El último cruce

Capítulo 9

"Proyectos"

Olía a ese mismo perfume que anoche.

Me dieron ganas de seguir ahí un buen rato tras haberme dado cuenta que estaba en su habitación tapada con la sábana blanca que tenía.

Las cámaras y algunas fotografías decoraban toda la habitación. Y sin olvidar el cartel que tenia al frente de la NBA. No quería despertarme ni siquiera quería moverme a un lado o al otro. No tengo idea de lo que hago ahí. Y tampoco, se porque me duele la cabeza a ese nivel. Mi cuerpo luce cansado y se funde más en la cama

Tengo que dar el primer paso...

Con un tan solo un ojo miro debajo de la sabana, vale estoy solo con sujetador y mi camisa está tirada al suelo. Luce salvaje ahí tirada. ¿Como la habré quitado? Siento aun el mareo de anoche y de pronto me acuerdo de lo que he bebido.... ¡Mierda! No debí haber hecho eso. Aunque la verdad nunca había tenido una noche donde bebiera tanto como lo hice ayer.

El móvil estaba a mi lado, trato de encenderlo y lo primero que veo son los
dos mensajes de mi madre. Y los diez, de Moren. Vale, estará preocupado porque lleva sin saber de mí desde ayer por la mañana.

Moren: ¿Donde estas sin responder? —Fue su último mensaje al cual leía en pantalla

Ava: He estado de fiesta, lo siento —Respondí con toda sinceridad

No era una buena forma esa de ocultarle algo. Moren es mi novio y se merece saber todo. Salí de fiesta como cualquier persona haría. Bueno, la de terminar en la cama de un extraño... Casi extraño... No es algo muy común, teniendo novio. Aunque espero que eso, no sea algo que pueda deshacer más mis hilos.

Dejo el móvil encima de la cama suspirando. Sigue el dolor de cabeza en mi. Trato de no estar más en esa cama aunque me siento avergonzada de como habré terminado ahí. ¿Que sucede conmigo? ¡Sal de ahí Ava! ¡Sal de la cama! ¡Vendrá y te verá así! ¡Sal de esa cama!. Mi cabeza está gritándome sin parar. Bombardeando cada segundo que saliera de esa cama. No suelo hacerle caso mucho a mi cabeza pero creo que tiene razón esta vez.

Tenía la sensación literalmente de que podría haber hecho algo incorrecto la noche pasada.

Trato de levantarme. Busco mis cosas y me pongo la camisa de anoche que llevaba puesta. Odio ese olor a alcohol que tiene... El mareo sigue en mi. Trato de posicionarme de una forma calmada hasta lograr abrocharme la camisa. Sigo teniendo mucha sed.

—¡Buenos días! —Escucho tras mirar a la puerta de salida de al frente del baño

Esta sin camiseta, con el pelo mojado y lleva solo una toalla gris oscuro tapando sus partes. Se le marcaba la polla. ¡No puede estar pasando esto! ¡Es imposible! La vergüenza de que mis ojos hayan ido directamente ahí se enciende. Estoy en un estado bloqueado y siento una gran humillación. Trato de girarme completamente mirando hacia el otro lado...

—¿Que haces así? —Preguntó —Tápate, estás casi desnudo —le pedí y el saca una sonrisa

No, no, no... ¿Porque no se viste?

—Normalmente vivo aquí... —Dice burlón —Y estas en mi habitación, y no es algo que no hayas visto

—¿Visto? —Repito fríamente — ¿Lo... Hemos...? ¿Acabas de decir que hemos...? ¿Hemos follado? —Señalando mi cuerpo y el suyo

—¿Acaso no te acuerdas de lo que paso? —Pregunta —Pensé que estabas consciente como dijiste

—Hemos...

Trato de ubicarme y de acordarme de los últimos pasos. Eso era imposible, no puedo haberme pasado nada parecido ni a un beso. Es imposible que hayamos follado. No, no, no. Estoy desquiciada quiero matarle ahora mismo. Eso de que odiaba a Jake Dessner puede que no solo lo pensara cuando estaba borracha.