II

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Pronto los murmuros se había hecho presentes.

Muchos por supuesto se descojonaban de la torpeza del joven omega, mientras que otros solo eran capaces de insultar la tan baja cuna que el menor poseía, y es que el era sólo un simple plebeyo.

─── Silencio─── En un casi gruñido el Alfa intensificó su aroma y usó al compás su voz de mando, obligando a callar a los presentes. Muchos sólo bajaron la mirada avergonzados, mientras que otros restantes sólo miraban a Jimin, viendo como éste tímidamente se mantenía jugando con su camisa algo desgastada.

Jungkook tuvo que carraspear cuando se dio cuenta de la situación, ¿Desde cuándo le importaba el bienestar de alguien? El mismo pensaba responder; nunca.

Su lobo por una vez había reaccionado, no sabía si de la mejor forma, pero odiaba los murmuros. ───Me duele la puta cabeza, ¿No sabéis estar calladitos como buenos omegas que sois? ───Tomó asiento agotado, empujando con ayuda de su lengua el lado izquierdo de su mejilla.

Su madre tuvo que intervenir rápidamente al pedir amablemente que olvidaran este suceso, restándole importancia al tema del retraso de Jimin, el castillo era lo bastante grande para perderse con tanta facilidad.

El omega sólo suspiró al perderse entre la multitud mientras veía a los demás candidatos, todos eran unos omegas con títulos, siendo estos bastante bonitos; al lado por supuesto sólo era una pequeña piedra en el camino. ¿Por qué había venido? El por supuesto no encajaba, pero necesitaba el dinero y por un momento pensó que a lo mejor no era tan mala idea tener al futuro heredero.

Los padres de Jimin siempre habían sido pobres, pero humildes. Unos campesinos que vivian de lo que la tierra les otorgaba.

Durante tanto tiempo no les había faltado nada, el menor tenía amor, comida y una familia maravillosa. Pero la sequía había llegado a su vida y el rubio tuvo que buscar una forma de ayudar a sus padres. Al principio había escuchado acerca del príncipe como estaba buscando a su omega para enjendrar al futuro heredero, y pensó que tal vez, sólo tal vez podía intentarlo.

Había leído mil historias donde chicas pobres terminaban enamoradas de los de alto linaje, ¿Por qué no podría pasarle a él?

───Madre, padre... me debo ir ya. ───Jimin murmuró con total tristeza de dejar atrás todo lo que amaba.

La madre del omega no estaba conforme a lo que su pequeño había decidido, era una idea loca al pensarlo, pero sabía lo tan cabezota que era su tan preciando cachorro, por ello aferrándolo a sus brazos ella comenzó hablar. ───¿Dónde está mi pequeño bebé que tanto miedo le daba la oscuridad? Aún recuerdo como venías a mi y me pedías que te cantase una nana.. Jimin, mi pequeño retoño te voy a extrañar mucho. ───Jimin sabía que las palabras de su madre iban con segundas, hacerle llorar. Iba a extrañar a su tan amada familia.

Unas despedidas más tarde ya se encontraba en palacio, siguiendo una bastante notable multitud de omegas que gritaban egocentrismo por dónde caminaban. Jimin sólo logró suspirar al recordar la despedida con sus padres, no habían pasado ni diez minutos y ya los echaba demasiado de menos.

Mirando a todos lados tratando de olvidar tan triste escena se pudo percatar de lo que parecía un gato, dada la situación decidió adentrarse y querer captar la atención del minino.

Lo siguiente ya se conoce, un guardia lo ve y lo lleva a dónde la reina.

───¿Como puedes ser tan sinvergüenza, plebeyo? ───Byul una vez más había abierto la bocaza para humillar al pobre omega que solo se dedicaba a bajar la mirada. ───Que asco das, ni siquiera eres capaz de mirarme a los ojos. Omegas cómo tú dan pena. ───Las carcajadas bajas por parte de los demás híbridos volvían a ser presentes. Jimin no pudo hacer nada, no solía ser partidario de la violencia ni mucho menos, por lo que optó por dar un paso hacia delante e ignorar al chico que le sacaba dos cabezas. Por otra parte Jungkook solo era capaz de mirar la escena, maldiciendo cuando sus pupilas habían opacado todo menos al omega tardon. ───Joder. ───Jungkook habló.

Después de eso se levantó y bajó las escaleras importandole poco que su madre siguiera con aquél estúpido discurso. Se tuvo que parar en seco cuando pasó al lado del omega, abriendo las fosas nasales para disfrutar del suave algodón de azúcar que hinundaban estas. ───Ni tan mal. ───En un casi gruñido sólo audible para Jimin el Alfa no pudo evitar comentar al lanzarle una suave sonrisa, encaminandose nuevamente a sus aposentos.

Ésta temporada va a ser divertida.

𓂃命  El omega del rey " [ kookmin ]Kde žijí příběhy. Začni objevovat