Espadas de Dioses y Reyes (versión alternada)

"Yo lo prometo..."

El pueblo de Valquia estaba de fiesta, hoy era la coronación de su nuevo Rey, el castillo estaba siendo decorado, se estaba preparando un gran festín para los asistentes en el banquete y habría un gran baile.

Vlad estaba en su habitación preparándose tocaron la puerta, él respondió con un "Pase" y vio dos cabezas asomándose, eran Aslan y Althea.

- ¿Qué hacen aquí?-preguntó sonriendo.

- Queríamos ver como estabas-dijo Althea-no es por nada, pero no deberías estar nervioso si es que lo estás.

-Ella tiene razón amigo, te has preparado toda tu vida para esto-dijo Aslan.

-Si les soy sincero, no me siento preparado, para nada, ¿cómo sabré que estoy listo?

- Solo los mejores líderes se lo cuestionan, Vlad-Althea se acercó a él y tomó sus manos-estás listo, siempre lo has estado.

-Gracias Al-le sonrió mirándola a los ojos.

-Bien debemos irnos, cuesta mucho tiempo lucir tan bien-dijo Aslan-en especial al Al.

Los chicos rieron mientras ella rodaba los ojos.

- Al se ve hermosa con lo que sea-dijo Vlad y la chica sintió como se sonrojaba.

-Ya debemos irnos-la chica le sonrió-te vemos pronto.

-Sí...-vio a sus amigos salir por la puerta pero antes los detuvo-me gustaría que estuvieran en primera fila y también Alexandra, junto a Radu.

- Pero Vlad la primera fila es para...

-Sí lo es-interrumpió a su amigo pelirrojo, los tres se sonrieron.

- Gracias-dijo Althea y arrastró a Aslan fuera de la habitación, mientras su amigo se quejaba y Vlad reía mientras escuchaba a sus amigos discutir en el pasillo.

- Te veo luego, Aslan-se despidió Althea de su amigo con un abrazo para luego ir a su habitación, pero la detuvo un sirviente en el camino.

- Majestad, para usted-le dio una carta.

-Muchas gracias-le sonrió  y una vez en su habitación abrió la carta.

"Althea,

Probablemente te sorprenda esta carta y es normal, pero hay algo que debo decirte, desde nuestro último encuentro no he dejado de pensar en ti, estáis en mis pensamientos en cada momento del día.

Sé que no es lo que habíamos hablando, pero no lo puedo evitar, sé que está mal, pero mi corazón va contra mi cabeza y no lo puedo evitar. Sé que quizás no vas a corresponder a mis sentimientos y que son muy inesperados para ti, pero tenía que decírtelo, creo que no podría vivir conmigo mismo si me lo guardara.

También quiero que sepas, que he vuelto a Inglaterra, al menos por un tiempo, mi padre ha muerto y me van a coronar como nuevo rey, ojalá...puedas venir, me gustaría mucho.
Sé que tú en este momento estás en el Reino de Valaquia, supe que van a coronar al príncipe Vlad, espero que sea un gobernante bueno y justo como dices, pero sobre todo que te merezca.

No tengo nada más que decir, salvo que espero volver a verte algún día.

Se feliz.

Con cariño

Carlos
Príncipe de Inglaterra"

La chica sonrió, era una carta inesperada, pero bien recibida, le había tomado gran cariño al príncipe durante sus días en Castilla y debía admitir que se habían vuelto muy cercanos, le quería, pero no podía verlo como algo más.
Al menos aún no.