Started with a lie [Guapoduo]

03

↷✦; C a p í t u l o 3 ❞

Era un nuevo día. Cellbit y Roier se encontraban en la casa del primero jugando videojuegos cosa que ya era habitual para ellos.

—Les mostré la foto... Pero parecía que no me creían. Dijeron que... Era una foto que cualquiera se podía tomar.

—Normalmente não tiramos fotos assim, como eles são irritantes!

—Por eso... Quieren que...—dirigió su mirada al suelo algo apenado.

—O que eles querem? —preguntó Cellbit mientras agarraba la taza de café que tenía a su lado— Diga-me, eu já recusei algum favor seu?

—Quieren...una foto de un beso.

Cellbit que nuevamente se encontraba dándole un sorbo a su bebida al escuchar las palabras del castaño y procesar estas se sorprendió tanto que volvió a escupir la bebida.

-O-O quê!!! Que diabos?!—dijo el rubio completamente sonrojado.— Co...Co..Como podemos fazer isso?! Qué asco!

Al escuchar las palabras del más alto Roier sintió una presión en el pecho y sus ánimos decayeron en picada.

—Sabía que no querrías... Ya les dije que no. —el castaño se levanto del suelo y empezó a acomodar su ropa— Ya me voy.

—¿Eh?—dijo el brasileño algo desconcertado— É tarde demais, fique aqui.

—No. —se detuvo en el marco de la puerta y volteó a ver al rubio ofreciéndole una pequeña sonrisa— Me voy.

—Então... Quando você chegar em casa —antes de que el mayor pudiera terminar de hablar el castaño salió dando un portazo— Me avise... Ele parece irritado.

Por otro lado Roier bajaba las escaleras cabizbajo mientras recordaba lo sucedido el día anterior con los chicos.

—¿No les basta con una foto juntos?

—¡No!—respondió enojado Aldo poniéndose de pie y golpeando la palma de sus manos contra la mesa haciendo que los otros dos chicos den un pequeño brinco por la impresión.

—Entonces...¿Dándonos un beso sí?— ofreció Roier sonriente.

—¡¿Un beso?!

—Así sí—apoyó Missa.

El chico se sentó en las escaleras viendo hacia el suelo.

Era mentira...

Una sola mentira se está alargando...

—¡Qué asco!— recordó las palabras del híbrido de gato.

—Soy... ¡un completo pendejo! —dijo abrazandose a sí mismo.

-Continuará-