Jungkook estaba serio observando las grabaciones de las cámaras, en eso escucha la puerta de la casa cerrarse y la voz de Nancy resuena.
Puede escuchar a su hijo llorar mientras Nancy lo regaña y la niñera al parecer lo lleva al segundo piso, dónde ve a su hijo a través del vidrio de cristal.
Jeong San ve a su padre en la oficina y entra llorando a ésta, Jungkook y le da una última mirada a la pantalla, dónde ve profundamente dormida a la castaña en el sofá de la sala. Deja en espera el computador y carga a su hijo colocándolo en su regazo, seca sus lágrimas y le quita el bombón que tiene en su boca para que hable.
— ¿Qué pasó, Jeong San?¿Por qué lloras? —Pregunta angustiado, Jeong San chilla antes de hablar y su padre le da un beso en la frente para que se calme más.
— Ma-má...
— ¿Qué pasó con mamá? —Pregunta Jungkook, empezando a molestarse, ya es la segunda vez que su hijo llora por culpa de Nancy.
— Llora porqué no le quería dejar comer el bombón, y porqué lo regañe al ver que se lo comió sin importar lo que le dije. —La voz de Nancy se escucha desde el umbral de la puerta, los dos dirigen la mirada a ella y Jungkook vuelve a mirar a su hijo después de escuchar lo sucedido.
— ¿Qué pasó, Jeong San?¿Qué te había dicho sobre ser obediente? —Le pregunta, el niño llora y abraza a su padre y Jungkook suspira mientras atiende a su abrazo.
Cuando su hijo se duerme en sus brazos lo lleva a la habitación, dejandolo sobre la cuna y enciende su juguete para relajarlo.
Nancy entra y lo observa desde el umbral de la puerta, cuando Jungkook voltea para irse ella se acerca para masajear su cuello, sin embargo, Jungkook la aleja.
— Se supone que yo debería estar enfadada contigo —Le dice molesta al ver que Jungkook sale de habitación ignorandola.— Jungkook.
— ¿En serio? —Pregunta incrédulo, Nancy tuerce los ojos y lo sigue hasta su oficina, dónde él sigue observando las grabaciones.
— De acuerdo, como quieras —Dice molesta y bufa antes de salir de la oficina y azotar la puerta, Jungkook resopla y vuelve a dirigir la mirada a la pantalla de la computadora.
Lisa se veía muy contenta hablando por teléfono, lleva una sonrisa en sus delicados labios rosados. No entiende como de estar dormida tranquilamente en el sofá, termina hablando con una sonrisa de enamorada por teléfono, ¡A estás horas!.
(...)
Esa misma noche se coloca su pijama, y se queda dormida en la sala de estar viendo una novela. Puede escuchar los murmullos de las personas que viven abajo, pero no le toma importancia y de tanto pensar se queda dormida en el sofá.
Una llamada la desubica y se levanta asustada, toma el teléfono de la mesa de la misma sala y contesta.
— ¡Lili! —La voz chillona de su prima la hace sonreír.— ¿Cómo estás? —Le pregunta, Lisa sonreír.
— Ire, que milagro que me llamas —Murmura Lisa, su prima ríe nerviosa.
— Mi tía me ha pedido el favor de hablar contigo —Le dice, Lisa entiende y se sienta mientras vuelve a encender el televisor.— Ya me enteré de tu embarazo, ¿Cómo haz estado?
— La verdad es que mal —Dice— Me mareo demasiado y algunas veces me siento triste, luego feliz, es algo extraño —Cambia el canal.
— Esas son las primeras etapas del embarazo, ya luego vas a experimentar las siguientes y te aseguro que no son tan fáciles, entonces vete acostumbrando...
— Lo dice la mujer que tiene tres hijos en casa —Le dice irónica.
— Soy doctora, Lisa —Le recuerda— Lo sé por lo que puedo leer y estudiar...
— Era una pequeña bromita...
— Necesito que me pases tu dirección, porqué te voy hacer un chequeo, ¿Entendido? —Consulta.
— Está bien, por el chat te la envío.
— Cuídate por favor, y salúdame a Ji- Eun, hace rato no hablo con ella —Murmura, Lisa sonríe leve.
— En estos momentos se encuentra en Japón, está celebrando su luna de miel —Comenta.
— Me parece que tardaron mucho para poder casarse —Opina Irene, Lisa ríe. Su hermana había tardado demasiado en lograr casarse. Primero habían tenido una hija y después ya decidieron casarse.
— Sí..., pero eso no es problema de nosotras para criticar —Dice Lisa, Irene ríe.
— Tienes razón —Murmura— Bueno, me despido está algo tarde y tengo que volver a mi turno, hablamos mañana Lili, cuídate...
— Chao, Ire... —Murmura.
Cuando la llamada se corta suspira y apaga el televisor, hace tanto rato había olvidado completamente la existencia de su hermana y ahora que Irene la mencionaba pudo recordarla.
Se promete a llamarla mañana y va a su habitación para dormir, pero en la cama da tantas vueltas sin lograr dormir.
Por su mente pasa Jungkook y los planes que él mismo le había dicho. Mañana en la mañana viene su prima la doctora a checar su embarazo y en la noche tiene una cena con los padres de Jungkook, tanto como los de Nancy, menos los suyos y eso le parece injusto.
Aunque después de pensarlo un poco sabe que está mejor así, puede imaginar a su grosero padre en la cena y lo que menos quiere dar es una mala imagen, más de la que tiene por parte de la familia de Nancy. Y aunque cree que ellos le harán mala cara o su presencia les va incomodar y fastidiar, no puede predecir lo que pueda pasar.
Piensa en su madre después, se pregunta su mami que estará haciendo en estos momentos, solloza mientras la extraña, piensa que la dejó en muy malas manos, pero ella misma lo permite.
Mañana si le queda tiempo va y la visita, o la llama para comentarle todo lo que había ocurrido en estos días y como paso de estar en una habitación de un hotel a un apartamento completamente hermoso.
Y pensando en tantas cosas termina cayendo en un sueño pesado, con pesadillas fuertes.
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