Capítulo 67 : Patitos de goma y carpetas de boda

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Ron tiene que tocar una raya y se lo va a decir literalmente a todo el mundo





Ron bajó corriendo las escaleras y empujó a los gemelos fuera del camino.
“¿Qué están esperando-” se detuvo cuando vio lo que llevaba puesto su padre. Arthur Weasley tenía puestos unos pantalones de pijama con un top corto brillante encima. Sus botas de lluvia a cuadros unieron todo el conjunto.
“Chicos, ¿creen que los muggles se darán cuenta?” Ron compartió una mirada con Fred.
“¡No es eso!” Dijeron al unísono y George dio un grito ahogado dramático.
“¿Traicionado por mi propio gemelo? ¡Cómo pudiste, Fred!” George lo miró devastado antes de continuar “bueno, supongo que Herm podría hacerme sentir mejor”. Los gemelos comenzaron a pelear mientras Ron miraba.
“Ronnie, ¿mi atuendo no es lo suficientemente llamativo?” Los gemelos habían escapado a la otra habitación y Ron resopló. ¿No lo había llamado, ya nada era sagrado?
“Papá, eres demasiado llamativo. Todo lo que necesitas usar son jeans y una camisa. No es como si fuéramos a otro planeta”. Observó cómo su padre se desinflaba antes de volverse para cambiarse. Se sentía bastante culpable, tal vez debería haber sido un poco más amable. Últimamente se había sentido bastante malhumorado. Herm dijo que era la pubertad y esperaba que no. No podía imaginar estar tan emocional todo el tiempo.
“¿Qué tal si ayudo a papá? He visto lo que usa el Sr. Granger, así que esa es la única razón por la que sé cómo se visten los muggles”.
“Gracias, Ronnie”. Su papá se puso algo más normal y preguntó “¿Estás emocionado de ver a tus amigos? ¡No puedo creer que vayamos a un acuario!”.
"Estoy muy emocionado. Me sorprende que Draco supiera lo que era un acuario. ¡Escuché que tienen tiburones!” ¡Ron había encontrado un libro sobre peces en la biblioteca de la escuela y esperaba que pudieran acariciar rayas!
“Me sorprende que Lucius vaya también. ¿Alguna vez te conté sobre la vez que se cayó al lago cuando estábamos en la escuela? El calamar gigante le tomó cariño. Narcissa tuvo que luchar para que lo dejara ir”. Ron se echó a reír. Se imaginó a una señora Malfoy de aspecto peligroso sacando al señor Malfoy del gran lago negro.
“¡No puedo esperar para decirle a Draco! Lo va a amar”. Todos finalmente estaban listos y tomaron un traslador a la casa de Herm. Ginny miró a su alrededor con curiosidad. Ella no había sido parte de la HFC cuando llegaron el verano pasado. Ron caminó hacia la puerta y llamó con fuerza. El Sr. Granger abrió la puerta y dijo: “¡Hermione! Tus amigos están aquí. Por favor entren”. Entraron a la casa y vio a su papá mirando todo.
“Arthur, Hermione me dijo que estás interesado en los patitos de goma. De hecho, los colecciono, ¿quieres verlos?” Su padre parecía que había muerto y se había ido al cielo muggle.
“¡Sí, por favor! Siempre me ha fascinado tanto...” Sus voces se desvanecieron cuando salieron de la habitación.
“¡Hola chicos! ¡Perdón por la espera!” Herm tenía el cabello recogido en dos trenzas y vestía un vestido de verano vaporoso. Los gemelos ya la habían tomado de ambas manos.
“Herm, te ves como una diosa del verano. Nunca hemos visto nada más hermoso”. La puerta volvió a sonar y Ron fue a abrir. No necesitaba ver a sus hermanos adulando a su vicepresidente.
“¡Hola Nev!” Neville pareció sorprendido de verlo.
“Ron, ¿te mudaste a la casa de Herm?” Ron resopló y tiró de él a través de la puerta.
“Nah, no podía soportar ver a Fred y George llorar por Herm. Me está dando asco”. Neville se atragantó con su saliva mientras reía a carcajadas. Entraron en la sala de estar y encontraron a los gemelos todavía diciendo tonterías románticas. Ginny había descubierto cómo hacer funcionar la tele y estaba viendo una especie de telenovela española. Hubo un fuerte ruido afuera y todos compartieron una mirada.
“Creo que llegaron Harry y Draco”.

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Fleur se rió mientras miraba a Draco cargar a Harry por los escalones. Se había negado a dejarlo caminar en caso de que tropezara y se rompiera el tobillo. ¿Cómo podía ella discutir con esa lógica?
“¡Arry, me encanta tu mono! Te ves encantador en marrón”. Los tonos marrones resaltan sus ojos y ella no pudo evitar arrullar a su hermano pequeño. Pater había aceptado la propuesta de sus padres por lo que estaban planeando la boda. Esperaba que Harry fuera el chico de las flores. Había hecho una apuesta con Tonks de que Draco se desmayaría al ver a Harry caminar por cualquier tipo de pasillo.
“Draco, Harry no se va a romper”. El Sr. Malfoy suspiró y ella estaba bastante segura de que estaba molesto porque no llevaba al niño. Los dos hombres Malfoy tenían una extraña rivalidad por Harry. El Sr. Malfoy trató de ser un mejor padre y Draco trató de ser un mejor compañero. No podía imaginar cuánto peor sería cuando los dos niños tuvieran sus propios hijos.
“Hola Fleur! ¡Me alegro de que pudieras venir!” Herm dijo desde la puerta, su vestido atrapando la brisa de verano.
“¡Ah, vicepresidente! ¡Te ves bien cariño!” Ella besó ambas mejillas.
“¡Gracias!” Se sonrojó y los gemelos le lanzaron una mirada amenazadora que ella ignoró. Miró a su alrededor antes de ver a Ron.
“¡Ron! ¿Cómo estás? ¿Has crecido?” Se maldijo a sí misma. Un idiota podría decir que el chico pelirrojo había crecido. Ella todavía era un par de pulgadas más alta que él.
“Hola Fleur! Estoy bien. ¿Cómo estás?” Mientras trataba de no titubear en sus palabras, lo miró de cerca. No parecía tener ninguna herida, gracias a Merlín. Ella personalmente arrancaría la columna vertebral de cualquiera que lo lastimara. Él era de ella. Vio a Draco darles una mirada astuta antes de susurrarle a Neville. El otro chico parecía sorprendido pero asintió lentamente.
“¡Ron! ¡Te extrañé!” Harry lo envolvió en un abrazo que Ron correspondió.
“¡Harry! Yo te extrañe mas”. Los dos chicos se rieron mientras se revolvían el cabello.
“¡Muy bien niños! ¡Vámonos!” Dijo el Sr. Weasley mientras los rodeaba. Hermione solo vivía a veinte minutos del acuario, así que iban a caminar. No estaba dispuesta a subirse a un automóvil con dos magos sangre pura al volante, no tenía deseos de morir.
”Oye, Ron, ¿superaste tu enamoramiento por Viktor Krum?” Sintió que sus labios se contraían en un gruñido. ¿Tenía un qué?
“¡Merlín Draco, déjame en paz! Simplemente pensé que era genial”. Neville intervino: “¿No dijiste que lo dejarías hacerte cosas indescriptibles?” Sus manos se sentían calientes y rápidamente apagó las bolas de fuego que se formaban.
“¿Viktor Krum no va a Durmstrang?” Preguntó casualmente, su voz era un siseo. Draco sonrió y dijo “¡sí, lo hace!” Quizás tendría que visitar a la estrella de Quidditch. Ella no lo dejaría siquiera pensar en robarle su amor.

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Draco se dio una palmadita en la espalda. Krum ni siquiera pensaría en Harry con la furiosa Veela respirándole en la espalda.
“¿Estaban hablando de Viktor?” preguntó Harry y Draco entró en pánico.
“No, estábamos hablando de Snappy”. Dijo rápidamente. Ginny resopló detrás de él y dijo: “Sí, Harry, todavía no puedo creer que Dumbledore no haya intentado nada”. Draco le habría arrancado la barba al anciano si hubiera tocado a su hijo.
“Oh, registré a Snappy con los goblins como mi heredero, así que si intentara algo, sería considerado un ataque contra la Casa Potter”. Harry dijo y Neville dejó escapar un grito ahogado de asombro.
“¡Eso es sangrientamente brillante, Harry!” Ron gritó y el Sr. Weasley lo hizo callar. Draco solo miró a su amado con orgullo. Por supuesto que Harry era brillante.
“¡Hemos llegado! ¡Ahora todos diviértanse!” Dijo su padre y todos se dividieron en grupos. Fleur se pegó al lado de Ron y los gemelos agarraron las manos de Hermione. Ginny pasó su brazo por el de Neville y tiró de él hacia los delfines.
“¡Draco mira!” Harry tenía la cara presionada contra el cristal y miraba a una ballena que pasaba nadando. Pasaron la siguiente hora mirando alrededor y leyendo sobre diferentes tipos de peces. Eventualmente se encontraron con los demás y Draco notó la alegría en el rostro de Ron.
“Pudo acariciar algunas rayas”. Fleur explicó, sus ojos suaves mientras lo miraba.
“¡Chicos miren! Una cabina de fotos”. Harry y Herm chillaron cuando ella entró. Compartió una mirada con los otros niños magos y los siguió. Todos se apretujaron y posaron para diferentes fotos.
“¡Haré que Kreacher haga copias para todos!” Harry dijo, su sonrisa se extendía por su rostro.
“Hay una heladería a la vuelta de la esquina”. Dijo su vicepresidente.
“Muéstranos el camino, Hermione”. Su padre anunció y pronto todos estaban compartiendo helado, riéndose de los datos sobre los pescados que aprendieron.

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Harry le dio un beso de despedida a Draco antes de cruzar el Flú. Se las arregló para mantenerse en pie, pero aun así tropezó. Sirius se había acostumbrado a dejar cojines en el suelo para atraparlo y que no se lastimara.
“Cachorro, ¿eres tú?” Su padrino lo llamó y caminó por el pasillo para encontrarlo en su oficina.
“¡Hola papá!” Sirius miró fijamente su camisa nueva antes de comentar “¡guau! Camisa genial, cachorro”. Lo había conseguido en la tienda de regalos. Tenía peces por todas partes en un encantador color azul.
“¡Gracias! Te tengo algo”. Sacó el pisapapeles de su bolsillo y lo puso sobre su escritorio. Era una estatua gigante de ballena naranja.
“Eso es tan dulce de tu parte, cachorro. No tenías que hacer eso”. Sirius se secó las lágrimas y lo abrazó.
“En realidad quería hablar contigo, si tienes un momento”. Harry se sentó, curioso por lo que su padrino tenía que decir. Cerró la puerta y se apoyó en su escritorio.
“Voy a proponerle matrimonio a Severus. Quería hablar contigo primero. Si te sientes incómodo de alguna manera, esperaré. Amo a Severus, pero tú eres mi prioridad número uno”. Nunca antes había visto a Sirius tan solemne.
“¿En serio? ¡No puedo esperar! ¡Siempre he querido tener padres y ahora tendré dos! ¿Necesitas ayuda? Tengo una carpeta de bodas que puedes mirar”. Harry dijo efusivamente y salió corriendo de la habitación. Arrastró su carpeta a la habitación y necesitaba ayuda para colocarla en el escritorio de Sirius. Herm lo había comenzado en su primer año y solo la magia lo mantenía unido.
“Si ves algo que te gusta, ¡siéntete libre de usarlo! ¿Sabes cómo lo vas a proponer?” Su papá parecía bastante desconcertado mientras miraba fijamente la carpeta de la boda.
“¿Realmente no te importa, Harry? Quiero que seas honesto conmigo”. Puso los ojos en blanco y golpeó a Sirius en la frente.
“Amo a padre, papá. Iba a hacer que el HFC planificara la boda y que ustedes dos aparecieran, si es que no se han casado antes del cuarto año”. Observó a papá abrir y cerrar la boca antes de negar con la cabeza.
“¡A veces me recuerdas demasiado a James, cachorro!” Empezó a hojear la carpeta y se detuvo.
“¿Es esta la cima del monte Everest?” Harry se rió de su expresión.
'“Hermione pensó que la nieve sería romántica”. Lo pensó antes de agregar “realmente vas a tener que asombrar a padre. Escuché que los padres de Fleur alquilaron el Louvre para proponerle matrimonio a Remy”.
“Ay, Merlín”. Al ver su expresión de pánico, Harry dijo rápidamente.
“¡Estoy seguro de que a padre le encantará todo lo que hagas!”
“¡Creo que me voy a enfermar!”

Fanboy: Draco Malfoy convence a Harry Potter de casarse con el Where stories live. Discover now