PROUD

VERDAD

-No, no estoy alterado, estoy cansado, quería hacer esto más fácil para Sergio pero ya me tienes harto, ¿quieres saber que hice en estos meses? Saber la verdad Padre, además de que Checo no merece una porquería de pareja como lo eres tú, ya me canse de fingir, ya no necesito tus migajas de amor para seguir con este cuento.-

-Checo, solo ignóralo, ha estado teniendo un mal día, supongo que tiene jetlag y por eso está así, no has dormido bien ¿verdad hijo?- Aquel tono, ese tono que Max había comenzado a odiar.

-¿Que pasa padre? Tienes miedo que diga algo que no te guste.-

-Hay que terminar de cenar, la comida se enfriará.-

-¿Desde cuando te importa si me alimento? Que yo recuerde no te importo cuando me dejaste dos semanas sin comer.- Soltó como si nada el menor.

-Liam deja de inventar cosas, fue un día y fue por que no quisiste alimentarte.- Trataba de clamar todo pues su hijo podría ponerlo en grandes problemas.

-Oh lo siento se me olvida que debes hacerle creer a Checo que eres un buen padre.- Fue cuando dirigió su mirada al mexicano.

-Lamento mucho que tenga que escuchar la verdad de esta manera, pero usted me agrada mucho y no me gustaría que estuviera con este ser que se hace llamar mi padre.- Liam extendió su mano y checo la recibió.- Emoezamos de la manera incorrecta así que me gustaría presentarme nuevamente.-

-Me llamo Liam Leclerc Verstappen, tengo 19 años, estoy por cumplir 20, no me gusta la escuela, apenas empezare una carrera, nunca estudie derecho, es algo que no me gusta, mi padre lo engaño para que pensara que realmente estaba en una carrera, y que nosotros somos la familia perfecta, fui abandonado en mi hogar después de la muerte de mi abuelo, estuve solo en mi casa por una semana, en la segunda semana los Tsunoda me acogieron en su casa y me cuidaron como un hijo más hasta que este señor de aquí me alejo de ellos.-

Checo estaba sorprendido que no podía decir algo con claridad, su mente estaba recordando.

-Ya basta Liam, no sé qué te está sucediendo pero estás cruzando el límite, vas a incomodar a Sergio, así que por qué no vamos y hablamos fuera para que puedas clamarte.-

-Hablar afuera te refieres ¿a que me vas a amenazar con dejarme sin comer, o con que me vas a golpear? Por que ya hemos pasado cada una de ellas y realmente ya no sé cuál es peor.-

Max se había exaltado con eso y se levantó y estuvo a punto de abofetear a su hijo quien cerró los ojos por instinto pero el golpe nunca llegó.

Vio como Sergio se había levantado y le había sujetado el brazo antes de que esté impactará en su rostro.

Pato estaba igual de sorprendido pues esa reacción violenta en Max nunca la había visto, y ahora entendía mejor a Liam, definitivamente no quería que alguien con ese carácter estuviera cerca de su padre.

-No voy a dejar que le pongas una mano encima Emilian.-

Checo miro y se acerco a Liam mientras lo analizaba. -Tu eras ese niño.-

-Cariño, no le hagas caso Liam aveces suele alterarse, juega demasiados videojuegos que no sabe distinguir de la realidad, es mejor que vaya a su cuarto y descanse, mañana todo estará de maravilla.-

Max intentó acercarse a su pareja pero este se alejó.

-No se te ocurra acercarte Emilian, quiero hablar con  Liam sin que tú estés presente, esta más que claro que contigo no está seguro.-

-Checo, te has portado muy bien, y sé que te veías feliz con el, pero me di cuenta que ni tú ni pato pueden estar viviendo en esta mentira, desde que fui alejado de mi otro padre las cosas no fueron como me hubiera gustado o como él hubiera contado.-