"T'estimo?"-Mar Serracanta y tú- Sin G!p

Vés-te'n a la merda

ANTES DE LEER

Si apoyan mucho este capítulo, así como el anterior, les publicaré otro el viernes 👀

Disfruten de la lectura 💕

Narras tú

–Joder ¿pero a qué hora has llegado?– levanté la vista mirando a Espe, ya que era el día del primer partido y yo estaba entrenando un poco a pesar de que faltaba bastante para que este comenzara.

–Hace...¿quince minutos? No sé qué hora es– sonrió.

–_____, que eres muy buena, no necesitas demostrarle nada a la gente que está hablando sobre ti, no te conocen– me detuve para tomar un descanso.

–Quiero que me conozcan, y no por quiénes forman parte de mi familia– suspiré –Y hoy va a ser un partido difícil, tienen a Mar, Núria y Júlia...me enfrenté con ellas el día del draft y son...algo buenas– asintió y me miró durante unos segundos, como si quisiera decirme algo –¿Qué pasa?– suspiró.

–Juan me comentó que Rivers le dijo que te peleaste con una de ellas en el entrenamiento– no dije nada –Entiendo el calentón del momento, pero no puedes perder el control así, menos ahora que va a verlo todo el mundo– suspiré.

–Lo sé– tomé un poco de agua, dejando de mirarla.

–Espero que todo ese follón quede fuera del partido ¿Está bien?– asentí mirándola de reojo –Lo vas a hacer muy bien hoy...¿Calentamos un poco?– sonreí.

–¿Calentarnos?– me dio un golpe y reí mientras asentía.

Estuvimos cerca de veinte minutos y después ella se fue, así que seguí un poco más a muy baja intensidad para no agotarme y fui a las duchas para sentirme fresca durante el partido.

Me puse el vestuario de inmediato y al salir, venían las jugadoras de pio entrando. Las miré sin decir nada y me quedé con la vista fijada en Mar.

–¿Ya vas a empezar? ¿Qué coño te pasa con Mar?– levanté mis cejas mirando en otra dirección.

–¿Qué coño te pasa a ti?– dije riendo por su forma tan repentina de hablarme.

–Déjala tranquila– sonreí.

–Claro, cariño ¿Quieres que mi atención sea toda para ti?– pregunté mirando a Núria a los ojos.

–Joder– dijo riéndose –No me sorprende para nada que hayas entrado por los contactos que tienes, así es muy fácil– fruncí mi ceño al escuchar algunas risas de sus compañeras y unos segundos después Mar llegó a mi lado, al parecer sin enterarse de la situación.

–Hey, ¿Cómo sigue tu nariz?– la miré y sin decirle nada me metí nuevamente al vestuario.

Mis compañeras comenzaron a llegar y Espe se acercó a mí al verme algo extraña.

–¿Qué ocurre? ¿Ha pasado algo?– negué.

–No– suspiró.

–Tranquila, que lo vamos a ganar– dijo acariciando mi hombro y fue a hablar con mis compañeras.

Me levanté para ir al baño y después fui con ellas para las últimas indicaciones de la entrenadora.

Cuando salimos a la cancha, ellas tuvieron que pasar frente a nosotras para el saludo, pero mantuve mis manos tras mi espalda así que solo pasaron de largo en mi turno.

Mar se detuvo un segundo frente a mí algo extrañada y cuando le fui a dar la mano, siguió de largo también.

Suspiré intentando mantener la calma y las árbitras me miraron extrañadas, tal vez sabiendo que esto sería un problema durante el partido.