Chica

1 0 0
                                    


Querido Diario:

Cuando creía que mi día no podía ir a peor, fue a peor.

Debido a esto, me he visto obligada a arrancar la pagina en la que estaba escribiendo cuando estaba sentada frente al ayuntamiento. Lo cierto es que, podía haber escrito esto en aquel mismo lugar, pero no me pareció lo mas acertado, preferí esperarme a llegar a casa porque no quería encontrarme de nuevo con aquel chico.

No quería encontrarme de nuevo con R***.

Pero mejor será que escriba esto desde el principio, para así poder recuperar parte de lo que rompí en la anterior pagina.

Sobre las tres y media de la tarde, después de haber almorzado, salí de mi casa para dirigirme a un casting para un largometraje. No me entretendré en añadir de que iba el largometraje, y muchos menos me entretendré en hablar sobre el papel que supuestamente iba a interpretar, no quería recordar nada de ese casting, demasiado es que voy a hablar de mi experiencia, demasiado es que voy a hablar de cómo se rieron de mi.

He ido a muchos tipos de casting, no solo para obras de teatro (Entre las que se incluye la ópera en la que actué, y en la única en la que me escogieron, aunque fuera de figurante) sino también para cortometrajes, y algún que otro largometraje, y puedo asegurar que, en ninguno, me faltaron al respeto como en este. En todos los casting en los que había ido, había un ambiente agradable, amigable, de confianza, como si fuera una especie de reunión de amigotes a los que llevas mucho tiempo sin ver. Un ambiente agradable en el que te sientes seguro, pero en cambio, en este ultimo casting, no había un ambiente amigable, ni confiable. En este casting solo habia tres personas, mirándome, como jueces en un estrado, convirtiéndome así en el centro de atención.

Estaba bastante nerviosa, y temblaba de pies a cabeza. Me pidieron que hiciera varias cosas, entre ellas, decir el pequeño guion que me habían mandado por correo, y que por supuesto, había memorizado sin ningún problema.

No se si lo hice bien. Personalmente, pienso que no, pero esta parte no fue la peor.

Después de que dijera mis frases, me pidieron que hiciera varias escenas de improvisación, algo que se me da mal, no se me da nada bien improvisar, y debido a eso, las escenas que me pidieron que interpretara, las hice mal, jodidamente mal. De hecho, las hice tan mal, que los jueces, por lo bajo, comenzaron a reírse de mi, algo que me pareció muy poco profesional, y por supuesto, me pareció una falta de respeto enorme. Pensé en irme rápidamente, pero decidí no hacerlo, decidí acabar lo que había empezado.

Aun sigo preguntándome si fue la decisión acertada.

Y entonces, después de improvisar las escenas que me pidieron, me dijeron que me llamaría en caso de que me escogieran (Evidentemente, lo dijeron por educación, algo que me pareció gracioso e innecesario a aquellas alturas, ya se habían reído de mi, en aquellas palabras ya no había nada de educación, y por supuesto, era obvio que no me iban a llamar), fue entonces cuando me despedí, y me fui rápidamente, sin pararme a hablar con nadie.

Esto es un breve resumen de lo que estaba escribiendo en la pagina arrancada, cuando se presento el.

Aquel chico, que empeoro más mi día.

Y lo gracioso es que... Todo empeoro debido a una palabra.

Todo empeoro debido a un <<Hola>>.

Aquella palabra, aquella dichosa palabra, hizo que levantara la cabeza ya de por si un poco molesta. Cuando estoy escribiendo no me gusta que me molesten porque suelo perder el hilo de aquello que estoy escribiendo, porque luego me cuesta mucho trabajo recuperarlo, al igual que tampoco me gusta que me molesten cuando estoy triste o decaída, en aquella ocasión, me enfade con el por ambas cosas.

AmorWhere stories live. Discover now