Capítulo 11 ''Beso''

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Juwon

Luego de lo que pasó en la habitación de Suk Ji terminé cansado que solo me acosté y me dormí, estaba tan agotado con el trabajo y el buen orgasmo que tuve que no me importó dormirme con la ropa sucia y el cuerpo sudando, aunque ahora me arrepiento de no haberme limpiado antes de dormir.

No sé qué hora es exactamente, pero ya se puede apreciar la oscuridad de la noche por la ventana de mi habitación. Me paro frente a la ventana estirado los músculos para irme a bañar, necesito una ducha urgente porque ya puedo percibir el olor del orgasmo que tuve esta tarde y no me lo quité por el cansancio.

Retiro el pantalón junto con el bóxer quedando expuesto, me miro por un momento en el espejo, aun no entiendo la obsesión que tengo de verme al espejo desnudo antes de meterme a bañar, desde muy pequeño lo he hecho. En un inicio pensé que era solo por curiosidad, por saber más sobre mí mismo, sin embargo, con el tiempo se volvió algo tan habitual y me parece necesario estar frente a un espejo mientras hago cualquier cosa, en el momento que me cambio de ropa, me desvisto o lo que sea que haga necesito tener un espejo frente a mí y por esa razón mi habitación tienes varios espejos para observarme en diferentes ángulos.

Admiro mi abdomen y pecho perfectamente firmes por el ejercicio diario que hago. Hacer ejercicio me ayuda mucho a calmar mis hormonas ahora que tengo a Suk Ji en la casa, tan cerca de mí, tan cerca para poseerlo de todas las formas en las que me imagino.

—Cálmate —me obligo a relajarme sintiendo mi miembro endurecerse por el pensamiento lujurioso que acabo de tener en tan solo unos segundos.

La puerta de mi habitación se abre abruptamente haciendo que me sobresalte, nadie entra a la habitación sin tocar, aunque me relajo cuando veo que es Suk Ji quién lo hizo, a pesar de estar desnudo no me inmuto en lo más mínimo ni tampoco busco la forma de cubrir mis desnudes luego de lo que paso entre nosotros hasta dudo poder contenerme desde ahora, lo deseo más que a nadie y quiero meterme entre sus piernas y sentir su entrada apretar mi pene, envolverme con su calor hasta volverme loco.

—¡Wtf! —dice mirando perplejo mi entrepierna que de un momento a otro se encuentra erecto de solo tener a Suk Ji mirarme con los ojos bien abiertos, asombrado.

<< ¿A caso no lo sintió cuando se movía sobre mí?>>

No disimula ni un poco su asombro, no tiene intención de quitar los ojos de mí órgano, se relame los labios provocando que mi erección de un brinco por lo provocativo que me pareció lo que acaba de hacer. Con la mano cierra la puerta sin despegar la mirada de mi intimidad y no quiero que lo haga, quiero saber si puede hacerlo, si lo va hacer.

Ninguno de los dos nos movemos y el ambiente comienza a calentarse, sus pies se mueven en mi dirección con lentitud, sus pupilas se dilatan cuando estamos cerca y solo pocos centímetros impiden que mi pene toque su cuerpo.

—Ju-Juwon —dice en un hilo de voz casi en un ruego, implorando que haga lo que los dos tenemos en mente.

—Si —alzo su mentón obligando a que me mire a los ojos, su mirada oscura por el deseo.

<<Si Suk Ji, deséame como te deseo.>>

—¿Quieres sentirlo? —enarco una ceja torciendo una sonrisa.

—No —su respuesta me llena de sorpresa —. Es mi juego, no el tuyo —frunzo el ceño aún más confundido.

Se supone que los dos nos deseamos de una manera que no debemos hacerlo por lo inmoral que es, sin embargo, ahora me está diciendo que no quiere hacerlo. Es su juego y no piensa jugar, pues si no lo hace lo haré yo porque no pienso seguir soportando este puto dolor en mi pene cada vez que sonríe de esa manera que siempre lo hace, cuando se relame sus labios o con solo tenerlo frente a mí, no creo poder seguir soportando tanta abstinencia.

Seducción [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora