-Buenas días Suamy- me saludó Checo sentándose frente a mi- Pensé que ibas a salir, ya sabes es el día libre.

-Saldré después- le respondí- ¿Algún plan para hoy?

El piloto negó- Descansar- estiró sus brazos- Max dijo que eras mexicana.

-He sí, de San Luis- respondí con una sonrisa tímida.

No recordaba haberle dicho al neerlandés mi nacionalidad.

-Huasteca.

-Tapatío- comenté de la misma manera.

-¿Es tu primer trabajo?- negué- Bueno, primero o no, tienes suerte. Prácticamente te están pagando por viajar, estar junto a uno de los pilotos más cotizados y si fuera poco, te ahorras el dinero de tus boletos y ves las carreras en el hospitality del equipo.

-Sí, creo que tengo suerte, mi hermana se moriría por estar aquí hablando contigo- admití dandole otra embarrada de mantequilla a mi beagle.

-¿Y en qué trabajabas antes?

-Era manager de relaciones públicas para una empresa de Texas.

-¿Houston?

-Austin.

-Woah, ¿Manager?- asentí- Debiste de haber sido de las mejores.

-Lo fuí, quiero decir, no es para escucharme egocéntrica o algo por el estilo pero, realmente me esforcé para llegar a ese puesto.

Checo me dió una sonrisa- Bueno, creo que sí te esfuerzas lo suficiente, también puedes llegar a ser una manager aquí en RedBull.

-Gracias.

-¿Y por qué renunciaste?

-Oh, hmm... ocurrió un problema y me despidieron- respondí.

No quería hablar sobre el tema. Quería que eso se quedara en el pasado.

-Bueno, sea lo que sea, es bueno tener a otro del país en el equipo- se puso de pie- Disfruta el día libre, el verdadero trabajo empieza mañana.

-Lo haré.

-No seas como Max y no te encierres en tu habitación en tus días libres.

-¿Lo hace?

-Esta en torneos, ese chico hasta soñando tiene que estar conduciendo- se rió- Disfruta tu día Suamy, quizá luego me dirás de dónde proviene tu nombre.

Se fue dejándome sola en el comedor del hotel. Termine mi beagle, pague el desayuno y fui a conocer un poco.

Para eso de las cinco regrese al hotel, me había topado al equipo en la recepción, les saludé rápidamente y subí a mi cuarto.

Una mano se detuvo entre las puertas del elevador.

-Hey Max- saludé.

El ojiazul pareció dudar pero termino entrando al ascensor.

-¿Recorriste la ciudad?- preguntó cuando las puertas se cerraron.

-Un poco, ¿Lograste ganar? Checo dijo que estabas en un torneo.

Sus cejas se alzaron un poco- Sí, es como una competencia virtual- explico.

Dí un asentimiento, estire mi mano y presione el número al que subía.

-Checo mencionó que eras manager en tu antigüo trabajo.

-Lo era.

-¿Y porque alguien que es manager renunciaría?

So It Goes... (M.V)Where stories live. Discover now