Capítulo 6

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Nunca en toda su carrera como Matra, especialmente bajo los exigencias del trabajo, Cyno pensó que tenía que lidiar con las emociones de una mujer, ¿Nunca se le ha acercado nadie y se lo ha confesado? De vuelta en la Academia, claro, pero ¿Cómo el General Mahamatra? La gente bien podría tirarse al suelo y tumbarse como forma de camuflaje.

Y, sin embargo, a pesar de todo, lo más extraño que se le ha encomendado desde que salvó a la Arconte Dendro sería esta asignación de anfitrión.

Contuvo un suspiro, "¿De qué se trata?"

"No sé, ¿Se suponía que íbamos a hacer algo en la Aldea Aaru hoy?", los tonos azules en los ojos de Nilou se veían más tenues de lo habitual cuando levantó la vista de sus manos presionadas en su regazo.

El Matra de cabello plateado pensó por un segundo, se suponía que debían arreglar el alojamiento de Nilou y hacer que la gente del almacén revisara los suministros del Teatro Zubayr, luego se suponía que debía presentarle a Candace y su abuelo, para que le explicaran lo que hacía que la Aldea Aaru fuera lo que era para los habitantes del desierto y los individuos que albergaban de todas partes, el primer día no era demasiado importante...

"Es solo que, creo que he complicado el día de hoy al comenzar con los minerales que necesitamos, lo siento, General Mahamatra Cyno", sus ojos azules volaron hacia el mar, la culpa la carcomía tanto que temía que se mostrara a través de sus pupilas, 'General Mahamatra Cyno', sintió un regusto amargo con el uso de su título.

"Te has estado disculpando desde que nos encontramos hoy, y realmente no tienes que hacerlo, eres mi invitada, por favor, relájate, Nilou", habló más casualmente, 'De lo contrario, yo tampoco lo haría.'

No era como si le gustara sentirse de esta manera, de repente, todo se derrumbó sobre ella, como los duros rayos del sol después de salir de la sombra de un árbol de Tamarisco en el desierto, Cyno no habría ido tras ella en Caravasar Ribat e investigado una estafa si se hubiera quedado quieta, los minerales habrían sido...

"Fruncir el ceño no nos llevará a ninguna parte, Nilou".

Quiso debatir, pero no estaba segura de estar dispuesta a comentar su comportamiento natural. "... Está bien, dejaré de hacerlo".

"El Biryani se ve bien, ¿Qué te parece?", Cyno no creía tener hambre hasta que miró el menú, Nilou le siguió la corriente y, por su propia cordura, pidió una Margarita Arcoíris para sentirse un poco más ligera, él ordenó por ellos y comieron en silencio.

No iba a admitirlo, ni siquiera a sí mismo, pero el Matra de ojos escarlata solo quería llegar ya a la Aldea Aaru, la hospitalidad de Candace seguramente sería más adecuada para la bondadosa Nilou que la suya propia, creía él; apenas pensó en las cosas por las que Nilou se disculpó, después de todo, todo era parte de su trabajo, y cuanto antes termine el trabajo de hoy, menos días tendrá para desempeñar su papel para poder volver a la programación habitual.

"¿Te gustaría un postre para más tarde?", la mesera regresó a la mitad de su comida; si le preguntaras a Cyno, diría que la bebida de Margarita Arcoíris de Nilou ya cuenta como postre, sin embargo, los ojos de ella volvieron a brillar cuando se mencionó la posibilidad del postre.

"No, gracias", declinó cortésmente y luego miró a su invitado, "Tenemos que ponernos en marcha", la chica de ojos azules simplemente sonrió en respuesta.

"No está mal, ¿verdad?", ella estaba sorbiendo su bebida cuando él preguntó.

"Para nada, es bastante refrescante, ¿Por qué?"

"He oído que los arcoíris malos son enviados al prisma".

Nilou casi se atragantó tratando de sofocar una risa.

La Bendición de la Lluvia [Cylou]Where stories live. Discover now