Transmigre en el ex-novio del protagonista renacido

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Debido a que solo se lastimó las piernas, la operación de Xiao Baicong terminó muy rápidamente. Tomó menos de dos horas, y durante este período, el médico salió a preguntarle la opinión de Madame Xiao sobre si Xiao Baicong debería amputarse o no. Sin embargo, no obtuvo ninguna respuesta porque se quedó con la boca abierta y se desmayó.

Song Xuanhe y Xiao Yuanmu permanecieron en la sala del hospital hasta que Yang Jie les dijo que la operación de Xiao Baicong había terminado. En ese momento, Madame Xiao también se había despertado.

Estaba aturdida mientras estaba sentada en una silla en la sala, con su ama de llaves haciendo guardia en silencio a su lado. El ambiente a su alrededor era muy solemne.

"Señora."

Al ver que Song Xuanhe y Xiao Yuanmu se acercaban, el ama de llaves gritó suavemente, recordándole a la atónita Madame Xiao que levantara la cabeza.

Cuando vio a Xiao Yuanmu, que estaba cerca con Song Xuanhe, Madame Xiao de repente se tapó la boca, se levantó y caminó hacia ellos rápidamente. Abrazó a Xiao Yuanmu y lloró amargamente.

Después de llorar durante mucho tiempo, finalmente logró decir: "Tu hermano pequeño... ¿qué hará?"

"Aún es muy joven, apenas ha llegado a la edad adulta y es el mejor momento para moverse. Ha perdido las piernas así, ¿qué puede hacer? Madame Xiao se aferró con fuerza a los brazos de Xiao Yuanmu, con los ojos rojos. Ya no tenía su elegancia e indiferencia habituales, y mostró la vulnerabilidad de una madre sin ningún ocultamiento: "Congcong es todavía tan joven, ¿por qué fueron tan crueles los secuestradores?"

Xiao Yuanmu miró a esta mujer cuyo maquillaje aún era exquisito, pero que ya no tenía compostura. Sus ojos estaban tranquilos e indiferentes, sin mostrar ondas.

"¿Por qué no estás triste?" Madame Xiao negó con la cabeza, luego frunció el ceño a Xiao Yuanmu y preguntó: "¿Tu hermano menor se ha vuelto así? ¿Por qué no estás triste?

Song Xuanhe frunció el ceño y levantó la mano para alejar a Madame Xiao, pero aunque parecía delgada y débil, de hecho, pudo sostener la mano de Xiao Yuanmu con gran fuerza. Ella lo abrazó con fuerza mientras lo interrogaba nuevamente.

"¿Por qué no estás triste?"

Xiao Yuanmu no pareció sentir el dolor de su agarre. Su tono era muy ligero: "Mantenerlo con vida ya era una tarea muy difícil".

"¿Esperas que tu hermano ni siquiera pueda seguir con vida?" Los ojos de Madame Xiao se agrandaron cuando preguntó: "De esa manera, la familia Xiao será completamente suya. ¿Es eso lo que estás pensando en tu corazón?

"¡Señora!"

El ama de llaves ya la había interrumpido antes de que Song Xuanhe pudiera hablar.

"Me disculpo por la señora, joven maestro". El ama de llaves se inclinó: "El pequeño joven maestro está ahora en malas condiciones, y el estado de ánimo de la señora no es muy estable. El señor no sabe nada de la situación aquí por el momento, por lo que la señora está bajo aún más presión. Espero que lo entiendas."

La expresión de Xiao Yuanmu se mantuvo sin cambios. Él asintió con indiferencia y dijo: "Cuida de la señora".

El ama de llaves asintió respetuosamente, con el rostro desprovisto de emoción mientras ayudaba a Madame Xiao a retroceder un paso.

Madame Xiao también volvió en sí cuando escuchó las claras pero frías palabras del ama de llaves. Miró ansiosamente a Xiao Yuanmu, abrió la boca y quiso explicar, pero no sabía por dónde empezar. Después de comenzar y detenerse un par de veces, sus hombros colapsaron pesadamente y su voz sonó como si estuviera conteniendo las lágrimas: "Yuanmu, por favor perdona a mamá, tu mamá... se siente demasiado triste".