Mi luz (GADRI)

Eres mi luz

Pedri se volvió a levantar pero esta vez la habitación se veía diferente, se veía ya de noche, Pablo seguía durmiendo a su lado con una respiración tranquila, todavía no se había acostumbrado a él, lo conocía de hace nada más que una semana y sentía la conexión con su Alfa directo, pero Pedri solo conocía la personalidad del Alfa, como será la personalidad de Pablo? Su madre siempre le había dicho que hay algunos Alfas que cuando pasan un celo profundo e intenso, puede ser que no se acuerden de lo que han echo en esa fase, solo espera que con Pablo no le haya pasado lo mismo, porque Pedri no es de esas típicas personas que se queden a dormir justo la primera noche. Cogió el teléfono de la mesilla de noche, las 23.30h de la noche, su estomago rugió, normal, no había comido nada en todo el día para hacer compañía a ese Alfa que le vuelve loco, con cuidado de no despertar-lo se fue de su habitación, rió porque le recordó al deja vú que tubo hace unas horas con Aurora, pero debía cenar, estaba en plena fase de recuperación de peso y de sus costillas y debía hacer caso a la doctora. 

Bajó en silencio y como pudo a la cocina, no iba a negar que no le dolía todo el cuerpo y la zona de las costillas la que más, necesitaba un calmante que la doctora le dio, porque demonios dolía como el mismo infierno. En cuando llego, miró por toda la cocina para ver que se podía preparar, recordó mentalmente lo que le dejaron comer las primeras semanas miré si tenía arroz y pechugas de pollo y bingo lo encontró y se hizo todo en un bol con un poco de nueces para rematar de postres ya que tenia que comer frutos secos. En cuando se empezó a hervir toda la cena, empezó a oír ruidos de arriba que venían a ser mas fuertes cada paso que daba, hasta que se encontró con Gavi que entraba en la cocina

-Que rico huele aquí... anda Pedro que haces tu aquí? 

Pedri se quedó estatico en el lugar, no podía ser cierto que Gavi no se acordara de nada des de que salió del hospital en celo verdad? No podía tener tan mala suerte en la vida más que él verdad? 

Pedri, que seguía estatico en su lugar, reacciono al ver que Gavi estaba esperando una respuesta, pero se encontraba que no le salían las palabras por ningún sitio, hasta que por nose que lugar Aurora salió a su salvación

-Pablo que haces levantado cariño? Ya estas de tu celo al 100%?- Aurora miró a Gavi a los ojos directo y sonrió, eso significaba que si 

-Si, eso creo, pero no recuerdo haber invitado a Pedri aqui, y tu que haces aquí? No debías de estar en Sevilla con los papis? 

-Si bueno, pero Ansu me llamó y estuve contigo des de toda la semana, Pedri salió hoy del hospital y quería venir a verte

-Pero... es un poco tarde no? Digo son cuasi las 12 de la noche, como regresara a casa? 

-Ferran nos lo ha dejado al cargo, mañana pasaran a por él, tenia ganas de verte Pablo...

-Ah... bueno pues nada Pedri, sientete como en tu casa, me voy a dar una ducha y bajo que tengo hambre- y se fue

-Aurora..... 

-No, se cual es tu pregunta y mi respuesta es no

-Pero....

-Ha sido así des de siempre, cuando tiene el celo normal, es como un Alfa normal y se acuerda de las cosas como siempre, pero cuando pasa el celo con ataques que esta vez ha tenido muchos en pocos días, no, es como si su cerebro no se acordase de nada, son como decir-lo como dos personas distintas, pero eso no significa que no vaya recordando cosas, ira recordando pequeños detalles o cosas pero las que tu quieras que recuerde le va a costar mucho, te lo digo por experiencia, es solo saber-lo llevar con el paso del tiempo, y saber-lo hablar con él cuando tu pienses que es el momento

-Pero no sabré cuando le podré decir que..

-Que que? Que has dormido con él en su cama? Que su Alfa te quiere y no sabes como decirse-lo? Lo sabrás con el tiempo, el problema es, que como te he dicho, es como si fueran dos personas distintas cuando tiene el celo y cuando tiene los episodios, como ponerte-lo de ejemplo, su Alfa es Gavi, si has estado con el Alfa directo eso era la barrera mas alta a poder superar, ahora te toca estar con Pablo Martin