metieron bajo la pijama de su mayor así tocando la suave piel de su cintura, subió hasta la espalda dando suaves masajes, su rostro se acercó allí dejando besos sonoros.

taehyung sonrió al sentir las manos contrarias meterse bajo el pantalón y ropa interior.

—cielo... —. murmuró en advertencia, las manos contrarias se detuvieron.

—¿ups?—. jungkook detuvo todos sus movimientos escuchando la pequeña risita de su novio —fue inevitable, tu trasero está tan cerca de mi pene—. murmuró en queja.

—si quieres follarme puedes hacerlo—. comentó taehyung mirando al contrario por sobre su hombro, jungkook le sonreía pícaro.

con una pequeña risa jungkook se bajó de su mayor para voltear el cuerpo del castaño, se acomodó entre sus piernas para besarle con suavidad.

se encargó de acariciar su cuerpo como si fuera lo más delicado del mundo, sus labios danzaban con algo de brusquedad y desespero, taehyung sentía su cuerpo calentarse con cada suspiro que jeon soltaba contra sus labios.

la ropa fue desapareciendo con rapidez dejando ambos cuerpo en total desnudez, jungkook alcanzó los preservativos y el lubricante que dejaba cerca de la cama.

taehyung se sentía algo ansioso, hace ya un tiempo que no era el que recibía con su novio a pesar de que tenían una que otra ronda de sexo al día.

—seré cuidadoso, amor—. el azabache le besó la frente con suavidad antes de abrir el lubricante y esparcir por sus dedos

taehyung asintió suavemente.

confiaba en jungkook.

— koocinnamon.