CONFLICTO DE INTERESES

Capitulo 90 A Una Sola Mujer

Rei y Zafiro habían acordado encontrarse en la ciudad antes de ir a la cena a la qué habían invitado a sus padres por la noche, iban a anunciar juntos su próximo matrimonio, cómo algunas vez estuvieron comprometidos, sabían qué sus padre no tendrían ningún problema con eso, en todo casa serían felices por qué querían qué ambas familias estuvieran conectadas entre sí a través del matrimonio, Zafiro vestía una camiseta de golf de color verde salida y pantalones negros, llevaba gafas de sol mientras estaba junto a su jeep, esperando qué Rei llegará al estacionamiento del centro comercial.

Rei usó un taxi por qué pasarían el día juntos, por lo qué no había necesidad de usar un automóvil separado, cuándo vió a Zafiro a lo lejos su corazón se aceleró de firma errática, se veía tan sexy y atractivo, su corte de pelo, su cuerpo musculoso... Rei babeaba sobre Zafiro mientras el taxi se acercaba a Zafiro, cuándo llegó allí Zafiro se acercó a ellos, y antes de qué Rei supiera lo qué estaba pasando, pagó el billete del taxi por Rei, luego abrió la puerta trasera y le tendió la mano, Rei función el ceño y lo miró.

-Puedo pagar mí propio taxi - dijo Rei y Zafiro sonrió.

-Lo sé, pero ¿Qué clase de hombre sería sí te dejo pagar por ello? No me importa sí eres más rica qué yo, yo cuidaré de mí mujer - dijo Zafiro y el corazón de Rei dió un vuelco y su rostro se sonrojó, se abanicó en secreto.

-¿Por qué querías verme antes de la cena? - preguntó Rei.

-Hay algo qué necesito decirte, no se cómo lo tomarás... Intenté posponerlo hasta unos años más tarde, pero no es posible - dijo Zafiro mientras la conducía al centro comercial.

Su voz era suave pero decía esas palabras con cara seria, Rei no pudo evitar pensar lo peor, de repente un mal presentimiento se instaló en el corazón de Rei, "¿Has cambiado de opinión? ¿Quiere simplemente hacerse cargo y no casarse?", su mente estaba llena de pensamientos, Rei tragó con ansiedad y siguió su ejemplo, cuándo entraron en una tienda de bebés Rei miró a Zafiro.

-Aún no es el momento para comprar ropa del bebé - dijo Rei y Zafiro se rió y arqueó una ceja.

-Para mí el momento adecuado fué el momento en qué escuché qué iba a ser padre, quiero darle un regalo a mí pequeño y quiero ser el primero - dijo Zafiro.

El corazón de Rei dió un vuelco, siguió a Zafiro y observó cómo Zafiro se tomaba su tiempo revisando la ropa, tenía una sonrisa en su rostro mientras escogía la ropa de su hijo, era impresionante, finalmente eligió un mono qué tenía las palabras 'Papá me ama! Y un par de zapatos de mezclillas, miró a Rei.

-¿Qué le parece esto a nuestro principio? - preguntó Zafiro.

En ese momento Rei se enamoró un poco más de Zafiro, sus ojos se llenaron de lágrimas y terminó para contener las lágrimas, Rei sonrió.

-Es perfecto - respondió Rei.

Unos minutos más tarde salieron de la tienda después de comprar algunas otras cosas, Zafiro estaba emocionado y consiguió un cochecito, una cuna y mantas, luego pidió a los dueños de las tiendas qué le entregarán las cosas en su ático, los llevaría a la base militar después de casarse, ya qué allí viviría con Rei.

-¿Tienes hambre? Déjame invitarte el almuerzo - ofreció Zafiro mientras caminaban en dirección a un restaurante mexicano.

Zafiro tomó su mano y la llevó adentro, al principio Rei pensó qué no podía comer debido a las náuseas, sín embargó terminó terminándose cinco tacos, Zafiro siguió mirándola todo el tiempo, incluso le dió sus tacos y Rei inmediatamente se los comió, una risa profunda salió de sus labios y Rei lo miró con el ceño fundido.

-¿Qué es gracioso? Estoy comiendo por dos - se quejó Rei y Zafiro sacudió la cabeza.

-Nada, sólo estoy feliz de qué finalmente estés comiendo algo, noté qué comiste mucho tacos, así qué me di cuenta de qué son tus comida favorita en esté momento, o tal vez nuestro bebé le encantan los tacos - respondió Zafiro y Rei se sonrojó.

-Sí, es el bebé y ahora qué lo pienso, el bebé quiere dos tacos más ¿Pide más para nosotros por favor? - dijo Rei y Zafiro llamó inmediatamente y le pidió más tacos.

-Cualquier cosa para ustedes dos - comentó Zafiro.

Los dos compartieron un abundante almuerzo cómo era fin de semana, dieron un paseo por el parque y se sentaron bajo un árbol, era un día cálido y de vez en cuándo soplaba una ligera brisa.

-¿Qué es lo qué quería decir? - preguntó a Rei a Zafiro después de unos minutos.

Sín embargó estuvo hecho un nudo todo el tiempo qué estuvieron juntos, no pudo evitar preguntar por qué ya no podía soportar el suspenso, se hizo el silencio y Zafiro miró hacía el cielo, luego lanzó la bomba.

-Me iré del país por dos años - dijo Zafiro, el estómago de Rei se retorció, se miró los dedos y jugueteó con ellos, con el corazón a punto de hundirse.

-¿Cuándo? - Rei preguntó en voz baja.

-Dentro de cuatros semanas, no puedo posponerlo y tengo el deber de servir al país, sín embargó quiero qué nos casemos antes de irme - propuso Zafiro, los ojos de Rei ardieron por más lágrimas.

-¿Un mes? ¿Y no pensaste decírmelo? - preguntó Rei con voz ronca.

¿Cómo podía sugerir casarse cuándo sabía qué pronto se marcharía? Rei pensó qué pasarían algún tiempo antes de qué Zafiro se embarcara en sus misiones.

-Por eso no quería acercarme a tí, la naturaleza de mí trabajo requiere qué dejé todo atrás, y sirva al país en cualquier momento, no quería ser ese hombre qué deja atrás a su esposa, pero tampoco puedo llevarte conmigo - dijo Zafiro con dolor en su voz.

No le gustó la forma en qué Rei sonó herida, esto era lo qué estaba tratando de evitar... Ni siquiera estaban casados todavía, pero Zafiro ya la estaba haciendo infeliz, sín embargó Zafiro no quería renunciar a Rei, ahora qué se había rendido no podía vivir sín ella, Zafiro quería hacer todo lo posible para qué la relación funcionará.

-Entonces... ¿Voy a tener al bebé sola? - Rei comentó, sintió una punzada de dolor recorriéndola.

-No, seré tu esposo, mís padres estarán ahí para tí mientras estoy fuera, y encontraré la forma de comunicarme contigo todos los días... Quería preguntarte algo - dijo Zafiro.

De repente Zafiro se arrodilló, lo qué hizo qué los ojos de Rei se abrieran cómo platos, sacó una caja blanca y la abrió, revelando un costoso anillo de diamantes, Rei jadeó y se tapó la boca con la palma de la mano.

-Zafiro ¿Estás...?

-Esté anillo ha estado en mí familia durante cien años, es un regalo de compromiso qué los hombres de mí familia dan a las mujeres qué aman, Rei quiero casarme contigo y envejecer contigo, mí vida no tendría sentido sín tí, se qué estaré fuera la mayor parte del tiempo, pero prometo apreciar cada momento qué esté contigo y te amaré cómo sí el mañana nunca llegará, los hombres de mí familia sólo aman a una mujer, ya vez Rei, sín tí no puede haber nadie más, por eso estoy de rodillas y humildemente te preguntó esto... ¿Me esperarás?...