Favor con favor

22 4 6
                                    

Lohan cada vez se mostraba con un mejor humor, pasar tiempo con Kai lo hizo más feliz de alguna forma, ya que tenían gustos algo parecidos y disfrutan divertirse a su manera.

— Ni de broma, apostamos si quieres —dijo Ryoma.

— Yo apuesto a que sí —Naohito estaba seguro de apostar, ya que era más cercano a Lohan.

Yinzou sonrió— como algo extra, invitaré a Tomoe, no creo que me niegue, soy muy encantador como para decirme que no —.

Lohan rió— jajaja ¿Quién te dijo eso? ¿Tu mamá? —.

Los demás rieron.

Yinzou mantuvo su sonrisa— no, fue la tuya —.

— Payaso —Lohan no discutiría, sabía cómo era su amigo.

Los demás entraron a la apuesta.

La reunión sería en casa de Yinzou, porque según dijo, su familia no estaría, solo sus cuidadores.

En algo que todos coincidían fue en invitar a Tomoe Yuriko.

Lohan aceptó ya qué tal vez podría entablar amistad con la hija de la ministra de estado, lo que en un futuro podría ser beneficioso.
Por otra parte, el castaño no sabía las intensiones de sus amigos, pero tampoco le importaba.

Varios estudiantes fueron invitados a la reunión, aunque asistieron más chicas que chicos.

— Ya saben, quien logré algo más con Tomoe, gana la apuesta —Yinzou les recordó a los demás.

— Lo siento, hermano —interrumpió Lohan— no presté atención a tu apuesta, no tengo interés en lograr algo más personal, así que perdí —fue sincero.

— Oh vamos, Lohan, nadie dice que le vayas a robar un beso, ninguno de nosotros es amigo de Tomoe, solo queremos saber quien llega más lejos, a lo mejor ninguno llega a ser su amigo —explicó.

Lohan dudaba, pero aceptó continuar en la apuesta si era como Yinzou dijo.

Una vez que los demás compañeros llegaron, pusieron música, pasaron bocaditos e incluso algunos fueron a la alberca de la casa.

El primero en acercarse a Tomoe fue Ryoma.

— Hola —se sentó cerca suyo.

— ...Hola —.

— Soy Yumeoji Ryoma, es un gusto —sonrió.

La joven rió levemente— jejeje creo que nuestras familias se conocen un poco —.

Aquello avergonzó un poco a Ryoma, ya que no solía poner atención a lo que le decían en casa— supongo que sí, no soy muy atento —se ruborizó.

— ¿Tsuruhime es tu amigo, verdad? —.

— Sí, creo que te invitó ¿O no? —.

— Me sonrió, creo que intentó coquetearme y me dio una invitación, por respeto es que no le dije nada y acepté —.

Ryoma sonrió ante la idea de poder molestar a Yinzou con eso— él es así, es divertido aunque no lo creas —.

— Supongo que sí —.

Cada quien aprovechó un momento para hablarle, pero Lohan no tenía interés alguno.

Prefirió salir al jardín, donde casi nadie iba.
Se ocultó detrás de una pileta para poder descansar sin todo ese ruido.

Mientras dormía, todo el sonido se desvaneció.

*
Abrió los ojos encontrándose a las orillas de un lago, era un paisaje hermoso digno de un edén.

La suerte del destinoWhere stories live. Discover now