Capítulo 9

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Era emocionante sentir la amargura y el placer corriendo al mismo tiempo, pero cuando el placer se mezclaba con la sensación refrescante, también sentía una extraña sensación de inmoralidad.

Sus dedos, que habían entrado en su abertura, se movieron lentamente como si se familiarizaran con la forma de su pared interior, frotando las áreas sensibles para ver su reacción.

Fue sólo un dedo. Parecía que en su cabeza algo iba a pasar. Además, ver a un hombre apuesto que posee buena apariencia e incluso puede usar magia, acostado frente a ella y ávido de sus pétalos, le dio una sensación de elevación.

"Ah, uhhk, ¡me estoy acabando!"

Jaeha lloró y gritó.

Lágrimas de placer colgaban de las comisuras de sus ojos.

Como si la dejara correrse, Hisran le dio unas palmaditas en el trasero a Jaeha mientras sus hombros y piernas temblaban. Brotó un líquido ligeramente turbio, parecido al sexo de un hombre. Después de que Hisran lamió y bebió todo el líquido, le quitó la cara de la vagina y dio un paso atrás de Jaeha.

Gracias a su magia curativa, el dolor en sus labios inferiores y los dolores musculares en la parte inferior del cuerpo desaparecieron. Jaeha, incapaz de escapar de su clímax, se quedó quieta, jadeando por recuperar el aliento.

Mientras tanto, Hisran, quien se secó bruscamente la cara con la toalla que había sido convocada por arte de magia, se acercó a ella y le preguntó.

“¿Te gustó el tratamiento? La magia de llamas es mi especialidad, pero también soy buena con la magia curativa. Curar a personas con quemaduras”.

En este caso, ¿estaba usando el término para dar a la gente enfermedades y medicinas?

Ella lo miró con ojos de perro. Luego, su mirada tocó su espalda ligeramente hinchada. Hace un rato, mientras acariciaba sus pétalos, él también parecía excitado y su virilidad estaba erecta.

'Pero él realmente no estaba pensando que íbamos a tener una relación, ¿verdad?'

Este hombre astuto era un bastardo desafortunado, pero parecía ser del tipo que intenta mantener lo que dice hasta cierto punto.

'Mmm…'

En su mente, Jaeha mejoró a Hisran en un nivel de 'un hombre astuto y desafortunado' a 'un hombre que tuvo mala suerte pero tiene un poco de ingenio'. Luego preguntó, ignorando su parte inferior hinchada, fingiendo no verla.

“Está bien, quiero lavarme. Disculpe, ¿puedo usar el baño?

"Por supuesto. Aférrate."

Momentos después, algo se tambaleó frente a ellos.

Los ojos de Jaeha se abrieron como platos. Esto se debía a que el muñeco conejo rosa de tres cabezas caminaba como un ser vivo.

[“¿Me llamaste, Maestro?” ]

"¿Qué es eso?"

Oh Dios mío. Fue increíble ver un muñeco gigante caminando, ¡y hasta hablaba! La voz de la muñeca era muy animada.

“Es una muñeca mágica hecha con mi poder mágico, optimizada para ayudar con las tareas del hogar. Son convenientes en muchos sentidos, pero la mayoría de los magos no tienen suficiente poder mágico para usarlos por mucho tiempo. No me importa”.

Escuchó el orgullo de Hisran con un oído y lo derramó con el otro, y mantuvo sólo los contenidos necesarios en su mente. De todos modos, como muñeca para ayudar con las tareas del hogar, no parecía una existencia peligrosa.

Un trato con el mago frágilWhere stories live. Discover now