Capítulo 23: La estrategia del líder perdido

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Ash: ¡Miren eso!

Dawn: Es una ciudad muy bella.

Los chicos por fin han llegado a Ciudad Veilstone, con una sola ambición, ganar la medalla de gimnasio.

Brock: Oigan, algo se acerca.

Ash: Desde aquí parece una...¡AGÁCHENSE!

Los chicos escucharon la advertencia de Ash a tiempo, pues una especie de bola de energía estaba a nada de golpearlos, aunque este era más bien de un color azul.

Dawn: ¿Qué fue eso?

Brock: Allá hay más.

De una parte de la arboleda que rodea a Ciudad Veilstone, se veía claramente como varios de los mismos ataques eran lanzados al aire. Era un movimiento que Ash ya había visto antes.

Ash: ¡Son Esferas aurales!

Los chicos atraídos por la curiosidad, fueron a ver lo que estaba pasando. Llegaron hasta una pequeña casa, con una cerca de madera pintada de blanco, ahí vieron que una mujer de cabello rosado estaba evadiendo las Esferas aurales de su pokémon.

???: ¿Sigues enojado Lucario?

Dawn: ¿Un Lucario? -saca la pokédex.

Dawn: ¿Un Lucario? -saca la pokédex

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Pokédex: Lucario, el pokémon aura. Dicen que, como es capaz de detectar auras, puede percibir a sus rivales aún a un kilómetro de distancia, aunque no los vea.  

La mujer estaba esquivando las Esferas aurales con gran habilidad,  de hecho, con una gran patada le devolvió una de esas a Lucario.

Ash: Miren como repele las Esferas aurales.

Dawn: ¿Esferas aurales?

Brock: Dicen que es un poder que habita en todos los seres vivos, pero que muy pocos pueden explotar.

Observaban atentos a Lucario y a la que parecía ser su entrenadora, una chica muy delgada que estaba vestida con ropa deportiva, y descalza, como es habitual con los entrenadores de pokémon tipo lucha. Pero todo fue interrumpido, por un pequeño rayo que fue a parar a donde estaban Pikachu y Piplup, esto los enfureció, y cuando vieron que el culpable fue un Electabuzz, no dudaron en ir a regresarle el golpe.

Tanto Piplup, Pikachu y Electabuzz estaban en una batalla campal, recibiendo ataques el uno del otro, preocupándose más por hacer daño, que en poner atención a quién iba dirigido el ataque.

Dawn: ¡Piplup, déjalo ya!

Ash: ¡Alto Pikachu!

La chica de cabello rosado notó la pequeña riña que había entre los tres pokémon, así que decidió ayudarlos un poco.

???: Lucarios, sepáralos.

Lucario formó con sus dos extremidades superiores una Esfera aural, que impactó en el lugar de la pelea, y dejó a los tres pokémon revoltosos muy conmocionados.

Pokémon: Diamante de amor.Where stories live. Discover now