La Hija Mayor De Oyakata-Sama (Kimetsu No Yaiba) [Tokito X Ayame] LIBRO 1

Capítulo 49: No Quiero Perderte

La demonio miro a la cazadora, y sin apartar la mirada de esta, hizo que una llamarada quemara la cortina que había mirado con anterioridad, revelando que al otro lado de ella se encontraba el Hashira de la niebla dentro de una esfera color morado, con unos cuantos toques rojos (El veneno de Kasumi se mezcló con la sangre de las heridas de Tokito) El Hashira parecía estar inconsciente. Pero lo que realmente preocupo a Ayame, es que él chico estaba pálido casi como un fantasma, señal de que había perdido suficiente sangre como para perder el color de su piel, una señal clara de que le quedaba poco tiempo de vida

—¡TOKITO-KUN! —grito la cazadora aterrada al ver el estado del chico

La cazadora trato de correr hacia donde estaba el Hashira, para tratar de auxiliarlo. Sin embargo, fue detenida por una fuerte llamarada que le dio de lleno en el cuerpo, y además, la hizo chocar con una pared cercana de manera brusca

—No dejare que te acerques a el —anuncio, mientras se ubicaba frente a la esfera donde estaba el joven de puntas color menta—. No hasta que logres tocarme, ¿lo recuerdas?

«Vamos Ayame, sé que ese no es todo tu poder» pensó la demonio, mientras veía como su hermana trataba de levantarse luego de impacto

Ayame trato de levantarse del suelo con dificultad luego del impacto, pero le era imposible. La llamarada le había provocado quemaduras de segundo grado en gran parte de su cuerpo, en especial en su lado izquierdo y algunas de tercer grado en su lado derecho, indicativo de que recibió la llamarada con ese lado de su cuerpo

—M...Maldita... —gruño entre dientes, al mismo tiempo que tenía una expresión de rabia en él rostro

«Me gusta esa mirada» rio al ver la expresión de pura rabia y odio en los ojos de su hermana «Jugare un poco más con tu estabilidad mental, hermanita»

—Si no me vences dentro de cinco minutos, el chico morirá —comunicó Eliane, haciendo que su hermana se aterrara

—¿Q...Que quieres decir? —pregunto en un quejido, ya que apenas podía soportar el dolor de sus quemaduras

—La esfera en donde este se encuentra está hecha de veneno, y por cada minuto que pasa el chico aspira más y más veneno —explico mirando a su hermana con una sonrisa de burla

Las palabras de la demonio hicieron que el pulso de Ayame se acelerara por el miedo y la ansiedad que estaba comenzando a sentir

—Tu debilidad lo está matando, Ayame —continúo hablando sin dejar de mirar a la cazadora, a la vez que comenzaba a caminar hacia ella

—¿M...Mi debilidad...? —fue lo único que dijo, ya que el nudo que tenía en la garganta se hacía más grande cada vez que trataba de hablar

—Si. Eres tan débil, que ni siquiera eres capaz de proteger a quien amas —continúo hablando mientras se acercaba a su hermana, disfrutando de la ansiedad que estaba causando en ella

«¿Cuánto más podrás aguantar, Ayame. Muéstrame tu cara de desesperación»

—S...Soy débil... —susurro dejándose caer de rodillas al piso, mientras comenzaba a derramar lágrimas sin parar

—Deberías morir junto con el —le susurro Eliane en el oído

—T...Tokito-Kun... —susurro levantando la mirada hacia donde estaba el chico en la esfera, luego de las palabras de la demonio

Cuando Ayame fijo su mirada en el chico, esta se dio cuenta del pequeño espasmo que hizo el muchacho, asustándola y haciendo que recordara las palabras que le dijo al chico la última vez que lo vio (capítulo 43)