18

205 26 1
                                    

Tn POV

Me mantuve con Finn un largo rato, en ocasiones escuchábamos a Noah en el primer piso viendo televisión y quejándose de que siempre daban lo mismo para terminar dejando un programa de caricaturas lo que me hacía reír divertida.

—Tienes muy mal el cuello —habló Finn pasando uno de sus dedos por este con delicadeza rompiendo el silencio.

—Ya puedo hablar —Me encogí de hombros y tragué saliva sintiendo un poco de ardor en la garganta, pero evité carraspear para que no se preocupara—. ¿Tú cómo estás?

—Bien, la mano no me duele —Apreté los labios porque me refería a sentimentalmente, no física.

—No hablo de eso —Aclaré la garganta para hablar y después llené de aire mis pulmones—. Me refiero a cómo vas con lo de Jaeden.

Apartó la mirada de mis ojos y pude notar la tensión que ejerció en su mandíbula.

No era bueno que se tragara sus sentimientos, que quisiera fingir que nada había pasado y como si Jaeden nunca hubiera existido cuando fueron amigos, nunca defendería lo que hizo Jaeden, ¿quién en su sano juicio lo haría? Pero si quería saber cómo lo estaba manejando Finn.

Las heridas que le habia causado no solo físicas sino emocionales, las que estaba tratando de ignorar mientras aún estaba abiertas y derramando sangre al no ser tratadas y que no iban a poder sanar hasta que el hablara de eso y pudiera sobrellevar las cosas sin necesidad de ocultarlas.

—Finn —Coloqué una mano en su mejilla para que me mirara, pero en su lugar sacudió la cabeza evitando el contacto así que bajé la mano lentamente colocándola en mi pierna y apretando la sobre mi pantalón—. Puedes hablar conmigo, no finjas que no pasó nada.

—Me va bien así —aseguró volviendo a tensionar la mandíbula sin dirigirme la mirada lo que me hizo suspirar.

—Llevas días así, no puede seguir porque te estás autodestruyendo —Traté de persuadirlo, de hacerlo sacar lo que sentía así fuera gritando, llorando o haciendo lo que quisiera hacer para poder sentirse mejor—. Habla conmigo por favor.

—No lo entenderías —aseguró y solté un largo y pesado suspiro.

—Tal vez no, pero no lo sabremos si no lo intentas —Me miró durante algunos segundos en los que aproveché para tomar sus manos entre las mías y apretandolas levemente—. Desahogate.

—¿Tú como lidiarías con que el único amigo que te quedará fuera un psicópata que te intento matar? —preguntó devolviéndome la mirada finamente.

Los ojos se le pusieron llorosos y algo irritados por las lágrimas que estaba conteniendo. Bajé la mirada a nuestras manos sin saber qué responder.

—No es fácil Tn, confiaba en él y mira lo que pasó —Su voz se cortó haciendo que un nudo del tamaño del Sol se instalara en mi garganta—. Te tengo a ti y ya porque no me llevo bien con Millie y Noah, les agradezco la preocupación por mí, pero no es lo mismo porque no entienden.

Me acerqué a él abrazándolo con fuerza. Sus brazos rodearon mi cintura colocando su cabeza en mi pecho con la respiración acelerada. Recosté la mi cabeza sobre la suya cerrando los ojos respirando profundo mientras movía una mano de arriba a abajo por su espalda.

—Me quedas tú, mis padres y mi hermano —Volvió a hablar—. Últimamente me la pasó preocupado por ti, me tengo que dormir mediante somníferos porque de otra forma no puedo pegar el ojo pensando en la posibilidad de que te arrebate de mi lado, lo único que sabía de ti era lo poco qué escuchaba que decía Noah.

MURDERS // Finn Wolfhard [✔️] Where stories live. Discover now