Capítulo 26.

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Perfect - Ed Sheeran
«And she looks perfect

I don't deserve this
You look perfect tonight»

Parte 2.


Capítulo 26.
Baile de gala.

Al inicio el recorrido es divertido, ya que podemos ir asomándonos por una ventana que nos deja la vista entera de lo que pasa a nuestro alrededor.

Pero, al cabo de un rato, empiezo a estornudar por la alergia que me causa la tierra y me meto adentro de la limusina.

Ahí hay un par de barras de chocolate, bebidas y bolsas de frituras que Melanie no ha dudado en agarrar y empezar a devorarse. Su madre la observa con una gran sonrisa y me es inevitable no sentirme culpable por no decirle nada sobre lo que pasó antes de que tomaramos ese viaje a mi ciudad. Ahora se ve tan feliz con su jefe que me da miedo estropear el momento.

Pero también sé lo mal que estaría si no le decimos nada acerca de que el padre de Melanie y Jaden volvió.

Suelto un suspiro cansado y Jaden a lado mío me sonríe disimuladamente entrelazando nuestras manos sin que mi madre pueda vernos.

Minutos después llegamos a las afueras del establecimiento del salón de baile. El lugar es tan grande que me tomo unos segundos para observarlo en lo que la limusina llega a la entrada.

Incluso el estacionamiento está decorado con flores blancas bastante elegantes y luces led que alumbran el lugar.

La limusina se detiene frente a una puerta de cristal alta y amplia que también está muy bien decorada. Dos guardias de seguridad están fuera de esta cubriendo cada lado.

Veo como Melanie abre los ojos con impresión que incluso deja la barra de chocolate incompleta para asomarse. Parece eternamente encantada. Sonrío ante su reacción y Jaden se acerca a mi oído disimuladamente cuando mi madre parece distraída observando el lugar.

—Quizá así pueda ser el lugar en el que nos casemos —susurra haciendo que su aliento choque en mi oreja. Sonrío negando con la cabeza y verifico que nadie nos haya visto.

Volteo a verlo y me acerco hasta que nuestras narices prácticamente se rozan. No he borrado mi sonrisa, al contrario, la amplio y él de inmediato mira mis labios.

Me relamo los labios y llevo mi boca a su oreja para decirle algo por igual.

—O quizá así pueda ser el lugar en donde me entierren cuando me canse de que tantas rubias se te acerquen.

Él se ríe abiertamente contagiandome un poco la risa y nos detenemos cuando el conductor le da unas tarjetas a la madre de Jaden. Ella se queda unos momentos algo perpleja, después baja de la limusina haciéndonos un gesto a todos para que hagamos lo mismo.

Seguida de ella sale Melanie, después mi madre, y por último yo, ya que Jaden ha decidido ser un caballero y dejarme el paso.

Las luces alumbran todo el lugar y en cuanto los guardias nos voltean a ver de inmediato abren las puertas para nosotros. Les sonrío a cada uno de ellos y en cuanto entramos al salón no podemos dejar de mirar a nuestro alrededor con impresión.

Sin duda, la mejor fiesta y única que creo que puede llegar a gustarme.

Hay una pista de cristal que adorna prácticamente todo el salón. A los costados hay mesas decoradas con manteles blancos y moños del mismo color. Al fondo de la pista dos pedazos de tela cuelgan sobre el techo haciendo más elegante la entrada.

El día que la luna dejó de brillar. Where stories live. Discover now