Buenos días

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Una fría brisa de viento hizo finalmente despertar a Stan, el sol estaba a menos de media hora de salir y los dos chicos seguían tirados en el bosque.

Poco recordaba Stan de la noche, no recordaba como habían llegado ahí ni como era que Kyle se había dormido en mitad de la noche, solo recordaba que algo entre los dos había cambiado, que ya no eran exactamente amigos.

Dió un bostezo antes de darse cuenta de la gravedad de la situación, estaban en mitad de el bosque, Kyle estaba dormido y quedaba poco para el amanecer, nada nada bueno podía salir de esa situación si no hacía algo rápido.

Por mucho que Stan lo intentase, Kyle no se despertaba, se bebió toda la botella, Stan iba poco a poco recordando. La noche anterior habían ido al bosque y habían bebido mucho, eso explicaba el dolor de cabeza y el mareo pero no lo demás.

Miró la hora, menos de veinte minutos para el amanecer, tenía que darse prisa, agarró a Kyle en brazos, se tambaleó un poco pero tenía que aguantar.

El mareo no le dejaba ubicarse y todo el dolor en su cuerpo no era de gran ayuda. Vagaba por el bosque hacia donde él creía que se encontraba la salida hacia la granja. Los minutos pasaban sin resultado alguno, le dolían los brazos y la desesperación se apoderaba cada vez más de él.

Diez minutos, nueve, Kyle seguía sin despertar y Stan corría entre los árboles con las fuerzas que le quedaban. Una luz entre los árboles pareció calmar la situación, la policía, Stan maldecía, pero al menos había encontrado la salida del bosque, a toda prisa corrió en dirección a la granja.

El sol les pisaba los talones pero de alguna forma Stan era más rápido, no sabía si era por la adrenalina de tener que evitar que su ¿amigo? muriere o por el hecho de que la policía había encendido las sirenas y había comenzado a perseguirles.

Fuese lo que fuese no evitó que Stan llegase a la puerta de la casa, si bien el sol los había alcanzado en el último tramo Stan se las había arreglado para que Kyle sufriera las mínimas heridas.

Nada más llegar a la casa y dejar a Kyle sobre el sofá tocaron a la puerta, Stan sabía bien que era la policía, le sorprendía que no les hubieran pillado antes pero se alegraba. Aunque su cuerpo le suplicaba tumbarse y descansar debía responder a la puerta si no quería más problemas de los que la huida les podría haber causado.

Stan abrió la puerta y el policía al verlo de cerca solo pudo quedarse callado con una expresión de sorpresa e incómodidad.

- Buenos días agente, ¿Qué le trae por aquí? - Stan sonaba obviamente nervioso y sus intentos de crear falsa seguridad con su pose de brazos cruzados no hacía más que mostrar su fragilidad en el momento.

- Identificación porfavor - Stan se excusó un segundo para ir a por ella mientras el policía no le quitaba los ojos de encima - Marsh... ¿Sabía usted señor Stan Marsh que es un delito huir de la policía?

- Lo-Lo sé señor agente y lo siento mucho, verá mi amigo... - Stan hizo una pausa en busca de alguna excusa mínimamente creíble - A mi amigo le ha dado un bajón muy fuerte de azúcar y teníamos que volver rápidamente a casa porque se encontraba muy mal, si no hubiese sido así le aseguro que hubiera parado al verlos.

El policía miro de arriba a abajo a Stan otra vez, quedándose fijo en especial en su cuello. Stan lo notó y se tapó con la mano y apartó la mirada.

- Mira chaval, te la voy a dejar pasar porque sois jóvenes y se muy bien lo que tú y tu novio estabais haciendo, pero por favor - El hombre señaló hacía el bosque - No volváis a ir allí para nada, ese bosque es un lugar muy peligroso últimamente, por ahora solo han sido animales pero quién sabe que puede ocurrir. Pasad los dos un lindo día - El policía se despidió y cerró la puerta.
¿Lo que hacían él y su novio? Se preguntó al momento Stan, es decir, si que es verdad que Kyle le había hecho un gran moratón la última vez pero ya debía estar desapareciendo. Con esa duda se dirigió al espejo del baño. No podía creer lo que veían sus ojos en ese espejo, no solo era uno en el cuello, estaba lleno de chupetones y marcas de mordidas, alguna marca de besos se distinguían gracias a lo que Stan estaba seguro que era su propia sangre. La noche seguía borrosa pero Stan entendió bien que había ocurrido, porfin había expresado lo que sentía, había aclarado de una vez sus ideas y dado fin a lo que le llevaba rondando la cabeza un buen tiempo.

Con gran decisión regresó al sofá en el que descansaba Kyle, no iba a despertarlo, no lo haría, parecía muy cansado, pudo notar algún chupetón que antes no había advertido en el cuello de Kyle, mucho menos notorios a decir verdad, pero estaban ahí. Stan le dió un beso en la frente a quién hasta que no hablarán las cosas sobrios solo podría considerar alguna forma de amante, todavía no podía considerarlo un novio.

Stan se dirigía a su cuarto cuando el móvil de Kyle sonó, lo agarró rápidamente, era Sheila, la madre de Kyle. Respondió a la llamada.

- ¡Kyle cariño! Porfin respondes a mis llamadas - Sonaba con un tono de enfado y alegría, un poco amenazante - Me tenías muy preocupada, sobretodo con lo que está ocurriendo cerca de la granja de tu amigo últimamente.

- Señors Broflovski, soy Stan, Kyle está ahora mismo en la ducha - Mintió - No se preocupe está bien, Kyle debía tener el móvil silenciado estos días, no ha sonado una llamada hasta ahora señora.

- Oh Stan - La voz de Sheila pareció calmarse un poco - ¿No habréis estado saliendo por la noche,no? Con lo que está ocurriendo por ahí últimamente lo último que quiero es que mi pequeño vaya a las zarpas de un posible asesino.

- ¿Qué? - Stan estaba terriblemente confundido, el policía también había mencionado algo sobre el peligro del bosque, y ahora la madre de su...ya no sabía el qué, hablaba de un asesino, qué estaba pasando.

- ¿Acaso no leéis las noticias? Vaya generación - La señora Broflovski dió un suspiro - Alguien anda por ahí matando animalitos y dicen que los deja secos, ahora son animales pero quién sabe cuándo irá a por una presa más grande, oh quizá es un culto que hace sacrificios oh Dios seguro que están buscando víctimas.

- No sé preocupe, le aseguro que su hijo está aquí a salvo, no salimos por la noche - Stan hizo click, ese "asesino" era Kyle - Además le diré que la llame luego, no se preocupe.

- Asegurate de que llame, y manteneros seguros.

Espera hasta la media noche | Style (Stan x Kyle)Where stories live. Discover now