Capítulo dedicados a:
Gracias por su apoyo en el transcurso de la historia. Se les quiere....❤️
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La limosina me dejó frente a la gran mansión de Aistor. Reuní el poco valor que tenía para bajar del auto y plantarme frente al gran portón de hierro pintado de negro.
- Señorita.- volteo a ver al chófer mirándome desde la ventanilla del coche.- La espero o...
- Puedes irte Carlos.- le sonrío.
- Ok señorita, que tenga un buen día.- asiento con la cabeza. Carlos empieza a conducir..- ¡¡Carlos!!.- grité, éste dió un carraspeo de llantas que por el sonido imaginé al de un accidente.
- ¡¿Qué pasa señorita?!.- dijo nervioso y los ojos bien abiertos.
- Perón Carlos.- reí nerviosa.- ¿Me podrías hacer un favor?.
- Ho.. éso.- se recostó del espaldar su asiento aliviado.- Diga señorita..¿en qué le puedo ayudar?.
- ¿Podrías sacar a mis cachorritos a pasear?.- le sonreí.
- ¿Cómo?.- hizo una mueca.- ¿A los ocho?.
- Pues si.- enarqué una ceja.- ¿Acaso tengo quince?.
- No pero....
- ¿Entonces?.
Se rascó detrás de la cabeza.
- Es que yo quería decirle que me alquilo de guardaespaldas.- sonrió.- No sé pelear ni nada pero en lo que me rompen mi madre ya usted a corrido cómo dos cuadras.
Me lo pienso un momento. No estaría nada mal. De hecho es una buena idea, pero no puedo ni imaginar que le podría pasar algo por mi culpa. Además, ni que me estuviera metiendo con la mafia Rusa jajaja. Es Aistor por Dios.
- Gracias Carlos.- me dí la vuelta mirando la enorme mansión.- Pero no me hace falta un guardaespaldas.- empecé a caminar presionado el botón del timbre.
- Ya no la reconozco señorita.- me quedé quieta mirando a un punto fijo.- ¿Cuando se a vuelto tan fría?.
Bajo la cabeza
Hay Carlos. Ni yo misma me reconozco. Y no. Mi corazón no es frío. Con todas las cosas malas que me han pasado es de hielo y acero rellenado con Titanio chapeado con oro y blindaje nivel 7.
El sonido de la limosina en marcha me confirmó que se había retirado.
- Lo siento mucho Carlos.- susurré para mí mientras volvía a presionar el puto botón.- ¡¿Joder aquí no hay nadie o que?!.
Cilencio
- Genial lo que faltaba.- gruñí.
Ya que nadie me respondía miré los alrededores. Era un bosque precioso lleno de árboles frondosos. Me le quedé mirando un rato perdida mientras observaba algo a lo lejos moverse. Al principio pensé que era un conejo, últimamente es lo que más se ven por aquí. Pero no le dí importancia. Me dí la vuelta mirando con cansancio el gran portón.
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Luces Cámara Y ACCIÓN
Genç Kurgu-¿Y su abuela no sospecha?. - No, ¿Cres que la abuela de Caperucita vive a mitad del bosque por gusto?. No es la primera mujer que ama a un lobo. - ¿Y Caperucita también se enamoró?... - Si, prefirió al lobo porque no finge, y ella lo sabía desde el...
