Cadaver 2

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No veo nada, solo un negro vacío. Intento abrir los ojos pero me pesan más de lo normal, sobre lo que estoy es suave demaciado suave y cómodo. Desorientada lo único que siento es algo húmedo y grande acariciando mi clitoris.

Esto me manda corrientazos que logran hacer que abra los ojos dando con la imagen del ser que pensé era solo un sueño. Alto, grande y desnudo. Encima mio, con sus brazos a los costados de mi cadera y su cuerpo en medio de mis piernas. Me mira sonriendo, una sonrisa de burlar y triunfo.

¿Que se cree?

Bajo más la mirada y está su venenosa polla moviéndose en círculos encima de mi botón de placer, en lo que sus bonitos ojos no se apartan de los míos dándome escalofríos. Intento moverme lejos de su contacto que empieza a volverse atocigante pero al contrario de mi intención sus brazos agarran mi cadera y me impulsa más a el logrando que esa venenosa polla quedará justo encima de mi entrada, helando todos mis músculos.

-Dejame -logro susurrar. El sonríe aún más, deja una mano en mi cadera mientras la otra sube hasta mi mejilla la cual acarician con una ternura no propia de lo que sea que es el.

-No puedo, ni quiero -responde mirándome aún fijamente.

-¿Porque? No entiendo nada -el sonríe aún más. Empuja su polla metiendo el glande en mi arrebatándome un jadeo que el parece disfrutar bastante.

Esa simple acción logro alterar mi ritmo cardíaco y erizar toda mi piel, hasta mis pezones acto que él no se pierde y los mira fijamente como si quisiera comérselos pero no lo hace si no que vuelve a subir su mirada a mis ojos.

-Te lo dije ayer, me fuiste prometida. No te quiero dejar llevas algo muy preciado para mí.

-¿Que cosa puedo llevar yo que sea preciado para ti? -el empuja más su polla, esta vez metiendo hasta la mitad su polla embarrada de mis jugos. Mi boca se forma en una "o" y volteo mis ojos a causa de esa minúscula estimulación.

Rápido los vuelvo a enfocar en el que ya no me mira, si no que mira mi abdomen. Y ahí lo entiendo, lo que él dijo en la morgue no era un juego.

-A mi hijo -responde afirmando lo que temía y no me da tiempo de procesar porque entierra su polla hasta la base, sin perder tiempo la saca y vuelve a meter.

Su mano que estaba en mi mejilla baja a mis tetas agarrando una que aprieta y lleva a su boca mientras sigue con sus embestidas ahora más rápidas y duras.

Mi mente se nubla y solo puedo pensar en esa gran polla abriendome y regalandome el mayor placer del mundo. Mis gemidos salen sin mi permiso mientras mis manos aprietan fuertemente la sábana abajo mío. Su boca en mi pechos succionando queriendo sacar algo me vuelven loca, su mano en mi cadera apretandome a el para que sus embestidas se vuelvan más duras.

-Mas... -gimo llevando mis manos a su espalda -Dame más...

Se despega de mi pecho y me mira sonriente, victorioso que allá cedido tan fácil.

-Con gusto amor -y pareciera que se libera una bestia. Sus manos toman las mías y las lleva arriba de mi cabeza sosteniéndolas con una sola mano fuertemente y con la otra baja abrir más mis piernas empezando con sus embates durísimos.

No para, no descansa solo sale casi por completo y vuelve a entrar hasta el fondo. Mi espalda se arquea de sobre excitación y ya no son gemidos los que abandonan de mi boca ahora son gritos de placer. Se lleva a su boca mi pezón y lo muerde en lo que sus huevos golpean ruidosamente contra mi culo.

Sus gruñidos parecen de bestia y yo solo puedo rodar los ojos del placer que siento, esa polla la siento casi en mi útero tocando un punto que me estaba volviendo una desquiciada. Sus mordidas a mis pechos y que me trate como una muñeca.

-Dame más... -gemia como loca y no sé cómo pero el obedecía y me daba más duro.

Sentí un dolor en mi entrada que fuera de ser incómodo fue placentero sentía como no podía más, como se movía tan inhumanamente rápido y con una fuerza.

-Me estás... Reventando -logre decir t eso no lo paro, lo invito y cambiándome de posición a cuatro patas volvió a entrar en mi y me dio más duro de lo que estaba.

-¡Ah! ¡Sigue así! -gritaba ahogadamente contra la cama mientras el me nalgueaba duro sin temor a dejar marca.

-¡Estoy cerca! ¡Más! -estaba doliendo me mi entrada pero seguia pidiendo más, no se qué me pasaba estaba poseída y eso me gustaba.

-Vente, vente con mi polla adentro de ti -susurro a mi odio con esa voz ronca y apretando mis pezones que fue el detonante para que explotara en el orgasmo más excitante que había experimentado en mi vida.

El no paro si no que siguió bombeando, alargando mi orgasmo y sobre estimulando al punto de que dolía pero me gustaba y mucho. No pasó mucho 6 embestidas más y sentí un líquido caliente en lo más profundo de mi, quemando todo a su paso.

El salio de mi y toda su leche se desbordó, caí rendida a la cama, sudada, maltratada y con una satisfacción increíble. Su leche seguía saliendo de mi parecía no tener fin y sentí su mirada ahí, no se despegaba de como salía su corrida de mi canal.

-Deja de ver ahí maldito -dije cansa intentando tener algo de dignidad.

-Es muy satisfactorio ver cómo no puedes retenerlos todos adentro. -dijo, me voltio boca arriba y se volvió a quedar mirando mi abdomen.

Volví a reaccionar y lo aparte de una golpe llendome hacia atrás lo más posible.

-No estoy embarazada y menos de ti. -dije entre dientes. El solo sonrió.

-Claro que lo estás si no, estarías muerta niña. Ahora ven que quiero reventarte el culo -y sin más se me fue encima a cumplir con lo que dijo.



(...)

Regrese tengo planeado algunas cosas, otro capítulo de Kai y su muñeca y nuevos relatos, sucios, tabus y pervertidos. Solo disfruten.

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⏰ Última actualización: Jan 20 ⏰

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