Limerencia

Interludio I

Aclaraciones: estas son anotaciones sin mucho sentido de lo que vivio HongHong-er durante esos cuatro años creciendo con Xie Lian, la ultima tiene mucho sentido y sera fundamental para la trama. Disfruten :)

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Al igual como se mueve la marea del rio, así comenzó a transcurrir el tiempo y antes que todos se dieran cuenta, cuatro años pasaron.

Muchas cosas ocurrieron en ese tiempo, pero para la felicidad de Hua Cheng, todas estas pequeñas cosas que ocurrían en su rutina del día a día, eran llenas de alegría y felicidad. Mas nunca el dolor o el hambre volvió a tocar a Hua Cheng y creció, de esta forma, como un joven virtuoso y amado, de naturaleza zorruna, muy astuto y oportunista, de temperamento bastante malo, pero siempre dócil ante Xie Lian.

Insoportablemente inteligente y de caligrafía deficiente.

Resumidamente estos fueron los hechos más importantes que ocurrieron durante estos cuatro años:

Un corto viaje a ChengYu.

Un día el maestro principal se cayó por las escaleras luego de haber estado fingiendo beber té toda una tarde cuando lo que realmente estaba bebiendo era vino de arroz.

Se rompió dos huesos y tuvieron dos semanas libres de clases.

Durante ese tiempo libre, Xie Lian organizo un viaje para todos al Reino de ChengYu pero Mu Qing y Feng Xin lo rechazaron para sorpresa de todos. Ambos alegando que preferían quedarse solos en el palacio a descansar.

—¿Descansar? —Pregunto Xie Lian esa mañana con una ceja alzada.

—Descansar—aseguro Mu Qing.

—Descansar—aseguro Feng Xin.

Últimamente Hua Cheng había visto un raro comportamiento por parte de esos dos, pero la verdad, es que ellos siempre se comportaron muy raro. Así que prácticamente había naturalizado esta forma de ser tan... sospechosa. De todas formas, Hua Cheng tenía apenas doce años y aun no entendía muchas cosas.

Pero Xie Lian había descubierto todo hacía mucho.

No es como si alguna vez se lo hubiesen dicho. El Príncipe Heredero podría ser tomado como inocente pero no por idiota. Mu Qing no podía decir la excusa de 'las marcas de mi cuello son culpa de los mosquitos' durante todos los meses del año.

La verdad, hasta el mismo Goushi, los cocineros e incluso el jardinero, y hasta el mismo Rey, sospechaban de lo mismo, pero nunca nadie se atrevió a decir tal gran ofensa en público.

—Bien, entonces me iré solo con Hua Cheng.

Hua Cheng casi salto de felicidad y emocionado tomo la mano de Xie Lian—Vamos Gege, preparemos todo. Mejor así. Feng Xin ronca y huele a abono y Mu Qing siempre se queja por todo.

Esta fue una hermosa experiencia para Hua Cheng, ya que, en realidad, fueron las primeras vacaciones de su vida.

El amo todo, desde la parte de hacer maletas juntos. Decidiendo que era importante para llevar y que no, hasta la noche en la que ninguno de los dos pudo dormir porque estaban demasiado emocionados como para conciliar el sueño.

Xie Lian y él fueron cabalgando. Su Alteza le indico que era demasiado vergonzoso que un hombre fuera en carroza a cualquier sitio, además le indico que era hora de que él aprendiera equitación. Así que Xie Lian busco un hermoso caballo negro para él y para Hua Cheng un pequeño pony de color café.

Así que, durante dos días y medio cabalgaron por grandes campos y bosques sutilmente enmarañados. Una noche durmieron a la intemperie, mirando las estrellas, calentándose alrededor de una gran fogata.