Capítulo XIV.

117 7 0
                                    

Verdad.

Pablo Gavi.

Ya no puedo seguir con esto, tengo miedo de que _____ se enteré de esta absurda apuesta que hice con Garnacho y mandé por el caño todo lo que hemos pasado estos dos meses.

—Tío, ¿qué pasa contigo?— espetó Pedri acercándose.

—Nada tío, solo estaba pensando—.

—¿En _____?— subió y bajo sus famosas cejas poblanas.

—...— reí—, no, no, bueno si. Desde que la conocí no dejo de pensar en ella—.

—Lo sé— rodó los ojos fastidiado—, aún recuerdo ese día, notaste que saludé a Adrian y me preguntaste si la conocía a ella también—.

—No fue mi culpa, fuiste muy obvio saludando a Adrian—.

—Vale, admito que fue mi culpa— rió—, entonces dime, ¿en qué pensabas?—

—Ya sabes en la apuesta que hice con Garnacho—.

—¿Apostaste con Garnacho?— espetó Ferran acercándose a nosotros.

—¿Qué coño haces aquí?—

—Nada— levantó los hombros restándole importancia—, solo iba pasando y escuché su plática—.

—Ferran, no te diré nada— espeté suspirando.

—Venga tío, si alguien puede ayudarte es él— defendió Pedri.

—Si, si cuenta que pasa con esa apuesta—.

—Valeee, en pocas palabras. Garnacho era novio de la chica que quiero—.

—_____—.

Si, todos en el equipo ya sabían que me gustaba alguien, y mi querido amigo Pedri había sido el informativo diciendo quién era y como avanzaba nuestra relación.

—Si, ella— confirmé—, él vino a buscarme y me pidió apostar, yo no quería que ella saliera lastimada, porque si no aceptaba Garnacho le iba a decir que le fue infiel con otras estando en una relación con ella—.

—¿Aceptaste?—

—No tuve otra opción, no quería que _____ sufriera—.

—¡Ay, Gavi!— Ferran me abrazó por los hombros—, ella verá el gran chico que eres y verá lo que hiciste por ella— sonrió.

—El problema ahora es que ya no quiero seguir con esta apuesta, quiero estar con ella porque quiero, no por una estúpida apuesta—.

—Si no quieres perderla, debes decirle la verdad—.

—¿De qué verdad hablan?—

¡Carajo! ¿En serio? Tragué saliva y di media vuelta para ver a Mateo, Adrian y Paulo detrás de nosotros tres.

—¡Amigo!— Pedri saludo a Adrian.

—¡Hola! Pero enserio, ¿de qué verdad hablan?— espetó Adrian.

—Tiene razón, no sé si escuché mal, pero también mencionaron el nombre de _____, ¿todo bien?— Paulo.

—Si, to...to...todo bien— confirme.

—Estas tartamudeando— espetó Mateo con los brazos cruzados.

De todos los amigos de _____ el que más miedo me daba era Mateo, y todo por lo que ella me contaba de él, me dijo que desde pequeños él siempre la defendió de todos, incluso tuvo que golpear a un chico que quiso pasarse del límite con ella en una fiesta.

Untouchable || Pablo Gavi & Tú. (En Pausa Indefinida)Where stories live. Discover now