Capítulo 27

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Maratón 4/4

Ahora que lo pienso… jamás consideré la posibilidad de que mi vida fuera a terminar de aquella manera tan cruel

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Ahora que lo pienso… jamás consideré la posibilidad de que mi vida fuera a terminar de aquella manera tan cruel. Pude imaginar muchas formas, algunas muy dolorosas y otras algo estúpidas, pero creo que esa, nunca entró en la lista. Tampoco pensé que todo podría pasar en apenas un par de segundos y mucho menos, imaginé que el responsable sería alguien tan cercano a mí, alguien a quien llegué a considerar “mi hermano” —vaya que me equivoqué al hacerlo—. Supongo que eso demuestra que nunca llegamos a conocer del todo a las personas que nos rodean, por lo que sólo nos queda estar preparados para lo que pueda pasar…

 Supongo que eso demuestra que nunca llegamos a conocer del todo a las personas que nos rodean, por lo que sólo nos queda estar preparados para lo que pueda pasar…

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El potente sonido del disparo, me obliga a saltar debido al susto. Y mi corazón da un vuelco dentro mi pecho al escucharlo, sin embargo, lo que más me impresiona es que, aún después de eso, éste continúa latiendo y a un ritmo desbocado, como si en verdad no hubiera un mañana y quisiera hacer todo lo posible por sobrevivir un poco más.

Espero… a que algo en mi cuerpo me confirme lo que tanto temo, pero nada pasa. Ningún dolor… molestia… o la sensación de desangrarme… nada, no siento nada, por lo que decido abrir los ojos y enfrentar el destino al que, quizás, le he estado huyendo desde el principio.

La imagen de Jess forcejeando con Connor, es la primera que aparece en mi campo de visión. Observo como los dos se aferran al arma con desesperación, cada uno intentando quitársela al otro, poniendo todas sus fuerzas en ello, pero sin que ninguno obtenga el resultado deseado, ya que ambos se niegan a soltarla y rendirse.

Un segundo disparo es el que me hace reaccionar, sólo para ver a Connor acertarle un fuerte puñetazo en el rostro a Jess, mandándola al piso de un solo golpe. En ese momento, algo parece encenderse en mi interior. Es como si mi cuerpo entero hubiera sido invadido por una energía nueva y desconocida para mí, la cual parece estar guiada por la rabia y el odio que me produjo escucharla gritar, quizás de dolor. Y así, sin más, toda la adrenalina regresa a mí en menos de un segundo.

Sin dudar, me lanzo hacia Connor con todas mis fuerzas, con la esperanza de desestabilizarlo, mientras intento quitarle el arma con mis propias manos. Al diablo todo lo demás. Si tengo que morir, no me iré sin luchar; elijo irme de éste mundo luchando por salvar la vida de la única persona que aún me importa.

El Asesino Arcoíris © || COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora