LOS FLASHES DE LA CÁMARA HACEN QUE PAREZCA UN SUEÑO (Supercorp)

Capítulo 35: Red

Hay un viejo poema de Neruda que siempre me ha cautivado, y uno de sus versos se me quedó grabado desde la primera vez que lo leí. Dice "es tan corto el amor y es tan largo el olvido". Es una línea con la que me he relacionado en mis momentos más tristes, cuando necesitaba saber que alguien más se había sentido exactamente de la misma manera. Y cuando tratamos de seguir adelante, los momentos a los que siempre regresamos no son los mundanos. Son los momentos en los que viste chispas que no estaban realmente allí, sentiste estrellas alineándose sin tener ninguna prueba, viste tu futuro antes de que sucediera y luego lo viste desaparecer sin previo aviso. Estos son momentos de esperanza renovada, alegría extrema, pasión intensa, ilusiones y, en algunos casos, la decepción impensable. Y en mi mente, cada uno de estos recuerdos me parece igual. Rojo.

Mis experiencias en el amor me han enseñado lecciones difíciles, especialmente mis experiencias con el amor loco. El rojo, relaciones que iban de cero a cien millas por hora y luego golpeaban una pared y explotaban. Y fue horrible. Y ridículo. Y desesperado. Y emocionante. Y cuando el polvo se asentó, fue algo de lo que nunca me retractaría. Porque hay algo que decir por ser joven y necesitar tanto a alguien, saltas de cabeza sin mirar. Y hay algo que aprender al esperar todo el día por un tren que nunca llega. Y hay algo de lo que estar orgulloso de seguir adelante y darse cuenta de que el amor verdadero brilla como la luz de las estrellas, y no se desvanece ni se quema espontáneamente. Tal vez escribiré un álbum completo sobre ese tipo de amor si alguna vez lo encuentro. pero este álbum trata sobre los otros tipos de amor en los que me he enamorado recientemente. Amor que fue traicionero, triste, hermoso y trágico. Pero sobretodo, rojo.

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"Tuve que comprar esa casa al final", dijo Lena con un resoplido, mientras apretaba los labios, tratando de contener una sonrisa. "Regresé a casa y me sentí aliviada porque sabía que iba a terminar con la farsa. Fue como quitarme un peso de los hombros, a pesar de que era lo único que nos estaba dando a Kara ya mí la oportunidad de tener una relación normal. Simplemente, no me sentía bien en ese momento".

"¿Y tu equipo simplemente... te dejó terminarlo?"

Con una sonrisa sardónica, Lena se apartó el cabello de la cara y cruzó las piernas, se recostó en su silla y se hundió en el suave cuero mientras se desinflaba un poco. Una expresión de disgusto cruzó su rostro por un breve momento, antes de agarrar los brazos de su silla y darle a Leslie una brillante sonrisa, al borde de ser demasiado falsa.

"Bueno, no estaban contentos con eso", dijo Lena con una risa corta, "de ahí la maldita casa. Sin embargo, Ben y yo sabíamos que teníamos planes a corto plazo y nuestros equipos también lo sabían. Solo... fingimos que todavía estaríamos juntos por el resto de julio. Mi equipo hizo una oferta por la casa esa semana, rompimos y nadie sabía nada porque ¿por qué demonios compraría una casa frente a la de los abuelos de mi novio a menos que todavía estuviéramos juntos? No me habían pintado tan loca. Todavía."

"Así que tú y Kara..."

"Tuvimos cuidado," dijo Lena, "pero no tuvimos que tener cuidado por mucho tiempo de todos modos; pronto se fue a Francia, para su nueva película. Por supuesto, todos estaban tratando de empujarme a un nuevo hombre, y yo sabía que sería inevitable, pero no podían forzarme legítimamente a hacer otro truco de relaciones públicas tan pronto después de una ruptura sin que se reflejara mal en mí. Incluso Edge reconoció el hecho de que ser tildada de puta no era algo bueno para mi imagen. Así que me dieron un poco de espacio para respirar. Y luego lancé mi álbum".