Capítulo 8

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Draco tenía un trabajo en el que no podía darse prisa cuando necesitaba estar con Hermione.

Se imaginaba lo que debía estar pasando de él. Porque para hablar claro, la estaba plantando. Se suponía que iban a comer juntos, cono en una cita. Hermione había protestado mucho sobre todo porque él no había podido llamar desde que se más marchará de su casa aquella mañana.

Esbozó una sonrisa mientras le daba los últimos puntos al pulgar de un joven paciente, luego escribió las recetas mientras Octavia le vendaba la herida. No había podido pensar con claridad en todoel día, con la imágenes de Hermione en sus brazos, tomándolo en su interior, calentándole la sangre hasta emborracharlo. Sólo con pensar en besar su piel desnuda se endurecia.

_¿Doctor?

Draco se despabiló y miró a Octavia. Le extendió un informé para que lo firmara. Leyó las anotaciones que había hecho, con una caligrafía mucho mejor que la suya, garabateó la firma.

Mientras ella acompañaba a la madre y al niño a la salida, Draco se dirigió al teléfono que había en la pared, pero no llegó ni a acercarse.

_Oh, no, todavía no, doctor Malfoy. Joey Marsh le espera.

Draco gruño y se dio la vuelta.-¿Qué le pasa está vez?

_Tienes un guisante en la nari-trató de sonreír en vano.

_¿Solo uno?-rió Draco entre dientes-. Vamos a ver si podemos calmar a la señora Marsh. El niño debe volverla loca.

Mientras caminaba hacia la sala de espera, Draco miró la hora, miró el teléfono en la recepción de las enfermeras y luego la pila de informes y el pasillo llenó de pacientes. No tenía tiempo de llamar, pemso con decepción, y se metió en su despacho.

Cuatro horas más tarde, cuando se derrumbó en la silla en un descanso, marco el número de Hermione. Salto el contestador y le dejo un mensaje. Luego, llamó a su casa, por si ella estaba allí, pero tampoco.

_¿Dónde está?-le faltaba varias horas para ir a trabajar. ¿Estaba enfadada porque no la había llamado? ¿lo evitaba?

《No》pensó,《No te precipites》.S e trataba de  Hermione y ella rara vez de quedaba callada cuando estaba enfadada.

Draco se pasó una mano por la cara, notando que sentía algo inseguro respecto a ella por primera vez en su relación.

Con las demás mujeres, él sexo no había significado mucho. Con Hermione lo cambiaba todo. La doferecia estribaba que tenía miedo de perderla.

Cuando Draco no se presentó en el lugar en el que habían quedado, Hermione se sintió abandonada hasta que llamo al hospital y se enteró de que tenía muchos pacientes por atender. Lo perdono inmediatamente, pero no pudo dejar de darle vuelta a la cabeza.

Llamo a Ginny, y en aquellos momentos las dos estaban sentadas en la terraza de una cafetería, charlando.

_Lo supe desde el momento en que escuche tu voz por teléfono-dijo Ginny-. Hablabas con un tono extasiada, pero parecía decir 《Oh, Merlín, que he hecho .

Ginny tenía razón. Estaba encantada con lo ocurrido. Había sido uno de los momentos más increíbles de su vida. De hecho la necesidad imperiosa de tenerlo cerca iba creciendo en su interior, anulando si sentido común. Aún así, él sentimiento de la felicidad se mezclaba con otros sentimientos confusos que la había incomodado a lo largo del día.

Amaba a Draco. De eso no cabía ninguna duda. Era su alma gemela y siempre lo había sido, pero las diferencias entre ellos seguía siendo evidente. Sobre todo en el hecho de tener niños.

¡Lo real está aquí!Where stories live. Discover now