Charlotte (Charlie), una una chica de 17 años empieza a cantar a muy temprana edad, desde pequeña tenia un estilo único, un estilo que era el causante de que la gente se riera de ella. Una noche en una fiesta después de un largo día de concierto, se...
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7 años después. (Actualmente tenía 15) (2005)
Trabajaba en un pequeño bar para conseguir dinero extra y gracias a eso le dejaban cantar e entretener a la gente mediante eso. Me gustaba la idea porque me encantaba cantar y expresar mis emociones mediante eso.
Cantaba "Bing Me To life" de evanescene, con un guitarrista, una chica que acompañaba con la batería y el bajo.
Al acabar la canción sonreí con orgullo al ver al público enloquecido.
Metí mis manos en los bolsillos dejando antes el micrófono, saqué un paquete de cigarrillos y saqué uno para meterlo mi boca, y presionando mis labios para que no se cayera saque mi mechero.
—no eres muy pequeña para fumar?—dijo un chico rubio de ojos azules.
—quien eres tú para opinar?—dije y el elevo las manos.
—tu próxima aventura guapa—dijo el guiñándome un ojo.
—No me llames "guapa", y no eres mi tipo—dije con cara de asco.
—podría serlo—dijo acercándose.
Reí y le di un golpe suave con mi mano llena de anillos.
—No sabes con quien hablas querido—dije y con eso me fui.
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Cada noche pensaba en ese chico, su voz angelical, su cara, su maquillaje, su sonrisa.
El ya no era parte de mi vida se fue cuando acabe primaria. Pero siempre lo quedre fue el quien estuvo allí cuando esos cabronazos me hacían daño, fue él quien me sacó de la ansiedad, fue él quien me acepto.
Otra noche más mirando al techo pensando en Bill, ese pequeño chico de reluciente sonrisa y tan tierno.
Me preguntaba día tras día como estaría ahora, y supongo que nuestro destino es estar separados. La vida me quitó todo lo que quise, es tan cruel.
Pensé y pensé hasta quedarme dormida, sin darme cuenta había estado dando vueltas en mi cama hasta altas horas de la noche.
La vibración de mi móvil me despertó volviendo a la realidad mire con fastidio el móvil y alce mi mano para mirar el numero pero era oculto.
¿Quien llamaba a estas horas?
—Hola, eres Charlotte?
—Si, con quien hablo?
—Soy un representante, vimos tu actuación en el bar conseguí tu número de teléfono por una persona cercana a ti, me gusto mucho tu voz y queremos ofrecerte una oportunidad para mostrar tu talento al mundo.
Después de esta conversación, sinceramente me exploto la cabeza, ¿iba a cambiar de un día para otro mi vida? No... no creo ni que llegue a la mitad de lo que me proponen, soy vaga, insegura... Básicamente no soy el tipo de persona que alguien desearía ser.
