47. También la última fiesta

19 2 0
                                    

OLIVIA

Me acerque a las gradas de la casa de playa de James donde se encontraba sentado Dylan.

—¿Que haces?—le di un pequeño empujón

Él me sonrió.

–Buenos días, pecas–volvió a mirar a la playa—.Me gusta ver el cielo.

Observe su cara, para suerte de Dylan no tenía ninguna marca del golpe pero Alex tenía un moreton enorme en  el ojo.

—Es muy pacífico estar aquí.

El asintió.

—Deberíamos tener nuestra propia casa de playa—sonreí—.Y venir seguido como si no tuvieramos exámenes o tareas

Él sonrió.

—Jack no se toma nada como descanso, entre hace un segundo a su habitación y estaba haciendo sus tareas.

Reí Jack tan responsable como siempre.

Dylan dejó de sonreír y me miró.

—¿Que tramas?

Se puso de pie y me alzó sobre su hombro, comencé a retorserme como un gusano mientras él se reía.

—No al agua—dije como Dylan es obviamente sordo me lanzó con todo y ropa.

—Esta fría—dije intentando nadar cosa que no se hacer.

Dylan se acerco y hizo que pusiera mis brazos en sus hombros.

—No pensabas eso la vez que te metiste a la piscina del departamento a las tres de la madrugada—levante mi cabeza para mirarlo.

—Esa noche estaba dolida y un poco borracha.

Dylan tomo mi cara con una mano, cerré mis ojos ante el contacto.

—¿Solo un poco?—susurró en mi oreja.

Trage saliva. Dylan apoyo su frente contra la mía.

—Lo siento—me ayudo a salir a la orilla.

No entendía el porqué de su disculpa pero no dije nada.

—Aquí estas corazón—James me dio un abrazo y me soltó para mirar su camiseta mojada—¿Que paso?

Señale a Dylan, él sólo sonrió con inocencia y saludo a James con la mano. James dio un suspiro cuando Dylan le sonrió.

—El desayuno está listo—Dijo James entrando a su casa.

Voltee a ver a Dylan, tenía una expresión triste, como perdido desde hace días. Me acerque y le di un abrazo haciendo que riera.

—¿Esta todo bien?—pregunte acercándome más.

—Si,¿ por que no lo estaría?

Lo solté y me encogí de hombros

—Pareces triste—señale con mi dedo y él lo tomó con una mano para luego enredar nuestros dedos, mire nuestras manos y sentí una chispa eléctrica por todo el cuerpo.

—Es la cara que me dieron mis padres—dijo moviendo nuestras manos, me gustaría saber si él sintió lo mismo que yo.

—¿Ya entran?—Alex se apoyo en la puerta y al mirar nuestras manos sonrió—. Lo siento no fue mi intención.

Solté su mano y no me di cuenta de lo brusca que fui hasta que vi la cara de Dylan. Alex sonrió incómodo y volvió adentro sin decir nada.

—¿Vamos?—Dylan señaló la puerta.

Asentí y por alguna razón intente tomar su mano pero el pareció darse cuenta y las metió a sus bolsillos.

—Por fin—James sonrió y me señaló un espacio a su lado.

Dylan se sentó al frente mio sin mirarme en todo el desayuno. Solo conversaba con Alex y con Christian.

—¿Todo bien?—Jack me pregunto mientras le daba una mordida a su tostada.

—Aja, ¿Y los tórtolos?—no veía a Nick y Alice por ningún lado.

—Se fueron a dar un paseo, ya sabes esas cosas raras que hacen la gente enamorada.

Levante la mirada para ver a Dylan platicar animadamente.

—Quien viene conmigo a una fiesta de playa—sonrió Christian.

Alex dio un salto y empujó a Dylan para que se apuntara.

—A mi me vendría bien distraerme —dijo Dylan mirándome.

—¿James?—Christian le pregunto levantando una ceja.

—Obvio que si—sonrió.

—¿Oliv?

—No—negué con la cabeza.

Abrieron la boca sorprendidos.

—Hasta Jack irá—señaló Christian.

—Ella irá—dijo James tomando mi hombro.

—No—lo mire—Si olvidas que paso en la última fiesta—intente susurrar y fue un muy mal intento porque todos escucharon.

Dylan intento ocultar su sonrisa mientras tomaba su café. Dios que vergüenza estaba sintiendo en este momento.

—Entonces si ira—Dijo James sonriéndome para que no sintiera tanta vergüenza.

—Entonces, nos vemos en la noche—Christian me sonrió con burla y salió junto con Alex.

James y Jack me sonrieron y se pusieron de pie pareciera que todos estaban en mi contra.

—Así que...—Empezó Dylan.

—No empieces—lo mire.

Se río de mi en mi cara.

—Este café está muy bueno—dije intentando cambiar de tema.

—También la última fiesta.

Abrí los ojos y empece a toser escuchaba sus carcajadas de fondo.

—Eso no es gracioso—lo señale, me puse de pie y deje el plato en la cocina.

Dylan me siguió por el pasillo donde estaba la habitación que nos presto a Alice y  a mi, intente cerrar la puerta antes que él entrará pero falle.

—Fuera de aqui—él empezó a hacerme cosquillas haciendo que me recueste en la cama mientras no dejaba  de reír.

—Para—intente decir entre risas—.Me voy a orinar—mentí.

Dejo de hacer cosquillas, acomode mi cabello.

—Me gusta la cara que pones cuando te da vergüenza algo.

Okey eso es lo más raro que alguien me ha dicho.

—¿Por qué?

—Las mejillas se te ponen de color rojo y abres mucho los ojos.

Me senté en la cama—.Eres bipolar.

—Claro que no—se sentó conmigo sonriendo.

—Hace unos minutos tenías cara de tristeza y enojo—lo señale—.Y ahora estas feliz.

—Soy él más feliz cuando estoy contigo.

Cerré la boca.

—Tengo que irme—me dio un beso en la cabeza y se puso de pie—.Nos vemos en la noche.

—No voy a ir a la fiesta—dije abrazo una almohada.

—Claro que iras—abrió la puerta—.No hagas que traigamos la fiesta aquí—cerró la puerta y se fue.

Me acosté y tape mi cara con la almohada.

Queridos ex'sWhere stories live. Discover now