Trío De Pendejos

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Era de noche, estábamos en la sala común organizando la fiesta sorpresa de Pansy.

Mattheo y Theo se encargaban de la decoración, mientras yo me encargaba de las bebidas.

Prepare las bebidas y como toque final, les  heche unas gotas de extasis liquido que le robe a él profesor Slughorn.

No había pasado nada interesante y yo quería drama y si el drama no venía amablemente, tenía que forzarlo drogando a la mitad de Hogwarts.
Eso garantiza drama seguro.

Pueden cuestionar mis métodos pero no mis resultados.

Termine de preparar las bebidas y subí a mi habitación a arreglarme para la fiesta.
Ese día decidí usar un vestido azul marino que me llegaba por debajo de los muslos.

Estaba terminando de maquillarme cuando llamaron a la puerta.

–Pase– grite.

Entro Mattheo con un cepillo en la mano.

–Tenemos una situación– explico Mattheo.

–¿Necesitas que te peine?– me burle.

–Que graciosa eres– ironizo– no, no necesito que me peines, esto– señaló al cepillo– es un traslador.

–¿A donde vas?.

–A donde vamos querrás decir– dijo Theo entrando.

–Nos falto conseguir el pastel de Pansy– explico Mattheo– y su pastel favorito solo lo venden en el mundo muggle.

–Y como tu has vivido en el mundo muggle, será más fácil– dijo Theo con una sonrisa.

Me piden ayuda y yo estoy igual de estúpida que ellos.

–Bien, ¿Nos vamos ahora?– pregunte.

Ellos asintieron y los tres tomamos el traslador.

Aparecimos en una calle vacía.

–¿En donde estamos? – cuestione.

Lo único que se veía eran árboles y más árboles.

–Se supone que en Londres– dijo Mattheo no muy seguro.

–Supones– dije fulminandolo con la mirada.

Mattheo tenía una sonrisa nerviosa.

–Todo esto es culpa de Theo– apuntó Mattheo.

–¿Mi culpa? – cuestionó Theo con un gesto de indignación.

–Si, tu dijiste que le robara el traslador a Tom y que apareceriamos  en Londres– dijo Mattheo mirando mal a Theo.

–¿Como se les ocurre pensar que cualquier cosa de Tom es segura? –cuestione– par de pendejos.

–Trío de pendejos– me corrigió Theo.

–Gracias por incluirme, que amable de tu parte– ironice.

–¿Que haremos? – pregunto Mattheo.

–Podemos esperar a que nos rescaten milagrosamente o podemos ver si este camino llega a alguna parte– propuso Theo.

Claro como ellos no tenían tacones.

A regañadientes empezamos a caminar por la carretera.


























Mestiza (Experiencia En RD) Where stories live. Discover now